Naturaleza en Bueu: Cabo Udra

Cabo Udra

Datos básicos

¡Hola a todo el mundo! Hoy os voy a hablar de un pequeño cabo que se encuentra en mi pueblo natal, Bueu. Generalmente, todas las personas que visitan as Rías Baixas, suelen centrarse en las Islas Cíes, Vigo y Sanxenxo. Lo cierto es que hay muchísimos otros rincones, playas, paisajes naturales donde poder disfrutar tanto o incluso más. Por eso hoy os traigo un sitio nuevo que podéis descubrir, tanto si es vuestra primera vez en las Rías Baixas o si simplemente sois gallegos y os apetece conocer un lugar nuevo de nuestra tierra: Cabo Udra.

Cabo Udra, como su nombre indica, es un cabo situado al comienzo de la ría de Pontevedra, en Bueu, concretamente en Beluso. Es una zona muy polifacética. Me explico. Se pueden hacer muchas actividades diferentes. Empezando por ir a la playa, mi preferida, continuando con hacer una ruta para bicicletas de montaña, recorrerte el cabo haciendo running, pasear o simplemente relajarse. Cuando llegas al cabo, justo hay una zona con mesas de piedra donde puedes llevar tu comida y pasar el día allí, de picnic, haciéndoles compañía a los caballos que pastan justo al lado.

Sus playas

Entrando ya en detalle, las playas más conocidas son la playa de Ancoradouro, que es justo la que está de frente, nada más llegar. Aparcas tu coche, y accedes a ella por un camino arenoso y empedrado. Es más bien pequeña, pero bastante tranquila, no suele estar muy concurrida. Es característica porque hay grandes rocas esparcidas por la playa, además de toda una línea de costa que la bordea formada también por rocas. Nosotras generalmente recorremos las rocas hasta encontrar un escondite con una pequeña porción de arena y nos quedamos allí toda la tarde, apartadas de los demás.

Cogiendo un desvío, podemos llegar a la playa de Mourisca y un poco más lejos, a la playa de Tuia. Estas dos playas son mucho más grandes, perfectas para pasar un día en familia. De hecho, Tuia mide alrededor de unos 600 metros. Hay chiringuitos, también zonas de rocas y ambas rodeadas por árboles. Por supuesto, gaviotas sobrevolando la zona.

Podemos decir que estas tres playas son las más populares de la zona, pero sin duda lo mejor que podéis hacer es aventuraros e iros de calas. La mejor es la playa de Pedrón, pequeña, de difícil acceso, pero vale la pena. Las aguas son súper cristalinas y es un rincón muy acogedor. Justo detrás está situada una casa que tiene acceso directo a esta playa. Qué fortuna. Nosotras estuvimos allí en mayo y estuvimos prácticamente solas.

Justo al lado de playa Pedrón está otra playa minúscula, desconozco su nombre, custodiada por un conjunto de rocas altas a cada lado y tapada por algunos árboles así que solamente le da el sol a ciertas horas del día. También es un rincón muy especial.

En definitiva, hay muchas calitas que podéis descubrir vosotros/as mismos/as simplemente caminando por las rocas, con buen calzado.

Si visitáis Cabo Udra en un día donde no hace mucho calor, o mismo en otoño, podéis ir hasta la punta del cabo y tomar algo en el chiringo. Justo después del chiringo, hay una zona estupenda para caminar, bajar hasta las rocas y ver el mar golpeando contra ellas. Cabo Udra es muy versátil porque prácticamente se puede ir todo el año. Para mí, para ver su versión más espectacular se tienen que dar una de estas dos condiciones:

- Que el mar ese día esté muy bravo, salvaje, porque se forman granes olas que golpean las rocas y las tiñen de espuma blanca.

-Ir cuando el día esté despejado, en verano, y podéis ver una increíble puesta de sol.

Además, desde esta parte del cabo podéis observar Ons, Onza, una pequeña parte de Cabo Home y un trocito de las Cíes.                                                           

Por último, comentar que se puede ir en coche y generalmente no hay ningún problema para aparcar ya que hay mucho espacio.

Siempre me gusta más escribir sobre Galicia, el lugar donde nací, ahora que estoy viviendo en el extranjero. La parte mala es que el sentimiento de morriña es ahora mucho más intenso y más difícil de llevar. Y ya terminando, muchas gracias por leerme un día más y nos vemos en el próximo post. ¡Buenas noches! 

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