Centro Histórico de Zacatecas

Zacatecas es una ciudad muy acogedora, un lugar que, a pesar del paso del tiempo, mantiene sus constumbres. Una de ellas es que, en el centro, no encontrarás los comercios abiertos antes de las diez de la mañana, lo cual puede ser algo frustrante. Sin embargo, eso también tiene su encanto, ya que podrás caminar por las calles sin mucha bulla y poder conocer la vida cotidiana de las personas que salen al trabajo o la escuela. 

Mi recomendación es que localices los portales, ya que justo en frente puedes encontrar al señor del aguamiel. Esta bebida es muy típica de la región desértica de esta zona de México y se saca del maguey; puede parecerte un sabor extraño, pero te recomiendo que experminetes su dulzura y quizá te enamores de ella. Hay varios señores que llegan desde las comunidades a comerciar con su aguamiel, puedes localizar a otro señor en la calle Tacuba, justo en la esquina donde podrás admirar la fuente de los faroles; también si caminas en esa calle en sentido contrario de la Catedral, podrás llegar al mercado de comida. Menciono esto porque ahí es a dónde quería que llegaramos en nuestro recorrido matutino, puesto que ahí encontrarás la comida más típica de la región y además curiosear a gusto. 

En el mercado Arroyo de la Plata recomendaría ampliamente la birria, hay varios puestos pero la más famosa es la de Don Polo, que es un platillo preparado con carne de cordero, sazonado con chile, diferentes especias y cocida al vapor. También, si prefieres, ahí mismo puedes encontrar gorditas, chiles rellenos, asado u otras comidas deliciosas. Después de que desayunes puedes recorrer el mercado, si es que te encanta -como a mí- conocer los productos locales. Si es tiempo de tunas, ufff, será una delicia que pruebes esa fruta desértica, nace de los nopales y existen de varias clases: tunas rojas (cardonas), blancas y amarillas. Tienen un sabor muy dulce pero cuidado con comer demasiadas jeje.

Sal del mercado y regresa rumbo a la calle principal que es la avenida Hidalgo, la reconocerás fácilmente porque es la que te lleva desde los arcos del acueducto hasta la fuente de Los Conquistadores y sobre ella están los portales, el Teatro Calderón y La Catedral. Zacatecas es una ciudad que se disfruta ampliamante si la caminas, pues descubrirás el encanto de los callejocitos y las plazuelas. Además, la vida cultural es muy agitada y todo el año te puedes encontrar con una agenda llena de conciertos, obras de teatro, presentaciones de libro, lectura de poesía, presentaciones de danza, etc. Por eso, antes de que empieces a palomear los eventos a los que quieres asisitir, te recomiedno que hagas un recorrido previo para que observes la arquitectura colonial barroca.

Empieza en Portales, ahí, en un costado, está la Bodeguilla, donde puedes tomar un café, cerveza, vino, tapas españolas u otro bocadillo y sentarte un rato a descansar. Ese lugar es muy concurrido por artistas y gente invlucrada en la cultura local; los meseros y el encargado del lugar son gente de lo más amable y te puedes poner a platicar o conocer gente interesante. Ya sea que hagas esa parada o continúes rumbo a Catedral, al menos ya localizaste el lugar para más tarde, ese espacio se llama Plazuela de la Caja. Avanzas un poco más y antes de llegar a la esquina tendrás la mejor vista de la ciudad, ya que frente a ti estará el Teatro Calderón, La Catedral y el cerro de la bufa al fondo. Será fácil reconocer al teatro ya que es de una belleza inaudita y podrás entrar a conocerlo o simplemente sentarte afuera en las escalinatas a descansar o leer un poco. Justo en frente está la Plazuela Goytia, donde a veces toca la banda del Estado y también puedes sentarte en los escalones.

Ufff, no te canses, apenas comienza!!!

Ahí en la acera de la derecha, junto a la palzuela, está el mercado González Ortega, donde venden artículos de plata y productos locales, pero los precios son un poco caros. Te aconsejo comprar artesanías con los artesanos del Callejón de Cuevas que es donde están ubicados algunos. En la esquina, ya sólo tendrías que cruzar la calle para llegar a Catedral, pero es importante que entres a conocer El Acrópolis, restaruante muy concurrido por propios y ajenos; tiene obras de los más reconocidos artistas plásticos zacatecanos y el café es muy rico. También puedes comer ahí, yo recomendaría, la torta de barrio. Una vez que ya conociste el famoso Acrópolis sal y llega a Catedral. Es impresionante en verdad su fachada principal; construída de cantera rosa en la época de la colonia por los indígenas de la región, es un lugar digno de admirar por varios minutos. Los detalles tan minuciosos y el abigarramiento o saturación de elemenos no es fortuito, sino que es por la influencia artística del barroco español y es una construcción muestra del barroco mexicano. 

Si continúas caminando podrás ir haciendo paradas en las tiendas de tejidos o productos de plata y si los precios son muy altos para ti, al menos puedes entretenerte. Junto a Catedral, está el antiguo Palacio de Gobierno y Plaza de Armas, ambos lugares muy concrridos por los zacatecanos en su vida cotidiana. Bien, si deseas seguir, camina por toda la avenida hasta llegar a la fuente de Los Conquistadores, no sin antes ir deteniéndote en los callejocitos tan bellos que encontrarás perpendiculares a la Hidalgo; entre ellos el callejón del Moral, El del Indio triste (pide a alguien que te cuente la leyenda), etc. 

