¿Cómo comenzó todo?

Todo comenzó el 08/09/2012, yo junto a Ana Nieto empezaba mi experiencia Erasmus. Ambas cogimos el avión en Sevilla que nos llevaría hasta Charleroi... y después de algunos autobuses, trenes y varias horas: llegamos a Valenciennes. Valenciennes es una pequeña cuidad del Norte de Francia. Una cuidad, en la que rara vez se asoma un rayo de sol y en la que el frío es un fiel compañero.

El día en el que comenzó todo lo recordaré siempre, para no empezar tarde, nuestras anécdotas se remontan al aeropuerto: Ana y yo entramos en el baño (que por cierto, estaba muy sucio), Ana entro después de mí y acto seguido una señora mayor (típica guiri blanca, canosa y de ojos claros); la señora muy molesta por la suciedad del baño (que ya estaba sucio antes) quería que Ana limpiase el baño. Como es lógico, Ana tras salir de su asombro le dijo: "Sorry, I was there before.".

El vuelo no fue del todo tranquilo, sinceramente, yo lo pasé bastante mal, ya que volamos con Ryanair; yo que soy muy aprensible y que los forzosos aterrizajes de Ryanair estaban a la orden del día en la prensa ya os podéis imaginar...

La verdad es que no tuvimos problemas para comunicarnos en francés, la gente a la que solicitamos ayuda fue bastante amable. Además sabíamos todos los pasos que teníamos que seguir para llegar porque Marta, una chica que estuvo aquí de Erasmus el año pasado se ha vuelto a venir y nos había explicado el camino con precisión.

Cuando llegamos a Valenciennes, después de una gran compra en el Carrefour y haber conocido a todos los amigos árabes de Marta y algún que otro español, Ana y yo nos instalamos en mi habitación, ya que la suya estaba muy sucia y no sabía si era su habitación definitiva (ya que llegamos un sábado y las habitaciones eran temporales hasta previo aviso).

Al principio, esto parecía una prisión sombría, alejada de la mano de Dios, una cuidad en la que no había nada interesante que hacer... Pero, como dicen por ahí, las apariencias engañan y es que ahora mismo pese a que Valenciennes no es la cuidad más conocida de Francia, no la cambiaría por ninguna otra destinación, ya que aquí he conocido  a personas maravillosas, por las que ya siento cierto cariño: Alejandro Vázquez, Ana Nieto, Marta Vara, Felipe Moreno, Saúl Isern, Diego Fuerte, Antonio Cacciapuoti, Giuseppe Leo, etc.

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