Escena Erasmus

"No es necesario tener experiencia teatral para participar" fue la frase que me hizo pensar en enviar mi currículum al correo de Escena Erasmus. El día de bienvenida en la Universitat de Valencia, una parte fue homenaje al proyecto Escena Erasmus -un taller de teatro donde pueden participar estudiantes Erasmus (70%) tanto como estudiantes locales (30%).

"Si os gusta el teatro, envíadnos vuestro currículum" nos dijeron. Y, sí, siempre me ha gustado el teatro. Pero es que nunca tuve el tiempo, pero sobre todo el coraje de hacer una prueba para poder formar parte de un taller teatral.

"Y como harás la prueba? En español?" "Y tienes verguenza o qué?" me preguntaban mis amigos y me asustaban más y más cada día. Hasta el último momento quería escribir a los de Escena Erasmus (que ya me habían invitado en la prueba) para decirles que al final no iba a ir. Por motivos personales, inexplicables y, de verdad, absolutamente estúpidos. "Es que llueve, es que tengo que terminar un trabajo hasta esta noche, es que no tengo ganas -es que tengo mucho miedo." Nunca les escribí ese mensaje y estoy muy feliz que no lo hice. Mi amiga francesa me escribió por facebook: "A qué hora vamos a ir a lo de Escena Erasmus? Me alegro mucho que nos irémos juntas. Es que no iría sin ti". Tifenn, mi amiga francesa, es tan vergonzosa como yo. Entonces, no le dije nada. No le hablé de mi miedo, ni de mi estrés, ni de mi sentimiento de que nunca me iban a coger a mi.

He contado la historia de mi prueba un montón de veces y todavía tengo ganas de hablar de ese día. Nos entramos en una aula de teatro, nos sentamos formando un círculo, y nos presentamos a los profesores y a los demás. Todos hablaban bastante sobre sus estudios, su experiencia teatral o simplemente sus sueños. Yo no dije casi nada. Luego hicimos algunos ejercicios todos a la vez y al final nos presentamos los monólogos que ya nos habían enviado por correo electrónico. Estaba la penúltima que presentó su diálogo y, haber visto los demás, tenía más miedo que antes. Al final de la prueba, me fui con un sentimiento de pura felicidad. Pensando que lo había hecho todo mal, pero igual contenta de esa experiencia y llena de sentimientos que solo se crean a través del teatro.

"Enhorabuena, has sido seleccionada" -lo leí muchas veces solo para estar segura que lo había entendido correctamente. Así empezó el mejor viaje de mi Erasmus. Escena Erasmus es una familia. Te lo dicen desde el principio, pero tu no lo puedes creer -porque todavía no sabes que vas a vivir una aventura de las mejores. Escena Erasmus no es un taller de teatro como los demás. Ni una clase universitaria. Escena Erasmus es el esfuerzo de nuestros profesores que desde hace cuatro años eligen personas de toda Europa y tienen confianza en que haya otra Europa posible.

Ese año yo tuve la suerte de participar en una obra de teatro sobre mi propio país. Estaba nerviosa, orgullosa y muy contenta de ver a todos mis compañeros trabajando mucho para que salga todo perfecto, cantando en griego, recitando textos de los poetas antiguos más importantes de Grecia. Así que nos enfadamos, gritamos y a la vez lo pasamos bien, reímos, disfrutamos -siempre juntos- ..."y cambiamos de vida". Esas personas me cambiaron la vida y la verdad es que prefiero mi vida ahora, que todo esto "está" conmigo. Que todos ellos son mis amigos y me hacen sonreír hasta ahora que cada uno ya se encuentra en otro lugar.

Mucha gente me preguntaba "pero como trabajáis todos juntos? como podéis hacer teatro sin problemas aunque hay tantas nacionalidades y culturas distintas?". Creo que es difícil explicar como Escena Erasmus hace que los estereótypos dezaparezcan. Creo que en realidad no hay estereótypos, si tu no quieres que haya. En Escena Erasmus no veían un español, un alemán o un italiano. Veían actores de distintas partes de Europa. Cada uno había traido algo de su cultura. Cada uno me ha enseñado algo.

Cuando mi Erasmus se terminó, mis compañeros de Escena Erasmus se iban de gira por muchos pueblos de Valencia. Yo volví a Atenas y a mi vida universitaria, siempre pensando en ellos. Me quedé con la nostalgia, los recuerdos y un sentimiento de esperanza. "Queremos una Europa de cultura y de personas" decíamos en nuestra obra. Gracias a Escena Erasmus, confío tanto en la cultura como en las personas. "Si los europeos somos juntos, eso es que tienes amigos que solo viven un poco lejos. Viaja -viaja mucho y ya verás como te cambiará cada viaje" me dijo mi profesor del teatro. Ya sé que tenía toda la razón.

Giulia, Susi, Lisa, Michele, Irene, Pablo, Mathilde, Felix, Ewa, Fran,  Christophe, Dorothea, Annabel, Juliette, Hannah D., Hannah P., Claudia, Marcos, Gabri, Aga, Juliana, Ana y Jules, 
gracias por todo. Os echo mucho de menos.

Josep Valero y Daniel Tormo, moltes grácies.

PD. Muchas gracias a la compañia CRIT por su esfuerzo, su trabajo y su inspiración.