Zakopane, la capital polaca del invierno

Como hablé en mi segundo post de Cracovia, es muy típico, una vez estáis en la ciudad, hacer una excursión a Zakopane.

Se trata de uno de los sitios turísticos más famosos de Polonia, una ciudad situada a los pies de los montes Tatra, cordillera entre Polonia y Eslovaquia. Se trata de una ciudad no muy grande, que merece mucho la pena visitar sobre todo por un motivo, el paisaje.

Cómo llegar

A Zakopane es posible llegar tanto en autobús, como en tren. Tened en cuenta que en autobús el trayecto será más corto. Se puede llegar tanto desde Cracovia, como de una serie de ciudades polacas, como Varsovia, o Lublin (no es una ciudad tan grande, pero yo cogí un autobús directo desde aquí, para que sepáis que es posible).

Dónde alojarse

Nos alojamos en una de las muchas villas de madera que hay en el pueblo. El nombre de la misma era Willa Pod Banderą, localizada en la calle Tatary, donde había muchas otras opciones. Nos encontrábamos a unos 25 minutos de lo que es el centro de la ciudad. Os recomiendo totalmente este tipo de alojamientos, te hacen disfrutar de la estancia en un lugar tan de cuento aún más. Eso sí, debéis cogerlo con tiempo, ya que se suelen llenar mucho, sobre todo en época de vacaciones, en la cual os debéis dar mucha prisa, u os quedaréis sin alojamiento.

Dónde comer

En el centro de la ciudad, encontraréis diversos puestos de comida, donde ofrecen la comida típica polaca.

Una de las noches cenamos en el Stek Chalupa, un asador de carne en el centro de la ciudad, donde estaba todo riquísimo, y nos salió muy bien de precio.

Cuándo visitar

Las casas de montaña, el aire puro, y tanta vegetación, sin duda te hacen pasar una estancia formidable. Lo bueno de este lugar es que merece la pena visitarlo, tanto en verano como en invierno. Yo fui en invierno, encontrándome un pueblo totalmente nevado, propio de una película.  Pero, a pesar de haber quedado enamorada de este lugar en época invernal, me gustaría, si tengo oportunidad, visitarlo también en verano. El sitio debe de seguir estando precioso (y casi puedo asegurar que lo está, por la cantidad de fotos que he visto). En verano, el clima nos permite llevar a cabo la realización de diversas rutas de senderismo por los preciosos paisajes de la zona. En invierno también se pueden hacer, pero ya os digo que tardamos por lo menos el doble de lo que hubiéramos tardado en verano (la nieve es un gran impedimento).

Qué hacer

Al llegar a la estación de autobuses (localizada en el centro), tuvimos que andar unos 25 minutos hacia nuestro alojamiento. Ya esa calle nos sorprendió, y empezamos a hacer fotos como locos de lo bonito que era aquello. Dejamos las maletas y decidimos dar una vuelta por el pueblo. El pueblo tiene unas cuantas cosas que podéis visitar, como el Cementerio  Nacional Peksowy Brzyzek, o varias iglesias, bastante pequeñas y bonitas de ver.

Al día siguiente, queríamos realizar una ruta, así que decidimos hacer la de Morskie Oko. Tuvimos que ir a la estación de autobuses de nuevo, y coger un bus al lugar (nos costó unos 3€ cada viaje). Allí, ya empezamos a andar. Todo está perfectamente señalizado, y además, suele haber muchos turistas, por lo que no tiene perdida. Se hace algo cuesta arriba, pues es un ruta que debería durar unas 2-3 horas, y con la nieve se hace algo más complicado, pero no imposible. El paisaje merece totalmente la pena, me sentía como en una película.

A medio camino hay un área de descanso, pero yo os recomendaría llevar algo de comida y agua en una mochila (tampoco os carguéis mucho, pues el peso hará aún más cuesta arriba vuestros pasos).

No recuerdo exactamente los kilómetros que hicimos, pero lo soportamos perfectamente. Llegamos a un lago totalmente congelado, algo tapado por la niebla (lo cual, parece que no, pero era alucinante). No sé si habéis visto la película Monstruos S.A., pero estar allí me recordó totalmente a la escena del Yeti. Estuvimos allí un rato y volvimos. Fueron muchas horas las que dedicamos a este trayecto, pero lo bueno es que al estar todo nevado, sigue habiendo luz aunque sea de noche. Volvimos en el mismo bus que nos trajo.

Al día siguiente fuimos al laberinto de hielo de Zakopane, que está clasificado como el más grande del mundo. Es un sitio curioso de ver, y la entrada son unos 10-15 zlotys, si no recuerdo mal. Al lado del laberinto, se localizaban unas de las pistas de ski de Zakopane (hay varias), por lo que el grupo se dividió. Toda esa zona es muy turística, ya que aparte de esto, también hay un castillo de hielo, y varias actividades para niños. Hay varios puestos de comida, con comida típicamente polaca.

Recomendaciones

Quería daros una serie de recomendaciones, a nivel vestimenta, pues es un lugar frío en invierno, y si tenéis pensado hacer una ruta como la que yo hice, necesitáis ir preparados.

Llevaros ropa térmica (en Decathlon venden a buen precio). Yo también compré unos calcetines térmicos, que me salvaron la vida por completo. En cuanto a abrigo, un plumas, o un buen abrigo de nieve os hará pasar una estancia mucho más agradable. Pero lo más importante de todo es que llevéis un calzado adecuado, ya que si la nieve traspasa vuestros zapatos se os calarán los pies, lo que hará que no sirva de nada todo lo que llevéis puesto, ya que sentiréis el frío por todo el cuerpo. Y alerta, resfriado.

¡Espero que os animéis a visitar este bonito pueblo polaco!

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