Castilleja de la Cuesta

Hola a todos! Hoy voy a hablaros del pueblo donde vivo, Castilleja de la Cuesta. Un pueblo de Sevilla situado en el Aljarafe!. Nos encontramos a menos de diez minutos de la capital en coche, así que os recomiendo a los que tengáis pensado visitar Sevilla que en mi pueblo tenemos buenos hoteles donde os podréis pasar una buena estancia. Llevo viviendo aquí 21 años de los 23 que tengo y la verdad que no me arrepiento para nada. Todo el que venga aquí, será bienvenido por personas con mucho arte y de buena fe. Para empezar por el personal castillejero puedo hablar de la gente del Kioso, aquellas bellas y buenas personitas que siempre están dispuestos a lo que sea, o mejor dicho, se apuntan a un bombardeo. En especial podemos nombrar a una chica llamada Estefania que es la dependienta del mismo, que trae unas palmeras que te cagas (por lo visto estas son de una tal Celia) y que siempre te atiende con una sonrisa en la boca. Podría hablar de cada uno de ellos pero bueno, este blog no es para especificar en lo personal.

En Castilleja de la Cuesta podemos encontrar muchos encantos y rincones ocultos donde pasar un rato agradable, sólo tienes que irte a la calle principal del pueblo, la famosa Calle Real, una avenida con un carril para cada sentido donde todas las mañanas de los días entre semana es un auténtico suplicio pasar con el coche. Primero porque hay centenares de coches en doble fila que dificultan la circulación del pueblo, y segundo porque si vas de peatón te la estás jugando...pocos son los que respetan los pasos de cebra en esta avenida. En la Calle Real esta todo concentrado, tiendas baratas donde puedes encontrar cualquier cosa, un desavío, un estanco, que no sé aún por qué pero se le suele llamar el estado del Miwe, dos farmacias, un pub llamada Cañaveral al que va bastante gente los fines de semana, la famosa tienda de Roberto Garrudo, tres copisterias, el Gimnasio Real, un Telepizza, un restaurante italiano donde se come que te cagas y por último el Colegio Bienaventurada María Irlandesas, colegio en el que pasé mi infancia hasta que me fui a los Salesianos de Triana.

En este colegio he pasado los mejores ratos escolares de mi vida y cada vez que paso por allí me entra un poco de nostalgia. Por otro lado, nuestro pueblo, el mío y el de la gente del Kiosko tiene un equipo de fútbol llamada Castilleja CF, club en el que he jugado desde que tenías siete años hasta hace un par de meses que lo dejé por momento. Podría decir que es el club de mis amores, por lo menos hasta el día de hoy. En él he crecido como persona y como deportista desde pequeño y allí me han enseñado valores colectivos que me hacen ser hoy el que soy, ya sea para bien o para mal, pero eso dejo que la gente lo diga, lo que tengo muy claro es que es un club que trata a todo el mundo por igual y en el que siempre serás bienvenido. Como he dicho, he vestido esa camiseta muchos años, casi desde que tengo uso de razón y no me arrepiento. Muchas veces hasta echo de menos el competir y por supuesto a mis compañero, pero bueno, la vida cambia por circunstancias, que a veces tu eliges que ocurran y otras simplemente pasan porque sí siendo fuerza mayor.

Por último me gustaría hacer referencia a otros lugares del pueblo donde puedes encontrar gente maravillosa, como la misma gente del Kiosko que ya he nombrado. Estos lugares son sitios como los chinos, unos aparcamientos lleno de piedrecitas (chinos) donde puedes pasar un rato agradable con tus colegas. Lo normal es que lo hagáis montados en el coche, por lo menos es lo que está de moda ahora mismo allí, aunque también tienes la elección de conversar con alguien fuera del coche ehh, que nadie te va a pegar (os recuerdo que la gente del Kiosko, que son los dueños de este aparcamiento, no muerden ninguno, por lo que podéis ir en paz). Los lugares más habitados de Castilleja de la Cuesta, a parte de estos aparcamientos, del mismo Kiosko, de la Calle Real y del campo del Castilleja CF, son la placita de la Hera y otra placita que se le denomina los pinchos, tal y como suena, aún no sé por qué pero en cuanto vea a alguien de la gente del Kiosko se lo preguntaré sin dudarlo.

Para terminar, me despido diciendo que estoy muy feliz y contento en el sitio que vivo y que de momento ni puedo ni tengo pensado largarme. De lo que sí estoy seguro es de que si algún día marcho a otras tierras, voy a echar mucho de menos todo esto de lo que les he hablado en este artículo. Un placer hablaros de Castilleja City y Viva la gente del Kiosko primo!

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