La Universidad Pablo de Olavide: la comida, postre

Y ahora el artículo final sobre la comida de la UPO, hablando en primera persona y eligiendo la que para mí puede ser la mejor combinación con diferencia. Por supuesto lo mejor sería comenzar con el principio que son los desayunos; pero como no suelo ser previsible ni demasiado cuerdo a la hora de escribir; elijo hacer la primera pregunta que se me ocurra del tema y ya veremos cómo se desencadena todo:

¿Cuál es para ti el mejor postre de los que te puedas hacer en la UPO?

Me encanta esta pregunta pues soy muy de postres (qué cosas aciertas de ti mismo, ehh, menudo mérito). Ya he ido comentando que por variedad no será y es que hay personas que incluso de postre prefieren un café o una tila y hala, perfecto.

Yo en estos casos me quedo con lo casero, con lo más tradicional, que serían en este caso los postres típicos de las cocineras de la cafetería del Mutis. Como ya he contado, normalmente en los menús están incluidos los postres; por lo que si hay fruta suelta, una compota de frutas, yogures o natillas y por último; el postre casero que hayan hecho; siempre sin dudarlo elegiré sus postres.

Y es que de nuevo te sorprenden pues a los más típicos flanes y arroz con leche, que de igual manera están de muerte y que tenéis que probar sin duda; le debes sumar algún pudin de fruta que ufff te dejan helado y siempre con ganas de más. También hay otro que sabe sobremanera a leche merengada y que de nuevo sobresaliente.

En cuanto a la fruta, los plátanos suelen ser en todas las cafeterías de primera calidad y tamaño; si bien las manzanas y naranjas parecen estar siempre en estado de precariedad (quizás también porque no soy muy de esas frutas).

Bueno ya has hablado suficiente de los postres y ahora otra pregunta que se pueden hacer muchos estudiantes de la Pablo de Olavide:

¿Dónde encontrar el mejor café?

Pues aquí llego a descifrar dos vertientes claras; pues están aquellos que les da un poco igual lo que le echen siempre que les despierte y tenga buena cantidad como para que no te lo tomes de un buche; y están los quisquillosos que quieren calidad por encima de todo; o mejor dicho la marca que llevan tomando durante toda la vida y ya están más que acostumbrados.

Si eres de los que le importa más los efectos y la cantidad y no notas siquiera la calidad; sin duda tu lugar es la cafetería de la Plaza América; pues se suelen portar más con los vasos algo más anchos que de costumbre, eligiendo como siempre la cantidad de leche que quieras en su interior.

Si por otro lado eres tiquismiquis, escucho que la gente lo prefiere del Mutis; supongo que porque elegirá una marca mejor o a la que están todos normalmente más acostumbrados. Sinceramente no soy muy de cafés y hablo más por los comentarios y experiencias de los demás.

En cuanto al precio en las cafeterías suelen costar uno 65 céntimos, mientras que en las máquinas que te irás encontrando por el pasillo de arriba (que ya explicaré de qué se trata) y por los edificios de las clases; están a 40 céntimos, si bien son los llamados “aguachirris” (¿qué más por ese precio?).

No quiero alargar esto demasiado, y haré la segunda parte en otro artículo en el que seguiremos desentrañando las claves de la comida en la UPO.

Vamos, vamos, vamos, vamos, vamos, vamoooss, vamooooooossssssssssssss gente seguimos aprendiendo, seguimos mejorando.

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