La Universidad Pablo de Olavide: biblioteca, su gente

Antes de continuar con otros puntos fuertes de la universidad Pablo de Olavide; no quiero pasar por alto los tipos de personas que podemos llegar a encontrar en su biblioteca. Es curioso como las personas somos tan distintas a la hora de encarar un mismo problema o situación. Y es motivo de análisis en este artículo y sucesivos el darnos cuenta de lo que nos rodea.

Nota: el género que usaré será el masculino genérico aceptado por la RAE; que nadie tergiverse el asunto, que ya nos vamos conociendo y luego me llevo alguna que otra reprimenda de compañeras de mi clase por el mismo hecho (ni que estuviera penado o algo usar algo que bueno, tiene un origen algo tú sabes...... pero que no está mal con respecto a lo que dicen las fuentes oficiales a día de hoy). Sin más dilación.....

¿Qué tipo de personas podemos llegar a vernos en la biblioteca de la UPO un día cualquiera?

1º- El empollón: da igual la fecha que sea, el día que tenga el próximo examen o como lo lleve. El empollón siempre estará allí; sentado donde siempre, con la misma gente (nadie) y siempre de una guisa que parecerá que está falto de tiempo. Quizás sea Octubre y lleve un mes de clase, pero es que no puede perder más tiempo; ya que para esa persona, entre hacer los apuntes como se debe; ver todo lo importante que dijo el profesor y por supuesto buscar información complementaria para aclarar todo; hace que le falte siempre una semana más de estudio.

No tiene por qué ser el que mejor nota saque, pero por supuesto será el primero de la clase que tendrá el manual en cuestión. Tú irás dos días antes del examen a la biblioteca rezando que el tamaño del manual sea pequeño; y te encontrarás un papel olvidado del “empollón” de turno con la entrega del manual hace meses y piensas: “uffffffffffff, si esta persona dijo ayer que lo llevaba mal y cogió el manual hace 4 meses; yo debo estar fuerísima”. Nada más lejos de la realidad, el empollón es negativo; pasa de él y sigue adelante (65% de las veces superarás su nota).

2º- El “sobrao”: te encuentras en el otro extremo de la balanza a ese tipo de personas que va a la biblioteca a tener un mejor internet sin cortes y para pasar el rato. Se lleva toda la mañana viendo APM o intentando jugar al Age of Empires con aquel que convenza y lleve a su “agujero negro”. Siempre hay tiempo para él y quizás a un día del examen no haya empezado. Las bibliotecas no son su punto fuerte para estudiar y cuando calcule que es hora de concentrarse y hacer algo por su vida; cogerá su mochila y se irá a su casa a estudiar de verdad. Aprobará sin problema y lo maldecirás de por vida por su capacidad.

3º- El “paso de todo”: Parecido al “sobrao”, pero con la cosa de que no se pondrá incluso más tarde o ni siquiera se terminará poniendo en serio. La frase: “vida hay una, convocatorias seis”, le viene como anillo al dedo; y es que para este tipo de personas, la universidad está para vivir la vida, y si se aprueba pues suerte, y si no pues nada; hay muchas oportunidades. ¿Por qué ponerse hoy si se puede mañana? Su extremismo llega hasta el punto que el mismo día del examen puede llegarte una llamada de esa persona preguntándote por la fecha de ese mismo examen y tú: “Pues comienza en una hora”. - “Venga ya, imposible, no he estudiado nada” (A nadie le sorprende claro).

¿Qué qué tipo de persona soy yo?

Pues es una buena pregunta, pero lo siento porque yo voy a parte; yo soy el "loco", el cual nunca sabréis a qué se dedica para no levantar sospechas (qué misterio para nada xD).

Momento de dejar la segunda parte para otro artículo y hacerlo más apacible para el lector (que escucho y leo de todo debido a la longitud de los textos).

Vamos, vamos, vamos, vamos, vamos, vamoooss, vamooooooossssssssssssss gente seguimos aprendiendo, seguimos mejorando.

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