Tomar una cerveza en Valladolid. Mejores bares I

Valladolid es una ciudad que puede presumir de tener buenos bares, y si hablamos de tomar una cerveza por la tarde después de salir de la universidad o de trabajar, hay unos cuantos merecen la pena y que estoy convencido que os gustarán. En esta entrada iré describiendo algunos bares de la ciudad que en mayor o menor medida frecuentamos mis compañeros de clase y yo. Para que os hagáis una idea de lo que os podéis encontrar en cada local, intentaré explicaros detalladamente cómo son y cuales son sus puntos fuertes y débiles con un breve comentario de su precio, música, ambiente, decoración y finalmente con mi nota personal. Empezamos…

El aire

El aire es uno de los primeros bares que conoce un estudiante universitario cuando llega a Valladolid. Se encuentra el la calle Ruiz Hernández, junto a la Plaza de la Universidad, bajando unas escaleras en un pequeño soportal. Lo primero vamos a la “carta”, ya que lo mejor de este bar seguramente no son las cervezas. Tienen gran variedad de batidos y cócteles para tomar a última hora de la tarde y por la noche. En cuanto a cervezas no hay gran variedad, ya que se tira más por el precio que por la calidad, así bien podéis pedir un cubo de 6 cervezas mahou por 5 euros. Por las noches está bien para tomar algo antes de salir de fiesta. La música es actual, suelen poner algún canal de música en la televisión como el 40 latino o alguno por el estilo y el volumen es el justo (por la noche lo ponen más alto y música más movidita).

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El trato de los camareros es muy bueno y no puedo decir ni una sola palabra mala de ellos. Los precios como ya he dicho son bajos, las cañas creo que salen a 1, 1 euros o 1, 2 euros y por las noches suele haber diferentes ofertas. Para los fumadores es un buen lugar, ya que en el soportal que hay en la entrada hay mesas y asientos todo el año para los que se quieran sentar fuera y fumarse un cigarro en lo que se beben la cerveza. El ambiente es de gente más bien joven aunque a primera hora de la tarde suele haber gente más mayor tomándose un café. En definitiva estamos hablando de un buen bar donde tomar algo y los días de frío invierno en Valladolid puede que sea de los más indicados. Le pondré un ocho sobre diez.

Café Berlin

Otro de mis favoritos es el café Berlín, que seguramente muchos de vosotros ya conozcáis o habréis oído hablar de él. Está situado en una calle peatonal, Calle Cardenal Cos, junto a la Catedral de Valladolid y a mí personalmente me encanta ir por allí y creo que está en un lugar privilegiado ya que en verano cuando el calor aprieta por las calles de la Catedral suele correr el aire. El local es algo estrecho, pero no se puede decir que sea pequeño, lo que si que es cierto es que tiene pocas mesas, pero en verano lo compensa con la terraza que ponen en la calle. El bar en si tiene un rollo claramente bohemioy en el interior cada poco tiempo hay exposiciones de arte, por lo que no se deja de cambiar la decoración. La música está muy pero que muy bien, juntando rock y pop de hace ya años con otras canciones más actuales de los mismos estilos. Un punto a su favor es la música en directo que hay de vez en cuando y con la que el local se pone hasta arriba.

La media de edad es bastante más alta que en el bar “el aire” pero aún así hay muy buen ambiente y se está muy a gusto. Los precios son algo más altos que, costando una cerveza 1, 5€ y con los precios de las copas y los cafés pasa lo mismo, son algo más caros que en el bar “el aire”. Para ir con los amigos, con una chica, con alguna visita… creo que es un buen lugar y con mucho encanto. En cuanto a la nota, creo que no se merece ni menos ni más que “el aire” ya que aunque es más caro, tiene algo más de encanto y me decanto por la música del “café Berlín” así que le vamos a dar otro ocho sobre diez.

