Análisis de resultados: ¿Qué te parece la implantación del plan Bolonia?

Esta semana os proponemos una nueva encuesta, esta vez para analizar cuál es el medio de transporte que más se adapta a la vida Erasmus. Es un tema muy interesante ya que varía muchísimo en función de la ciudad y el país en el que te encuentres, así que esperamos que los comentarios ayuden también a dar puntos de vista diferentes.

En cuanto a la encuesta anterior, que cuestionaba la implantación del Plan Bolonia, fue cerrada ayer con un total de 71 votos y comentarios de todo tipo que queremos analizar a continuación detalladamente. Los números son muy variados y demuestran que la opinión general es muy variada. La mayoría, un 35% de los votantes, está de acuerdo con su aplicación aunque acepta que el problema es para los que todavía no han terminado sus carreras de planes anteriores o son recién titulados. La siguiente opción más votada con un 26% de los votos refleja que muchos estudiantes lo ven innecesario para nuestro sistema educativo. Por detrás pero con un número significativo de votos le siguen por orden la opción de que es algo necesario y que además se ha retrasado demasiado y por último la respuesta que es probablemente la más negativa y considera que es tan solo un mero trámite que nos impone Europa.

En los comentarios se aprecia más que nunca que cada una de las opiniones de nuestros usuarios se nutren de sus propias experiencias personales, ya que algunos ven como sus planes de estudio van a desaparecer y estarán obligados a cambiarse a los nuevos. También se destaca que la implantación de estos cambios no es una estrategia general que se está siguiendo por igual en todas las universidades del territorio nacional, sino que más bien se está adaptando de forma diferente en función de las carencias y virtudes de cada Universidad en particular. En general las quejas se centran en la desinformación y mala organización, y en que es un sistema europeo que se está aplicando en nuestro país sin tener en cuenta las necesidades reales de nuestra Universidad y los recursos de la misma.

En realidad, no todo se aprecia como negativo, de hecho se insinúa la idea de que es un plan que a la larga puede ser positivo, ya que es símbolo de una educación más abierta y centrada en el alumno pero está claro a quién le va a tocar pagar las consecuencias, que como siempre es la generación del cambio. Generación que por cierto está pagando ya demasiados patos…