Primer viaje: Zakopane

Empezamos con la primera entrada de este blog sobre las ciudades de Polonia que visité durante los diez meses de mi Erasmus en Cracovia. Si queréis información sobre qué ver o hacer en Cracovia, también publiqué una entrada en un blog sobre todas las cosas interesantes de la ciudad. Breslavia es otra de las ciudades que visité y fue la que más me gustó así que también tiene una entrada por separado que ya escribí hace un tiempo. 

Zakopane, al sur de Cracovia y pegando a Eslovaquia, fue el primer sitio que visité cuando estaba en Cracovia. Fui a mitades de Octubre cuando aún no había nieve en ninguno de los dos sitios. La elegimos porque buscábamos algo de naturaleza y toda la gente la recomendaba. 

Cómo ir 

Nosotros fuimos en autobús, con la compañía Flixbus, que es la más barata y famosa que hay en Polonia, además de en otros países. El precio varía bastante según la hora que elijas; si coges los autobuses en las horas mas baratas puedes ir y volver por 8 euros, y se tarda 2 horas y 20 minutos más o menos. 

Dónde alojarse 

Zakopane es bastante pequeña así que no tiene una infinidad de opciones para alojarte. Los hostels son siempre la opción más barata y para dormir una noche o dos es lo mejor porque, aunque la calidad no es muy alta, llegas tan cansada que lo único que te importa es dormir. Escogimos Target Hostel, donde ya habían estado unos amigos antes que nosotros. La dirección de este hostel es Henryka Sienkiewicza 3b, está bastante cerca del lugar donde para el autobús. 

Costaba alrededor de 6 euros por noche con desayuno incluido, pero tenías que levantarte temprano o no llegarías a coger ni una tostada. Normalmente en los hostels cuando ofrecen desayuno es pan, mermelada, leche, té y cereales. El hostel en sí estaba muy bien, las camas eran cómodas, los baños estaban limpios y  había una sala común con varios sofás y juegos de mesa. Había mucha gente joven y buen ambiente; me gustó mucho que las paredes están decoradas con dibujos y frases de la gente que se queda allí. 

La ubicación del hostel es también uno de sus puntos fuertes, ya que nos fue muy fácil movernos por el pueblo desde allí y encontrar los lugares de interés. 

Qué ver en Zakopane 

La atracción principal de Zakopane es la zona de las montañas Tatra, compartidas con Eslovaquia, tanto que si haces una ruta que llegue hasta arriba, te llegará un mensaje al móvil diciendo "Bienvenido a Eslovaquia". 

Para llegar a la zona de las montañas hay que coger un autobús que cuesta menos de 1 euro y a veces se les olvida cobrarte. Me llamó la atención que el autobús llevaba mantas para usarlas si tenías frío. 

Recomiendo ir desde temprano y pasar todo el día haciendo senderismo en este Parque Nacional ya que hay muchas cosas que ver. En la entrada hay varios carteles que indican todas las posibles rutas que puedes hacer, de distintos niveles de dificultad y por el camino también está señalado con rayas de colores en los árboles, aunque debes tener cuidado porque algunas son parecidas. Nosotros nos perdimos de camino a Morskie Oko pero en el camino que encontramo vimos cosas preciosas así que mereció la pena. Para ir a Morskie Oko,un lago rodeado de montañas creando un paisaje increíble, hay que seguir el camino de asfalto, que es por donde más gente va y se tarda alrededor de 2 horas. Pero si eres un poco explorador/a y te gusta más andar por los bosques, en un día entero te da tiempo a hacer varios recorridos. 

Cuando llegamos a Morskie Oko no pudimos ver nada por la niebla que había. Literalmente, nada más lejos de mis pies; lo que también era impresionante pero me gustaría haber podido ver el lago. Así que es más recomendable ir en primavera o verano, aunque también debe ser muy bonito verlo todo nevado.

El pueblo 

Lo mejor es ir para al menos dos días y dedicar uno a ver el Parque Nacional y otro a ver el pueblo; aunque la parte del pueblo se puede ver en una mañana. 

A mí me encantó porque es muy diferente a lo que había visto hasta entonces. Las casas de allí son de estilo Zakopane, un estilo único de este lugar que es muy fácil de identificar y te llamará la atención por la forma de sus casas. Una de las atracciones turísticas que hay es la casa del revés, para la que hay que pagar una entrada de un precio no muy alto que merece la pena por la sensación al estar dentro. La casa está del revés e inclinada y es obra de un autor que quería representar sus ideas políticas en la época del comunismo. 

Otra de las cosas que más me gustó fue el cementerio de personas célebres, que por el estilo de las tumbas y la vegetación parecía sacado de un cuento de elfos y hadas; costaba algo pasar pero nosotros pasamos sin darnos cuenta con otro grupo y supimos que había que pagar cuando ya habíamos salido y vimos a la gente pagando, aunque no creo que sea caro. Cuando fuimos, y supongo que estará permanentemente o al menos todos los domingos, había un mercado de productos típicos polacos justo al lado del cementerio, un poco más abajo; muy interesante de visitar con comida, ropa, instrumentos de cocina...  Justo en la entradadel cementerio hay una iglesia de madera digna de ver, porque desde fuera parece otra de las casitas Zakopane  y nunca había visto una iglesia así. 

Otra de las cosas para visitar es la calle más antigua de Zakopane, que está a las afueras pero lo cierto es que me decepcionó un poco porque a pesar de que había 2 o 3 casas curiosas, lo demás eran simplemente casas normales.

Cuando ya hayas visto todos estos puntos interesantes, hay alguna iglesia muy bonita dentro del pueblo y simplemente pasear por sus calles es precioso. 

Dónde comer 

Si viajas en modo ahorrativo extremo, también hay supermercados Biedronka en Zakopane, que son los más baratos y tienen muchas opciones. Pero si quieres comer en algún restaurante (que también son baratísimos y puedes comer por 5 euros), recomiendo que busques uno de comida típica polaca en una casa de madera. Nosotros estuvimos en uno muy bonito y acogedor pero no he encontrado el nombre. 

Otras de las cosas típicas de Zakopane y de Polonia en general, son el vino y la cerveza calientes. Puede sonar a locura y de hecho la cervea es bastante asquerosa, pero al vino caliente le echan especias como canela y aunque al principio es raro, le acabas cogiendo el gustillo, sobre todo cuando hay varios grados bajo cero. 

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