1x03 PEDAGOGGRÄND 7A 1º9. Umeå. Västerbotten. SWEDEN

Junio fue finalmente el mes en el que por fin acabó toda la logística pre-erasmus, aunque aun no recibiera la dotación económica de la beca.

Empezaba el mes a sabiendas que pronto tendría que elegir el lugar que iba a ser mi hogar durante 9 meses, ya había leido sobre las distintas residencias que la International Housing Office ofertaba y me había informado sobre los barrios donde se situaban.

Pablo, que había estado de Erasmus en Umeå el curso anterior y que contacté con él gracias a este portal, tal y como comentaba en sus posts, personalmente me recomendó el barrio de Alidheim, un barrio con más movimiento universitario e internacional, así que desde un primer momento, mi intención era elegir alguna residencia de ese barrio.

Uno de los dilemas que tuve fue el elegir o no una residencia con cocina individual, tras mucho meditarlo llegué a la conclusión que sería mejor tener la cocina compartida, me ayudaría a socializarme con los vecinos, y probablemente me auto obligara a cocinar (por eso de quedar bien) y no caer en la tentación de comer basura durante los 9 meses.

Así, el día 15 de junio me llegó un correo de la IHO explicando qué tenia que hacer para la reserva de la habitación y avisándome de que en unos días llegaría la carta (como si de Hogwarts se tratase) con la Letter of Acceptance y folletos informativos.

Este correo también me ofrecía un;paquete de bienvenida; pagando un suplemento en la reserva de la habitación, este paquete consistía en una serie de... ¿obsequios? que vistos de uno en uno no eran nada novedosos pero en conjunto hacía un;pack; bastante absurdo: una almohada, un rollo de papel higiénico, una manta, información sobre Umea y un paquete de fideos. Lo de los fideos me mató, ¿tanta hambre iba a pasar? Lo cierto es que lo pagué, sobretodo por la almohada y la manta, aunque lo cierto es que los fideos me tenían intrigado.

Lo importante es que tenía que hacer una transferencia a un banco sueco de 7500 coronas (en mi caso fueron 7700 coronas por lo del paquete de bienvenida) y cuanto antes lo hiciera, antes podría elegir habitación.

Al día siguiente ya estaba yo en el banco para hacer la transferencia, pero se ve que los banqueros del Santander de mi pueblo no están muy acostumbrados a hacer transferencias a bancos tan poco conocidos aquí como aquel banco sueco. Fueron intentando hacer la transferencia varios de los trabajadaores y tras un buen rato, llegó una compañera suya que decía saber bien como hacer estas transferencias internacionales, y efectivamente, pude hacer la transferencia. Cuánta incompetencia....

Ya sólo quedaba que llegara la carta y esperar al 23 de Junio para elegir la habitación.

Un par de días después recibí la esperada carta, en ella, la Letter of Acceptance, por fin podía considerarme estudiante de la Universidad de Umeå. Además venía acompañada de un mapa de Umeå (aunque ya casi me supiera la ciudad de memoria de tanto fantasear en Google Earth) y la Survival Guide, una guía bastante apañada sobre la vida universitaria de un Erasmus en Umeå, aunque con ese nombre, guía de supervivencia, parecía que más que ir de Erasmus iba a ir con Bear Grylls a comer bichos en el Amazonas.

Pasaron varios días, los nervios por la espera del correo que me diera la opción de elegir habitación no me dejaba estudiar para los exámenes finales de la carrera, la guía era una distracción y no paraba de pensar en que en 2 meses iba a estar ya allí.

Durante esos días conocí a través de tuenti a Rosario, una chica de Madrid que también iría a Umeå de Erasmus el año que siguiente, tenía problemas para recoger las llaves de la residencia una vez llegara a Umeå y Pablo la puso en contacto conmigo para echarle una mano. Yo encantado, estaba deseando conocer gente que fuera a compartir conmgo esos 9 meses.

Y llegó el 23 de Junio, al mediodía recibí al fin el correo que me posibilitaría elegir hogar, ya tenía más o menos pensado cual iba a elegir, la intriga era si estaría disponible. Pero no hubo problema, había habitaciones de sobra en Alidheim, así que elegí la calle con el nombre más acorde a mis estudios: Pedagoggränd. Pues para algo estudiaba Educación. La planta realmente me daba igual así que elegí la habitación con mejor relación precio / metros cuadrados, y resultó ser la primera planta.

Pues bien, ya podría estudiar más tranquilo, los deberes de la Erasmus ya estaban hechos, sólo quedaba esperar y soñar mientras tanto.