¿Salimos de fiesta? eehmm no, yo ya vengo de regreso

Aunque no lo parezca, la situación a la que se hace referencia en el título sucedió en torno a las 21.30 un día de los que se suele salir por aquí de forma habitual.

En la residencia en la que me encuentro convivimos gente de sitios muy distintos y lleva a que ocurran cosas como esta. Cuando unos se deciden a salir de fiesta después de cenar, otros ya cenaron hace más de 3 o 4 horas y salieron a tomar algo hace rato. En principio es divertido porque siempre nos encontramos en caminos contrarios y te pasas un rato hablando sobre el tema o convenciendo a los que regresan de que se animen otro rato más.

Hasta ahí, es un hecho mas de la convivencia que no deja de ser curioso cuando lo vives, pero que tiene otro lado mucho mas polémico.  Y es que cuando estos últimos que salen de fiesta mas tarde llegan de regreso en la madrugada, el resto de la gente lleva al menos 5 horas durmiendo y les queda poco para levantarse de la cama. Esto lleva a que haya un buen choque de culturas, sobretodo si tenemos en cuenta que no siempre los que llegan de madrugada lo hacen sin ganas de seguir la fiesta. Lo más habitual es que aún estando de regreso sobren las fuerzas para gritar, ''cantar'' e incluso bailar en medio de un pasillo junto a las puertas de los madrugadores. En apenas dos semanas, día si y día también suceden este tipo de cosas, asi que supongo que esto al final se convierta en una auténtica guerra de guerrillas. Creo que mucho están tardando los madrugadores en ir a las habitaciones de los que montan escandalo por la noche a despertarlos a primera hora. ¡Con el dormir no se juega!

De todos modos aún está tranquilo el tema y reina un ambiente de tolerancia por el momento. Veremos como se desarrolla esta historia y ya os contaré si acaba alcanzando otro nivel.