Losing Is Not An Option

El día catorce en la city, en viendo que el sol brillaba y las nubes estaban tímidas (cosa muy extraña en San Francisco) me decidí a dar un paseo por el popular Golden Gate Bridge. Por segunda vez en dos semanas no había niebla en el puente. Había que aprovecharlo. Así que pa'llá que puse rumbo.

Y cuál no sería mi sorpresa al llegar que me encontré una escena de lo más curiosa. Ya mientras subía vi una especie de "camping-barbacoa" gigante con un montón de gente allí, muchas muchas mujeres y todas vestidas de rosa, o con camisetas rosas, o gorras rosas, en fin mucho color rosa. 

Algunas llevaban un lema en las camisetas que decía "Losing is not an option". Para los menos puestos en la lengua anglosajona, viene a significar "perder no es una opción". 

Así que supuse que se debería a alguna de esas actividades en favor de la lucha contra el cáncer o temas del estilo. Y entonces escuché la voz de Sherlock Holmes diciéndome: -Elemental, mi querido Watson. Aunque resulta curioso, no sé si lo sabréis, pero en la obra original inglesa de Conan Doyle sobre Sherlock Holmes no aparece esta frase en ningún momento. Aparecen las palabras sueltas, "elemental" y la frase "mi querido Watson" muchísimas veces, claro. Pero tal cual se dice siempre, resulta que no. Cuanto menos curioso. 

El caso es que más tarde me acerqué a cotillear por allí y ver algunos stands que tenían montados y tal y resulta que sí, no me faltaba razón. Era la carrera "Avon Walk for Breast Cancer" de San Francisco.

Pero resulta que la hacían también en otras ciudades de Estados Unidos, entre ellas: Houston, Boston, Chicago, Santa Bárbara, Washington DC, New York, San Francisco o Charlotte. De manera que si estáis de viaje en algunas de estas ciudades ya sabéis de qué va la historia. 

La Avon Walk de San Francisco, según vi en los panfletos iba desde Marin County, cruzando el archifamoso y querido puente Golden Gate Bridge y a lo largo de la costa de Sausalito pasando también por Fisherman's Wharf, Lombard Street (la mítica calle de las postales de San Francisco que yo bajé a pata, esa tan inclinada que hace eses con muchas folores de colores), y tener unas vistas geniales de los funiculares de San Francisco, las hermosas casas victorianas que ya os enseñaré, las legendarias colinas de la costa Californiana, en fin, un paseo genial por toda la bahía. 

El paseo no es moco de pavo, se hacen unas trece millas de distancia hasta la ceremonia de clausura en Fort Mason. El sábado se llegan a hacer hasta veinticuatro millas, eso son casi cuarenta kilometracos ahí a toca teja. El domingo algo menos, unas quince millas, veinticuatro kilómetros así de buen rollo. 

Y todas terminan con la ceremonia de clausura en la "Villa del bienestar" que es donde montan la barbacoa, los stands y está todo el mundo feliz. 

Como muestra un botón (no he entendido nunca demasiado bien el significado de esta frase hecha, pero en fin). El caso es que os dejo en la foto que ilustra el post el curioso percal que me encontré cruzando el puente.

Ni más ni menos que un duro policía americano con un tutú rosa de bailarina de ballet al más puro estilo "Cisne Negro", y unos altavoces con música del rollo pop ochentera para animar el cotarro. 

Si es que los americanos tienen otra manera de vivir. Otro estilo, otra... calidad de vida.

Seguiremos informando,

Keep in touch bro's!

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