ROTTERDAM CON LAS AMIGAS

Cuando fui a visitar los Países bajos con dos amigas más, no solamente estuvimos en Ámsterdam. También disfrutamos de dos noches en Rotterdam.

¿CÓMO LLEGAMOS?

A Rotterdam llegamos la noche del 9 de marzo desde Ámsterdam. Lo que hicimos fue coger el tren desde la estación de Sloterdijk en dirección a la estación central de Rotterdam. Una vez allí cogimos por el móvil un uber por 12 euros hasta el hotel. Tardamos unos 13 minutos en llegar hasta donde nos alojábamos, el Hostel Room Rotterdam, que estaba en el centro de la ciudad. Realmente dimos a parar con un Hostel que estaba muy bien y en una zona muy estratégica de la ciudad, pues desde allí pudimos ir andando por toda la ciudad.

Este hostel estaba genial. Nos salió por 18 euros la noche a cada una aproximadamente. La habitación que escogimos la compartíamos con 9 personas más. Era una habitación para 12 huéspedes. La seguridad era muy buena, ni en Ámsterdam ni en Rotterdam nos robaron nada de las habitaciones, ya que nos dejaban una caja debajo de las camas para que dejáramos nuestras pertenencias y la cerráramos antes de irnos. Los baños no se encontraban dentro de las habitaciones, teníamos que salir para ducharnos y asearnos. En este hostel el desayuno también estaba incluido, y era bastante completo. Además, tenía un salón precioso lleno de colores, lámparas muy grandes y chulas, sofás, un futbolín etc. El hostel se mantenía con música hasta muy entrada la noche, podías estar allí tomándote una cerveza con música perfectamente hasta las 3-4 de la mañana.

El primer día de turismo por la ciudad, fuimos al puerto, ya que es el más grande de toda Europa y el segundo más grande del mundo. Allí estuvimos paseando un rato largo, hasta que decidimos ir a un city tour. La noche anterior en el hostel nos metimos en internet y nos apuntamos a un free tour por la ciudad. Esta vez éste era en inglés no como el que pillamos en Ámsterdam que lo pudimos pillar en español. El city tour empezó enfrente del Markthal que es un mercado cubierto. Tanto por fuera como por dentro es una maravilla, está lleno de color y te ofrece muchísima variedad de productos en el mercado. Nosotras tuvimos la suerte de que justo fuera del mercado (que era un poco caro) había colocado una especie de mercadillo y nos compramos unas mazorcas de maíz con mantequilla que estaban deliciosas. Luego de tomarnos las mazorcas comenzamos el city tour.

CURIOSIDADES DE ROTTERDAM

Según nos comentó la chica que organizó el free tour la ciudad de Rotterdam cambió por completo durante la Segunda Guerra Mundial. En el año 1940 la ciudad fue amenazada con ser destruida por parte de los alemanes. La ciudad sufrió un bombardeo de apenas quince minutos, pero bastó ese tiempo para destruir gran parte de esta localidad. Este bombardeó terminó desencadenando la rendición de los neerlandeses. Por ello el lugar es una ciudad que se ha reconstruido a sí misma, caminando podéis ver como coexisten cosas del siglo XIX-XX con nuevas construcciones totalmente “chocantes’’ con la dinámica de la ciudad. Ahora mismo es considerada una ciudad que sirve de modelo de modernidad.

Uno de las cosas más llamativa de esta ciudad son las denominadas “casas cubo’’.

Estas casas fueron construidas por el arquitecto Piet Blom en 1984. Piet Blom es un representante del estructuralismo arquitectónico. Las Kubuswoningenson o casas-cubo son innovadoras por su puesta en escena tanto externamente como internamente. En un principio Blom tenía pensado realizar alrededor de 100 casas cubo, pero al final se quedaron en 32 de estas casas debido al rechazo de los ciudadanos. Los ciudadanos alabaron el atrevimiento pero rechazaron la habitabilidad de estas casas. Debido a la peculiaridad de estas casas los alrededores se llenaba de curiosos, hasta que un propietario decidió abrir su casa al público por 3 euros/persona. Como cada casa está dispuesta de la misma manera, entrando en la de muestra puedes imaginarte las demás.

Nosotras entramos pagando los 3 euros, y la verdad que nos gustó mucho el trabajo que encierra poder llegar a elaborar algo así, pero efectivamente es una casa bastante incómoda para vivir por un largo período. Además, solamente tiene espacio para 3-4 personas. Por eso los demandantes de estas casas suelen ser artistas o gente polifacética que necesita un aire diferente para desarrollar su talento. El área total de cada casa suelen ser unos 100 metros cuadrados, pero por la forma de construcción una cuarta parte de estas dimensiones no son habitables. A pesar de todo esto, las casas-cubo son todo un espectáculo de imaginería, estética, orden del espacio, etc. Sin duda merece mucho la pena dejarse caer por una de estas.

Junto a las casas cubo también se encuentra otro edificio de apartamentos muy llamativos. Se trata de un edificio que tiene forma de lápiz.

Se encuentra justo en la misma zona que las casas-cubo y resulta muy interesante también. Rotterdam es una parada siempre exigida de cualquier viaje a los paises bajos.

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