¿Por qué Odio la Comida Basura?

Siempre recomiendo (y lo he hecho varias veces en distintos lugares) que cuando se viaja se pruebe la comida autóctona del lugar al que se viaja. Destacable mucho más si esto ocurre cuando vienes a Valencia.

Los últimos seis años de mi vida he vivido en esta maravillosa ciudad de la costa levantina, capital de la Comunidad Valenciana y antiguamente conocida como "la capital del Turia". Pero no es este un post para valorar sus virtudes (que las tiene, y muchas), sino un post que viene a cuento de los anteriores que he escrito y que me han refrescado la memoria sobre un asunto que aconteció no ha mucho en esta tierra.

Algunos amigos me preguntan de cuando en cuando, el porqué de mi ira aparentemente irracional hacia los restaurantes de comida rápida (algunos en concreto) y mi reticencia innata a solicitar sus servicios en determinadas ocasiones.

Esto es así porque no recomendaría a nadie, Erasmus o no, sea amigo o enemigo, que estando en Valencia, donde puedes encontrar cientos de sitios de buen comer a precios asequibles, y si estáis de Erasmus es prácticamente obligatorio hacerlo, vayáis a grandes cadenas internacionales de comida rápida. 

Pero más concretamente ocurre por lo que me ocurrió hace ya un tiempo considerable (aunque relativamente corto, según con qué lo comparemos, como todo en el vasto Universo en el que vivimos). El caso es que me ocurrió algo que, francamente, me tocó los c****es. Sí, se trata del famoso menú King Ahorro del Burguer King. Hace ya unos cuantos años, allá por el 2007,marketingnews publicaba esto:

."Burger King ha estrenado una campaña publicitaria con motivo del lanzamiento del menú King Ahorro, su nueva oferta de precio que se extenderá a lo largo del tiempo a 2,99 euros. Este menú, único en el mercado, ofrece diferentes alternativas de hamburguesa de tamaño normal con patatas y bebida en formato pequeño."

Perfecto. Durante el primer año y poco de promoción cumplieron, más o menos, dentro de lo esperado. El céntimo no te lo devolvían, claro. ¿Pero a quién le importa un céntimo?

Bueno eso es lo que se llama técnicamente publicidad engañosa. No vende lo mismo un 3 que un 2,99, eso todos lo sabemos, y hasta cierto punto podemos entenderlo e incluso casi diría perdonarlo. Pero a costa de esa publicidad engañosa la cadena Burguer King se agenció unos miles, o millones, de dólares, o pesos, o euros o lo que corresponda en cada caso y quieran, que no les pertenecían. En otras palabras: Nos robaron. Con cierta elegancia y casi con la aceptación de los engañados (nosotros mismos que por no ser roñosos no pedíamos el céntimo).

Pero bueno eso es sacar puntilla. Vamos al asunto principal que es el que nos atañe.

El menú te lo ponen con tu bandejita, tu hamburguesa (que anunciaban como normal, pero es pequeña), tus patatas y tu refresco pequeños, tu ketchup (que tienes que pedir) y alguna servilleta, si tienes suerte en quién te atiende. No son pocas las veces que este mini-menú me ha sacado de algún apuro, no lo voy a negar, pero también diré que desde el otro día, Me Cago Oficialmente en el Burguer.

El otro día, de repente, me atacó un hambre atroz a deshora, mientras caminaba alegremente hacia algún lugar incierto. Quiso la casualidad, o el destino, que un Burguer estuviera "a tiro de gapo", como quien dice, y mis pies, automáticamente y casi bajo mi asombro, pallá que se fueron.

Primero, me atendió una antipática dependienta con cara de asco.

Segundo, iba a pedir el menú King Ahorro de toda la vida de pollo (porque al ser crujiente y tener ese toque picante no se nota que no sabe a nada si te lo comieras sin el rebozado picante, como pasa con la otra carne, que roza lo ridículo, tanto por sabor como por tamaño y grosor -mmm ¿hablábamos de hamburguesas no?).

El caso es que iba a pedirlo cuando vi el cartel de 3,80€ que vale ahora. Así que pensé ¿"perdurable en el tiempo" eh señor Burguer King (you son of a bitch)?

-Mis coj***s -dije.

-¿Perdón?

[...]

Y ahí siguió una conversación seguida de una situación muy curiosa y para nada agradable en el ámbito de la hostelería que pasaré a relataros en la segunda parte de esta Negative Experience in Valencia. Aunque para ser justos esto NO REPRESENTA para nada la hosteleria valenciana, ni muchísimo menos.

Sólo estoy hablando, única y exclusivamente, de este tipo de cadenas de comida basura. Aclarado queda.

TO BE CONTINUED...

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