5 trucos que te harán la vida más fácil, si vives solo.

Pasar de vivir con tus padres a vivir solo, a veces puede parecer complicado, y seguramente los primeros días serán un caos. No te preocupes, es normal, por ahí hemos pasado todos. Con la experiencia, he aprendido algunos truquitos para sacar la casa adelante y no morir en el intento. Los quiero compartir contigo, así que ahí van.

5 trucos que te harán la vida más fácil, si vives solo:

1. Después de muchas cebollas podridas en la nevera, descubrí un truco del almendruco del cual me siento tremendamente orgullosa. Cuando realices tu compra del mes, dedícale un tiempo a trocear los alimentos y mételos a congelar.
   
   Yo normalmente pico la cebolla, las espinacas y los ajos y los guardo en el congelador. Así no se me ponen malos y cada vez que los necesito, cojo un poquito lo pongo en la sartén y guardo el resto para otra ocasión. Seguramente muchas amas y amos de casa ya sabrían este truco desde hace años, pero bueno, yo lo descubrí con 22 años y tan feliz.
   
   

   

   Photo by Dev on Unsplash

2. !No compres tuppers¡ (tapers para los amigos) .Cometí el error de comprarme un juego de tuppers la primera semana, los perdí a las 4 semanas. Obviando el hecho de que hay una fuerza superior que se lleva los tuppers a otra dimensión (ya descubrirás a que me refiero, si no lo sabes ya), no es necesario comprar tuppers para guardar las comidas sobrantes. 
   
   Usa los botes de cristal y los botes de plástico que vas gastando al comprar conservas o el del Cola Cao; primero porque así ahorras dinero, y segundo por que le echas una mano al planeta dándole una segunda vida a esos productos de almacenaje.
   
   

   

   Photo by Bárbara Montavon on Unsplash

3.  No compres más jabón de manos. Uno de los trucos que aprendí de viajar tanto y ser estudiante, es arrasar con lo que veas cuando vas a un hotel. Durante tu estancia Erasmus vas a viajar muchísimo y te voy a enseñar un truco que vale, es un poco síndrome de posguerra, pero qué narices ¿eres estudiante no? Y quieres ahorrar... ¿o no? 
   
   Pues lo que tienes que hacer cada vez que vayas a un alojamiento, hotel, hostal etc. es pillar el jabón de pastilla y los champús que están allí y llevártelos para casa. Este truco también vale con los rollos de papel higiénico, pero no con las toallas, eso creo que sí que es un poco ilegal.
   
   

   

   Photo by Lasse Møller on Unsplash

4. Ve a comprar con la maleta. De los creadores de “cómprate la maleta de 4 ruedas chachi para no reventarte la espalda durante los viajes”, llega “usa esa misma maleta, para hacer la compra”. A parte que cumplir perfectamente su función de mantener tu espalda en mejores condiciones y pasar un poquito de vergüenza al principio, es un truco bastante útil (sobre todo si tienes que ir cargada como una mula subiendo cuestas, como me sucede a mí). 
   
   Pasas tu compra por la caja y mientras la cajera los va tickando, abres tu maletita (te va a mirar todo el mundo, pero tú muy digna, actúa como si nada) y vas metiendo las cosas dentro. “Ande yo sin esfuerzo, ríase la gente”.
   
   

   

   Photo by Anna Sullivan on Unsplash

5.  Coge las bolsas de la zona de las frutas y las verduras del supermercado. Si en tu país cobran por las bolsas, y tienes que hacer una compra pequeña rápida, tengo la solución a tus problemas. Coge unas cuantas bolsas de la zona de las frutas y las verduras del supermercado, y métetelas en un bolsillo. Realiza tu compra de manera natural y después te sales con todas las cosas en la mano fuera del establecimiento, las dejas en una superficie plana y las metes en las bolsas. 
   
   No petes mucho las bolsas pues algunas no son muy resistentes, pero oye algo es algo, lo mejor es ir con tu propia bolsa de tela metida siempre dentro del bolso, pero si esta te falta; siempre puedes hacer este truco.
   
   

   

   Photo by frankie cordoba on Unsplash

Espero que os haya servido, si tenéis alguna duda o sugerencia me lo podéis poner en comentarios, os leo. ¡Nos vemos pronto!

Galería de fotos