La Tramoya

No muy lejos de “el aire” y el “café Berlín”, se encuentra el café bar “la Tramoya”, en la calle de la Librería, frente a la fachada lateral de la facultad de Derecho. Este bar hay que decir que es más interesante para primavera y verano, ya que lo mejor que tiene es la terraza. Juntos con otros bares cercanos, se forma una gran hilera de mesas que se llena de gente y te puedes tomar una cerveza tranquilamente y a la sombra. El bar es más de gente joven y es algo más barato que los que están pegando a él. En terraza las cervezas cuestan 1, 7 euros y en el interior son algo más baratas (tienen servicio de terraza claro está). Tienen algunas cervezas variadas pero es más la intención que el resultado ya que todos los nombres son bastante conocidos y el cañero creo recordar que es Amstel (la cerveza que menos me gusta). Pero aún así te puedes pedir alguna cerveza algo “rara” y eso sí, sale algo más caro. Siempre para acompañar ponen unas patatas, unos frutos secos y un par de veces a la hora salen con una bandeja de pinchos para picar algo. También suelen tardar poco en atender así que eso es otro claro punto a su favor. Al estar en frente de la Facultad de Derecho siempre hay estudiantes por allí. Lo cierto es que ayuda bastante el que esté casi en plena Plaza de la Universidad, ya que por allí es uno de los principales puntos de Valladolid por donde se mueven por las tardes los que acaban de salir de clase. Por lo precio, la cerveza y por que es un bar más estacional y lo mejor que tiene es la terraza, creo que le vamos a poner un siete sobre diez, que no está nada mal.

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El Penicilino

“El peni” es otro de nuestros bares top. Situado en la Plaza de la Libertad, justo al lado de la Plaza Portugalete y con vistas a la Catedral, el Penicilino pasa por ser uno de los bares más visitados por todo tipo de clientes. Es cierto que suele haber mucha gente joven, pero también se toman allí una cerveza cuarentones, cincuentones y hasta jubilados, sobre todo por las tardes. Cuenta con una gran terraza que los días de sol se pone hasta arriba de gente, aunque en invierno también suele haber gente fumando y tomando algo. Ya he hablado en otras ocasiones de él, por uno de sus productos “estrella”, el vino dulce con bollos blancos de Portillo. Aunque por las tardes entran mejor unas cervezas. El precio es parecido al del Berlín, rondando 1, 5 euros la caña y no tienen mucha variedad de cervezas pero si de vinos y otros licores. La música está bien y la ponen bastante baja, por lo que es un buen sitio para charlar. En el interior hay muchas mesas y algunas que están pegadas a la pared cuentan con asientos más cómodos. En alguna pared la pintura está que se cae, pero creo que también forma parte del encanto del bar. En cuanto a la decoración, no tiene gran cosa, pero aún así es llamativo. Podemos decir que también tiene un rollo bohemio claramente marcado, pero se ve pasar por allí a todo tipo de gente. El Penicilino es un lugar de culto para muchos y si vais a tener alguna visita en la ciudad tenéis que llevarle por allí un jueves por la tarde, sí o sí. Se merece otro ocho sobre diez, pero muy cerca del nueve.

El Trocadero

Hace muy poco que hemos descubierto el Trocadero, pero lo cierto es que nos ha gustado desde el primer día. Se trata de un bar pequeño situado en la calle Esgueva, estrecho, pero suficiente para tomar algo tranquilamente. En el fondo del bar tiene una especie de tienda de campaña del desierto con mesas pequeñas y taburetes donde sentarse a tomar algo. Es más un café o un bar para hablar y tomar una caña que un lugar para empezar la noche o de barra. Tienen cerveza San Miguel y algunas otras cervezas “raras” para tomar, pero tampoco tienen gran variedad. El precio es de 1, 6 euros la caña. La decoración (a parte de la tienda de campaña), es muy llamativa ya que en las paredes hay cuadros colgados que creo se pueden comprar, por lo que se trata de una especie de exposición de arte. El servicio es correcto y agradable y tampoco suele haber mucha gente por lo que se puede decir que es un bar muy tranquilo. Lo transita todo tipo de gente, quizás más entrada en años que jóvenes, pero cada uno está a lo suyo. En cuanto a la música, creo que es demasiado cañera y está un poco alta, pero aún así se está a gusto. Una pena no haberle descubierto antes la verdad. Le pondré un siete sobre diez.

Me gustaría hablar también de unos cuantos bares situados en uno de los puntos, quizás, más bonitos, escondidos y desconocidos de Valladolid, el pasaje Gutiérrez. Pero creo que se merece una entrada para él solo, así que los bares del pasaje (algunos muy buenos), los conoceréis más adelante. Y por supuesto hay otros muchos bares de los que hablaré en otra entrada titulada; "Tomar una cerveza en Valladolid. Mejores bares II". ¡Un saludo y a visitar bares!

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