Cuando localices la fuente detente ahí a observarla si quieres y continúa por la calle de la derecha, pues se abre como una "y" la avenida por la que tú vas caminando y continúa. Ahí justo a unos pasos ahí dos lugares dignos de mencionar. En la noche venden unos tacos riquísimos y baratos de tripas, no, no te asustes es en serio y es delicioso ¡atrévete a probar nuevos sabores! Se llaman Don Ramis, pero te recomiendo que vayas con tiempo porque son muy muy concurridos y te tocará esperar turno. Luego, a mano derecha verás un lugar algo llamativo, es el restaurante-bar La Lyenda, ahí también es recomendable ir de noche y te parecerá entretenida la decoración. 

En la esquina doblas a la izquierda y verás una construcción antigua con un jardín. Ahí es el museo Rafael Coronel o "de las máscaras" como es comúnmente conocido por la gran colección de máscaras tribales que alberga. Si sigues caminando por esa calle llegarás a una plazoleta con una fuente, ¡¡¡estás en la zona de lo tacos dorados!!! Localizarás un lugar que se llama Wendys donde yo recomendaría los tacos dorados. Si quieres algo más, ahí en la misma zona está el restaruante Los Dorados de Villa pero es demasiado caro y a veces, creo, te atienden sólo con reservacion. No es malo, al contrario ¡ve!, pero para mi gusto puedes encontrar lo mismo a más bajos costos en las otras cenadurías de por ahí. Incluso pregunta por las enchiladas de colores que están muy cerca, no te pierdes, pero más vale preguntar si es de noche y además no conoces para nada. Busca un monumento "Al minero" para emprender el camino de regreso al corazón del centro histórico. Si te das cuenta ahí harás como una "u". Camina sobre esa calle (Abasolo) y volverás a la fuente de Los Conquistadores, ¿ya te ubicaste? ahora vamos a volver. Después puedes regresar a esa zona para visitar el museo que ya mencioné o localizar el mejor museo de arte abstracto del país, el museo Manuel Felguerez, que es impresionante y bellísimo. Ahora volvamos para hablarte de más opciones de comida. 

Camina de regreso pero por la calle de tu mano derecha, porque nuevamente tu calle se abrirá en "y"; la de la derecha es la Genaro Codina y la de la izquierda es la Hidalgo (por donde venías antes), pero avanza por la otra calle para que conozcas otra cara de la ciudad. Casi a media cuadra hay un restaurante que se llama Lucky Luciano y ahí es muy rico además de que, igual que en el Acropolis, tienen una colección de arte muy amplia. Caminas un poco y a la derecha hay un bar que te puede parecer medio feo, se llama la Casa del Artista pero la cerveza es barata y te dan botanita rica -cada quién sus gustos-. Un poco antes está La Condesa, un lugar que sí recomiendo con confianza para que vayas por la noche a tomar cerveza, comer alitas y platicar en un ambiente no de antro pero tampoco tranquilo como un café. Sigues caminando hasta la esquina y llegas al Templo de Santo Domingo y junto a él está el museo Pedro Coronel, el cual debes visitar con calma. Ahí la calle nuevamente se abre en dos o en "y". Si te vas por la izquierda, llegas a la plazuela Miguel Azuza que está atrás de Portales y, si te vas por la derecha, llegarás a la Alameda. Tomemos la calle de la izquierda, pues verás al fondo la plazuela y además pasarás, a media cuadra, por el museo Zacatecano y la Ciudaela del Arte, ambos lugares debes conocerlos. Cuando llegues hasta el final de la calle está una fachada en cantera muy llamativa, es el antiguo templo de San Agustín, ese tallado es único en el mundo y a mí me encanta pensar que ese lugar se ha salvado de muchas destrucciones (esa es otra historia que no contaré obvio porque te aburro). 

Has llegado uno de mis lugares favoritos para pasar la tarde en Zacatecas. Puedes sentarte en las escaleras de San Agustín y verás de frente la Plazuela de la Caja, ¿recuerdas? donde está la Bodeguilla. Ahí hay varios cafés donde puedes sentarte y disfrutar de la tarde viendo la arquitectura, pero si no te quieres sentar aún, caminemos. Cruzas la Miguel Auza hasta "donde topas"; verás a tu derecha al edificio de Rectoría y puedes entrar a conocer el museo de Ciencias; a tu izquierda está un jardín precioso para que camines o te sientes a leer y descansar. Hay un restaurante de cortes argentinos que se llama La Garufa; es lo que digamos, para nosotros, caro, pero no te fallarán en satisfacer tu hambre y antojo. Al lado del jardín está el callejón de Cuevas, donde verás artesanos locales, algunos de ellos del pueblo originario Wixárica. Te recomiendo que compres ahí porque todos los artesanos hacen sus productos, (a diferencia de otras tiendas que no son hechos a mano) y vale la pena llevarte una pieza de mucha calidad. 

Si llegas al final del callejón estarás nuevamente en la Av. Hidalgo para que vayas en busca de otros lugarcitos mágicos.