Zurdorium WTF

El día doce amanecí feliz en San Francisco. Estuvimos haciendo una serie de "workshops" en la escuela de idiomas. Eran como unos talleres dinámicos donde varios profesores proponían su taller particular y después los alumnos elegíamos los que más nos gustaran o nos interesaran. En mi caso, como la mayoría de estudiantes, elegimos a Cory. Más por la profesora que por el tema, la verdad.

Entre otras cosas porque daba igual el tema que pusiera en su workshop, luego acababa hablando de vete a saber qué jaja. El caso es que ese día era algo relacionado con la música rock de los setenta y ochenta, temas oldies guays y la cultura detrás de esa música. Vamos que terminó hablando de su época hippie, la que liaba con sus amigos perroflautas en los conciertos y la idea de peace bro! que llevaban todos los jóvenes de la época. Y luego comparándolo con el "desastre apocalíptico" que representaban los jóvenes de hoy en día y la degeneración de la música actual. Así en plan por encima fue eso.

El caso es que tras el workshop teníamos tiempo libre y no había ninguna excursión organizada. Así que decidí tomarme el día de relax y pasear por Yerbabuena Gardens y cómo no por el Pier 39 (le cogí cariño a aquel sitio). 

Me dio por visitar tiendas para comprar regalos para mis seres queridos que me esperaban al otro lado del charco. Y buscando llegué a una curiosísima tienda en el Pier 39. No sé si recordaréis el episodio de Los Simpsons (supongo que sí, porque si sois de la generación de finales de los ochenta o principios de los noventa habréis vivido la "Edad Simpson" en la que todos los mediodías de veinte años a esta parte han estado esos curiosos personajes amarillos acompañándonos). De hecho alguien dijo, muy acertadamente a mi parecer, que si algo no puedes ejemplificarlo con un capítulo de Los Simpsons, es que no ha ocurrido.

El caso es que en ese capítulo particular Ned Flanders decidió dejar su trabajo e invirtió los ahorros de toda su vida en una tienda en el centro comercial de Springfield llamada Leftorium (o Zurdorium, que sería la traducción en español).

Pues me encontré esa maldita tienda en mitad del Pier 39. Me hizo gracia, al principio. Todo cachibaches diseñados para zurdos, con una clarísima temática turística de souvenirs (como todas las tiendas del Pier 39). Todo era azúcar y risas hasta que me encnotré con el panorama que podréis ver en la imagen inferior a este párrafo.

Eso que aparece en la imagen es una suerte de "Hall of Fame" de personas zurdas famosas o célebres de la historia. Podréis ver a personajes tan magnos como: Mozart, Helen Keller o el mismísimo Mahatma Gandhi.

Pero aquí es cuando llega el WTF más monumental de mi estancia en San Francisco, California.

No es ningún montaje. El personaje que hay entre Mozart y Helen Keller es Justin Bieber. Entre Mozart y Helen Keller. Alucina. Por no hablar de que en la misma fila está Gandhi, que además de abogado, pensador y político hindú ilustre fue el padre de métodos de lucha social novedosos como la huelga de hambre y otros métodos no violentos pero activos en cuanto a la resistencia al dominio británico. Nada menos.

Helen Keller: brillante autora, activista y oradora estadounidense sorda y ciega. Entre otras muchas de sus citas célebres hay algunas tan potentes como esta:

"No soy la única, pero aún así soy alguien. No puedo hacer todo, pero aún así puedo hacer algo; y justo porque no lo puedo hacer todo, no renunciaré a hacer lo que sí puedo."

Mozart: qué decir del genio austriaco, maestro del Clasicismo, considerado como uno de los músicos más influyentes y destacados de la historia de la humanidad. En la obra de Mozart se contemplan todos los géneros musicales de su época y está compuesta por más de seiscientas creaciones, en su mayoría reconocidas como obras maestras. Un genio que con solo cinco años ya componía piezas musicales y sus interpretaciones eran del aprecio de la aristocracia y realeza europea. 

Y entre estos dos personajes históricos indudablemente destacables en la historia, tenemos a Justin Bieber.

Justin Bieber: Prepúber presuntuoso, capullín, maleducado, arrogante y multimillonario "cantante" con más poder en las redes sociales que el presidente de Estados Unidos o el Dalái Lama porque saltó a la fama gracias a que su mamá colgaba videos en Youtube cuando el niñato en cuestión tenía menos de doce años. Un rapero vio negocio y ahora se dedica a dar conciertos para niñas en la edad del pavo, escupir a sus fans desde balcones, orinar en cubos de fregona de restaurantes y hacer carreras ilegales con coches alquilados bajo los efectos del alcohol. Tres o cuatro "temas rompedores" con letras tan complejas que es necesario conocer cinco o incluso seis palabras del vocabulario americano para poder entenderlas. 

Casi lo mismo que los personajes históricos que tiene a cada lado. 

Lo que no entiendo es qué criterio de selección tuvo el responsable de la colocación de la fotografía para poner eso en la pared de su tienda. Menuda aberración... Si Mozart, Helen Keller o Gandhi levantaran la cabeza...

En fin. Hay cosas que hay que afrontar con la entereza de un hombre de bien. 

Así que salí de aquella tienda prometiéndome a mí mismo que jamás volvería a entrar. 

¿Sería así? Ya veremos, los designios del destino son impredecibles...

Seguiremos informando,

Keep in touch bro's!

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