Nos vamos a la nieve II

Segundo día en la nieve

Siguiendo con la historia de nuestro fin de semana en la nieve, en el Pirineo Aragonés… Al día siguiente, (el domingo), el tonto de Carlos Make (sabes que te lo digo sin cariño), nos despertó a todos con un altavoz que se había llevado a las ocho de la mañana. Desayunamos un pedazo desayuno que nos hizo Kikesito; tortilla de dos huevos, bacon, queso, fiambre, zumo de naranja y algo de fruta para aguantar sin morirnos de hambre hasta la hora de comer. Nos hicimos unos bocadillos para no tener que pagar otros 50 euros por cuatro bocadillos y nos preparamos para dejar el bungalow. La propietaria del camping se portó de maravilla con nosotros y nos dejó una caseta en consignapara poder dejar allí las cosas cuando bajásemos de esquiar de Formigal pudiéramos parar a recogerlas. Limpiamos nuestra habitación, lo dejamos todo ordenado y nos subimos de nuevo a esquiar a las pistas de Formigal.

El domingo hacía mucho frío, pero también hacía menos viento que el sábado. Las pistas estaban muy bien para poder esquiar, se había levantado la niebla y subimos hasta el pico más alto esquiable de la estación, la Punta de las Tres Huelgas.

El la parte superior, el termómetro marcaba cinco grados bajo cero, y del frío tardamos poco en tirarnos para abajo. Ondicol se hizo daño en la rodilla, por lo que le tuvimos que dejar en la estación viendo la tele y ahogando sus penas en cerveza. A eso de las cuatro de la tarde dejamos de esquiar, nos fuimos al coche, dejamos el material de esquiar en Biescas, cogimos las bolsas y lo que habíamos dejado en el camping de Sabiñánigo y nos fuimos a ver Jaca aprovechando que nos pillaba de camino.

Estuvimos un rato viendo el centro de Jaca, nos comimos unos bocadillos de fiambre y caminando dimos por casualidad con una edificación llamada “la ciudadela”. Se trata de una especie de foso en forma de pentágono, con paredes muy altas de piedra. Está rodeado de hierba y setos por todos los lados, formando algo así como una estrella. Dentro del foso, hay una gran cantidad de ciervos que lo pueblan y al parecer todos los años se celebra allí mismo diferentes acontecimientos. Dentro de la ciudadela o Castillo de San Pedro, (que también se llama así), nos dijeron en el pueblo, hay un museo militar que no habría estado mal ver, pero era domingo, estaba cerrado y ya se habían hecho las seis de la tarde, por lo que era el momento de poner rumbo a Valladolid.

A eso de las seis y media de la tarde salimos de Jaca y se nos antojó parar a comer en un KFC que hay en Pamplona. Este tipo de cosas solo se nos pueden ocurrir a nosotros, porque estuvimos dando vueltas hasta encontrar el KFC algo así como media hora que hizo que nuevamente nos retrasáramos sobremanera en llegar a Valladolid. También paramos a echar gasolina en una gasolinera de un pueblo entre Jaca y Pamplona, (otros 10 euros cada uno que hay que sumar a la lista de gastos). Después de encontrar el KFC y de hincharnos a comer pollo, nos pusimos de nuevo en marcha. Paramos en Palencia para cambiar de coche, echar todo lo que había sobrado al de Carlos Make, cargar nuestros skis y nuestras bolsas. Llegamos a Valladolid a casi la una de la madrugada y no tuvimos fuerzas para más que para meternos en la cama y descansar después del palizón de fin de semana que nos habíamos pegado.

En total y echando cuentas, nos gastamos entre gasolina, el bungalow en el camping, la comida de la estación, todo lo que llevamos y en mi caso el alquiler de las botas para esquiar, menos de 200 euros, por lo que podemos decir que el viaje nos salió más o menos económico.

Unos pequeños consejos y apreciaciones

Pero lo cierto es que fue un pedazo viaje que estoy seguro habrá que repetir el año que viene. Quiero dejaros un pequeño resumen de lo que fue el viaje y algunas cifras que estoy seguro os parecerán interesantes para poder planificar vuestro viaje:

• El precio fue de unos 200 euros incluyendo todos los gastos que he ido explicando arriba.

• Tardamos unas 7 horas en llegar hasta el camping desde Valladolid y algo menos a la vuelta. Todo esto teniendo en cuenta que paramos en Pamplona.

• Desde el camping en Sabiñánigo hasta la estación de Formigal se tarda más o menos una hora.

Y también hay que tener unas cuantas cosas presentes para hacer un viaje de diez:

• Reservar con tiempo el camping para no llevaros sorpresas de espacio, más aún en fechas concurridas.

• Esta es la página donde encontramos el camping del Valle de Tena y donde reservamos el bungalow; http://www.centraldereservas.com/nieve-y-esqui

• Evitad comer en el restaurante de la estación, ya que sale mucho más caro que si os lleváis vosotros mismos unos bocadillos hechos de casa y los coméis en el coche.

• Si podéis quedaros al aprés ski de los sábados, ya que además de esquiar “os llevaréis” una tarde de fiesta para casa.

• Madrugad todo lo que seáis capaces para estar los primeros en la pista y aprovechad al máximo las pistas con nieve virgen.

• Aprovechad para visitar alguna de las ciudades que hay por la zona, Jaca puede ser una muy buena opción.

Ya sabéis, si tenéis pensado pasar un fin de semana esquiando, la estación de Formigal puede ser una magnífica opción, sobre todo si hacéis la reserva con tiempo y tratando de no gastar dinero en cosas innecesarias. Espero que os haya gustado y que os sea útil.

¡Un saludo!

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