Tarnów

¡Hola de nuevo compañer@s! Ya es el último día del Concurso de Viajer@s y a mí todavía me quedaba hablar sobre Tarnów, el último viaje que hice en el primer cuatrimestre de mi año de Erasmus. 

Ya he hablado en otros blogs de lo barato que es viajar en Polonia y de cómo organizarse el dinero para poder hacer al menos un viaje al mes para poder crear una experiencia Erasmus completa.

La gente siempre piensa que viajar es muy caro y a veces ni se molesta realmmente en mirar los precios y se sorprenderían al encontrarse con la gran cantidad de ofertas que hay y trayectos que de por sí son muy baratos, sobre todo en países con estos precios tan bajos. 

No es necesario hacer un viaje de 6 días y 5 noches cada vez que se viaje, se pueden hacer escapadas de un solo día incluso llevándote comida y ahorrar lo máximo posible. 

¿Cómo ir?

Solemos pensar que los trayectos en tren son los más caros, pero en Polonia no es así. Es cierto que los viajes más largos suben de precio, pero hay muchos trenes que van y vienen varias veces al día a pueblos y ciudades cercanos a Cracovia e igual sucede en las demás ciudades. 

En este caso, nosotras cogimos un tren sobre las 8 de la mañana y nos costó tan solo 1 euro; 1 de ida y 1 de vuelta. Para ello utilizamos el descuento del carnet de estudiante, que es internacional y no importa de dónde seas. Vayas donde vayas, pregunta siempre si hay descuentos por carnet joven o estudiante y si eres Erasmus, por el carnet de la ESN.

El trayecto duró sobre una hora y salió desde la estación de trenes al lado de la de autobuses, justo detrás de Galeria Krakowska. 

¿Qué ver en Tarnów?

Tarnów es una ciudad que la gente no suele visitar cuando está de Erasmus o de viaje en Polonia, ya que hay otras más grandes y famosas (Varsovia, Breslavia, Poznan, Zakopane), pero me sorprendió mucho para bien. Mi percepción antes y durante la visita fue como de un pueblo muy tranquilo con muchas cosas que ver y me encantó, pero buscando información vi que tiene más de 100.000 habitantes. 

Estuvimos en esta ciudad tan solo un día pero nos sirvió para ver las cosas principales. Recuerdo que tuve una sensación muy buena porque cuando la visitamos hacía un tiempo increíble y soleado y pudimos disfrutar mucho del día (creedme que a -17 grados las ciudades se disfrutan algo menos). Pasear por sus calles me recordaba mucho a un pueblo español, porque se oía a la gente cocinar desde las casas, hacía calor, niñ@s jugaban en la calle o en los parques, todo estaba tranquilo... Me hacía sentir muy bien. 

Hay muchas calles estrechas, casi similares a las del casco histórico de Córdoba y muy diferentes a las que hay en ciudades como Cracovia y esto me hizo sentir muy como en casa. 

Por supuesto, como en todas las ciudades de Polonia, es necesario visitar la Plaza del Mercado o Stare Miasto,uno de los puntos más importantes y donde se encuentra el Ayuntamiento, que tiene unas formas arquitectónicas muy bonitas y variadas y de diversos colores. En la plaza había varios restaurantes y al contrario de lo que la gente suele pensar y lo que sucede en España, no son tan caros. 

Otra de las cosas que ver es la Catedral Basílica de la Natividad de la Virgen María. Una de las cosas buenas que tienen los monumentos, iglesias y catedrales en Polonia es que normalmente se pueden visitar por dentro y hacer fotos. 

Hay un parque que se llama Strzelecki Park que teníamos muchas ganas de visitar y tiene pequeños monumentos dentro pero nos llevamos una decepción porque todo estaba en obras. 

Podnik Jozefa Bema es una estatua que hay que ver no solo por la estatua, sino por el entorno en el que se encuentra, un parque precioso y las calles de alrededor son dignas de pasear. 

Mi amiga quería ver la Sinanoga Vieja Bimah, uno de los monumentos judíos de la ciudad y donde se pueden ver varias inscripciones. 

En las calles de la ciudad, hay varias zonas con arte callejero muy bonito, pero no tengo las ubicaciones exactas, así que es necesario caminar y buscar. 

Una de las cosas que más me gustó fue el vagón de tranvía que es una cafetería. Se trata de un vagón ya en desuso y parado en medio de una acera con una pequeña cafetería en su interior. Paramos ahí para tomar un café y un té y también tenían tartas con muy buena pinta, el señor que trabajaba ahí era muy amable y divertido. 

Hay muchas más cosas para ver, pero estas son las que tuvimos tiempo de visitar nosotras en un día, aparte de otras zonas que no tienen monumentos pero son muy bonitas de ver, como la zona del riachuelo. 

¿Dónde comer?

Nos llevamos varios snacks para comer durante el día pero queríamos hacer la comia en un restaurante allí así que buscamos uno con opciones veganas y encontramos Kawiarnia Sofa, que nos encantó totalmente. 

Era un sitio mediano con muchos sofás, sillone y también mesas con sillas. No era un restaurante vegano del todo, también tenía opciones vegetarianas y con carne, pero tenía mucha variedad de opciones veganas. Yo pedí una ensalada y mi amiga una crep salada con verduras y queso. Como era de esperar, pedimos de postre una tarta riquísima, que fue de difícil elección porque todas tenían muy buena pinta. 

Después de todo este día andando y descubriendo, volvimos a la estación de trenes de Tarnów, que está como a unos 15 minutos de la zona centro y regresamos a casa, a Cracovia. 

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