Formas (peculiares) de financiarse los estudios
Foto: Un puñado de billetes turcos. /FRAN GONZÁLEZ.
Un aula de una conocida facultad que imparte la licenciatura en Periodismo. Es viernes. También, la última hora de clase para los alumnos del turno de mañana. El profesor, con poca fortuna, imparte su clase. Eleva la voz, pero no consigue que los jóvenes le hagan caso. Los que están en las primeras filas murmullan; los del final tienen una pequeña juerga montada.
Mete la mano en el bolsillo de su pantalón, rebusca y saca un billete de diez euros; lo eleva y agita con brío. Exclama con voz profunda: ¡A ver, a ver! ¡Le doy uno de estos a cada alumno que está hablando para que se vaya a la cantina! Resopla. Silencio total.
La situación es real. Si por algo se caracteriza el panorama universitario es por situaciones peculiares. Tal vez si algún alumno se hubiera levantado y cogido el billete se podría haber financiado, por ejemplo, los cafés de un par de días.
Financiación para estudios y peculiaridades son dos palabras presentes en la vida universitaria. Erasmusu ha recogido esta semana algunas historias que tienen este nexo común.
Alex Tew es uno de los casos más conocidos. Este joven estadounidense buscaba dinero para pagarse sus estudios universitarios. Él recurrió al poder de la Red y la jugada le salió bien. Mejor dicho, muy bien: reunió cerca de un millón de dólares.
¿Cómo lo hizo? Desarrolló una web en la que vendía píxeles. Cualquiera podía comprarlos a un precio de un dólar y en bloques de 10x10. No hubo agencias de publicidad y marketing de por medio. Tew solo envió una nota de prensa a algunos medios de comunicación cuando consiguió reunir los primeros mil dólares. Cuatro meses después había vendido casi la totalidad de los píxeles de su Million Dollar Homepage. Este joven ya era uno más de los fenómenos que han surgido en Internet.
Pese a que Tew recaudó aproximadamente una cantidad que superaba con creces los 700. 000 dólares, y que le permitía disfrutar de una etapa universitaria desahogada, no aguantó ma? de un mes en las aulas. Treinta días después de comenzar sus clases decidió abandonarlas. Pone en marcha varios proyectos en Internet. Algunos analistas calificaron sus intenciones como de “extrañas”. Por ejemplo, Popjam es una muestra de su últimas creaciones. Se trata de un chat aleatorio tipo ChatRoulette.
El ahijado de Erasmusu
En España también hay casos peculiares en lo que a financiación de estudios se refiere. Erasmusu (muchos de vosotros ya lo habréis visto en la comunidad y medios de comunicación) ha puesto en marcha la iniciativa 'Apadrina un Erasmus'. La comunidad de los estudiantes internacionales cubrirá las necesidades básicas de un estudiante que el próximo curso estudiará en Aberdeen (Escocia).
Es un compromiso de reciente creación que Erasmusu, espera, quiere extender a ma? estudiantes en un futuro no muy lejano. Todo, con motivo del posible recorte de las becas Erasmus que se está planteando la Unión Europea.
¿Cómo se gestó todo?, te preguntarás. Un tuit del estudiante apadrinado, Carmelo Establier, fue el causante de una iniciativa. Buscaba alguien que patrocinara su etapa Erasmus ¿Atrevimiento por su parte? Tal vez, es una forma de calificar su acción. Si él hubiera estado en el aula mencionada, seguramente, hubiera cogido los 10 euros.
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