St.Nazaire vs Castilla; Climas

Como esta semana el tiempo aquí en Saint Nazaire, se puede decir que está siendo un auténtico asco, (se pasa todo el día lloviendo y aun no he visto el sol ni asomarse entre las nubes), se me ha ocurrido hacer una comparación entre los climas de España y de Francia.

Desde que estoy aquí en Saint Nazaire, los días de sol no han sido muy abundantes, ya que a las dos semanas de haber llegado, estuvo lloviendo de continuo, (esto no quiere decir que no parara, sino que llovía todos los días), algo así como 15 días, sobre todo por las noches, que se alternaban entre buenas “chaparradas” y lluvia tonta, “calabobos” como se dice en mi zona. Pero el frío no llegó hasta el mes de noviembre, cuando ya tuve que ponerme la cazadora de invierno y sacar la bufanda, los guantes, calcetines gordos… Aquí en Saint Nazaire, al estar a la orilla del mar, el viento es también una constante y cuando se pone a soplar, lo hace con ganas. Dicho esto, el paraguas, a veces y sobre todo cuando hace mucho viento, se queda como una herramienta inservible que lo único que puede hacer es sacarte un ojo con las varillas que se han salido por el ya citado “aire en movimiento”. Desde que llegué, lo cierto el que el sol no se ha querido asomar mucho y los pocos días que lo ha hecho tampoco ha sido un día soleado para enmarcar en los anales de la historia. Ya me esperaba algo así antes de llegar a Francia, pero de imaginarlo a vivirlo hay mucha diferencia. Los pantalones cortos que me había traído los he usado para moverme por la residencia y estar en la habitación y el bañador que me eché a la maleta, (ingenuo de mí), ahí sigue y creo que ahí seguirá hasta que llegue junio, (espero). La humedad al estar todo el día lloviendo, ayuda al frío a meterse hasta los huesos, por lo que a un servidor se le quitan las ganas de salir a la calle todas y cada una de las tarde de lluvia que nos regala Saint Nazaire, (y como digo no son pocas). Aunque esto también tiene cosas buenas y una de ellas son por ejemplo los paisajes de toda la zona, donde el color predominante durante todo el año es el verde .

Habiendo ya criticado un poco el clima de el noroeste de Francia en general, y desconociendo realmente lo que me depararan los meses siguientes y hasta que se acerque la época más calida, me toca hablar del clima de Valladolid, Segovia y en general del centro de España o al menos de la meseta. Cuando salí de mi querido pueblo de Segovia el día 3 de septiembre, rumbo a Francia, no recuerdo la temperatura exacta, pero puedo asegurar que era un día de calor. Normalmente y siempre dejando hueco a las excepciones, hasta mediados de Septiembre el clima es muy agradable y el verano va dando sus últimos coletazos. Otros años, finales de septiembre es la época en la que todo hijo de vecino empieza a ponerse la chaqueta y por las noches la temperatura empieza a bajar bastante.

La llegada del otoño, además de la caída de las hojas, trae consigo la caída de las temperaturas, y por supuesto la lluvia. Es una época que a mi personalmente no me va mucho, ya que me parece un tiempo que no es “ni pa ti, ni pa mi”, una mezcla de invierno mojado, que ni hace frío ni deja de hacerlo… Vamos que no me gusta nada en otoño. Lo bueno del otoño es que siempre trae detrás el invierno.

El invierno en mi zona es frío. En ciudades como Valladolid, Segovia, Burgos, Ávila… lo que es Castilla y León en general, las temperaturas caen mucho y rara es la mañana en la que no nos despertamos con el termómetro bajo cero. Las heladas también son una constante, sobre todo en los meses de diciembre y enero, extendiéndose también algunos años hasta febrero. Lo mejor del invierno es que trae consigo la navidad y aunque hace como ya he dicho mucho frío, es muy raro que llueva, siendo más normal la nieve y aun más que no haya ningún tipo de precipitación. (Creo que os habréis dado cuenta ya de que la lluvia no me gusta nada).

Según estoy escribiendo esto, adivinad lo que está pasando en la calle… Si, se ha puesto a llover.

Por donde iba. El invierno a mi personalmente es una época que me gusta mucho, y es una buena época en mi opinión para hacer turismo, sobre todo por ciudades grandes, donde fijo, la gente estará por la calle y habrá cierto ambiente festivo.

Dejando de lado el frío, uno ya empieza a disfrutar de los primeros días de sol, del florecer de los campos y por supuesto de la alteración de la sangre que trae consigo la primavera. Esta época también me gusta, principalmente porque es una temporada de cambios, el paisaje cambia, las calles cambian, el cielo cambia, hasta la gente cambia. Y todos estos cambios, (y siempre bajo mi parecer), son cambios a mejor. en esta época se empiezan a ver las primeras terrazas asomar a la puerta de los bares, siempre y cuando la lluvia lo permita, porque no hay que olvidarse de que en esta época y sobre todo en las primeras semanas de transición desde el invierno, suele llover en abundancia, y es que ya lo dice el dicho popular, “En abril, aguas mil”. Pero aun con todo lo que pueda llover, los primeros días de sol y poder ver más de veinte grados en el termómetro, no tiene precio. Hasta esa chica que no te ha dirigido la palabra en todo el curso te saluda cuando te la cruzas. Lo malo de esta época es que con el buen tiempo también llegan los exámenes, pero bueno, todos sabemos que el verano es lo siguiente y lo suyo es intentar aprobarlo todo y tener el verano despejado.

Y es el verano, ese tiempo que a todos los que vivimos otoños lluviosos e inviernos fríos, nos llena la sangre de vida. Los primeros días de verano son lo mejor que hay. La llegada de las vacaciones para los estudiantes, las primeras fiestas de los pueblos, los primeros días de piscina y chiringuito… Siempre teniendo que trabajar o estudiar, pero siempre intentando aprovecharlo al máximo. Además en verano, es cuando se pueden hacer planes más fácilmente con los amigos. Es buen momento para viajar, para salir, para estar en la calle, (a la sombra claro) y en resumidas cuentas para disfrutar. Los veranos en Castilla son muy calurosos y como habréis podido intuir ya, la amplitud térmica de nuestra zona es muy alta.

Lo bueno del clima de castilla, es que nunca es igual durante más de cuatro meses, pudiendo así disfrutar cada uno de lo que más le gusta en diferente épocas del año. Calor, nieve, lluvia, frío, granizo… Tenemos de todo y bien variado. Haciendo de nuevo alusión al clima ya mencionado de Saint Nazaire o en general del noroeste de Francia, el clima castellano, es un clima mucho más variado y en el que por supuesto no se pasa el 50% del día lloviendo.

Este, es un artículo de opinión, de mí opinión, pero creo que se acerca bastante a la realidad medible y constatada. Pero por si acaso, voy a buscar unas gráficas de lo que son los climas de Valladolid-Segovia, (por coger un punto concreto), y el clima de Saint Nazaire-Nantes, y voy a compararlos con datos y números, para que todos podáis tener vuestra propia opinión de ambos sin tener necesariamente que conocerlos. Puede que si los echáis un vistazo y no os agrada demasiado la lluvia os lo penséis dos veces antes de iros por el norte de Europa. 

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