De turismo por Plymouth

¡Hola a todos de nuevo, viajeros! En la entrada anterior os he hablado de mi experiencia viviendo en Plymouth, y de todo lo que la ciudad ofrece en cuanto a estilo de vida. En esta ocasión, sin embargo, me gustaría escribir sobre el turismo en Plymouth, y qué moumentos o atracciones turísticas no deberían faltar en tu viaje a esta ciudad. Así que, sin más dilación, aquí tenéis una lista basada en mi experiencia en este sitio.

Qué ver en Plymouth

Hay varios sitios que no puedes pederte de Plymouth, como son:

• Plymouth Hoe

Como no podía ser de otra manera, este post tenía que encabezarla la zona de Plymouth Hoe, que es por excelencia el punto más turísitico de la ciudad. Se trata de una gran área verde al aire libre que se encuentra justo en la costa de la ciudad. El monumento más famoso de todo Plymouth, hasta el punto de haberse convertido en el símbolo de la ciudad, es el faro que está situado al borde del acantilado. Es muy llamativo, a rayas blancas y rojas, y en verano se hacen muchos eventos, como el concierto al aire libre de MTV, y es un lugar en general con mucho ambiente. Tanto locales como visitantes suelen tirarse en el césped a disfrutar de las vistas, hacer un pic-nic, o simplemente pasar un rato con amigos, ya que es un sitio muy tranquilo. Te recomiendo que te pasees por el paseo que hay siguiendo los acantilados, en verano hay un montón de puestecitos de helados y restaurantes que le dan un ambiente genial. 

• The Barbican 

La zona de Barbican es la parte del puerto de Plymouth, y sin duda mi lugar favorito en la ciudad. No sólo porque es muy tranquilo y está cerca del mar, sino porque además es el área más bonita de Plymouth (al menos bajo mi punto de vista). Al ser uno de los sitios más frecuentado por turistas, aunque también por supuesto por locales, en Barbican encontrarás un montón de cosas que hacer, sobre todo cafeterias, restaurantes, y puestos de comida. Desde fish & chips hasta heladerías y perritos calientes, aquí encontrarás muchos establecimientos para visitar. 

Algo que me encanta de las pequeñas calles de la zona del puerto de Barbican es que hay muchas tiendas locales de productos artesanales, en especial de arte (en especial galerías), o de accesorios. Si tienes un buen rato, puedes dedicarle una parte de tu visita a esta parte de Plymouth para asomarte a los escaparates de las tiendecitas, porque seguro que encuentras algún souveir que merezca la pena comprar, y que no sea de los típicos. 

En Barbican también encontrarás la fábrica de Plymouth Gin, que era una de las marcas de ginebra más importantes del país. Hoy en día aún puede visitarle, así que si estás interesado puedes ir a hacer un tour. Cuesta 8,50 libras, y dura unos 40 minutos. 

• Acuario Nacional de Plymouth

No soy muy partidaria de los acuarios, y llevo mucho tiempo sin visitar uno. Aún así, he pensado que era imprescindible que el Acuario Marino Nacional de Plymouth estuviese en esta lista, porque es el más grande de todo Reino Unido, y es increíble. Está situado en la parte final del puerto, así que si sigues el paseo por el acantilado del que te he hablado antes, acabarás en el acuario. Es una construcción enorme, y por fuera la arquitectura la verdad es que mola bastante, sobre todo porque su forma y porque parece que refleja el exterior. 

El Acuario Nacional está abierto de 10 de la mañana a 5 de la tarde, y la entrada normal cuesta unas 17 libras. Puedes llegar andando sin problema, en coche (aunque tendrás que pagar por el parking), o en autobús hasta la zona de Barbican, pero no hay ninguno que te deje exactamente en la puerta del acuario. 

Cómo llegar a Plymouth

Para llegar a Plymouth puedes ir en tren desde prácticamente cualquier lugar, porque la verdad es que está bastante bien conectado. Desde Londres se tarda unas 3 horas y media. 

Si vas desde España, y quieres empezar tu viaje de manera original, hay una línea de ferry que sale desde Santander y que llega a Plymouth en unas 16 horas. Es una opción un poco pesada, porque se tarda bastante, y puede llegar a ser cara, pero aún así es muy divertido. Yo fui en ferry porque tenía un montonazo de maletas increíble, y me gustó mucho pero se hace un poco largo a ratos. 

Aunque Plymouth, como seguramente habrás podido comprobar después de leer esta entrada, no tiee monumentos como tal, y por tanto puede parecer una ciudad poco turística o que no merece la pena visitar. Sin embargo, te aseguro que si pasas aquí un par de días de viaje, no te arrepentirás en absoluto. No sólo es una ciudad llena de vida, y en la que siempre vas a encontrar algo que hacer, sino que además, como es tan tranquila, vas a disfrutar mucho de los paisajes (sobre todo en la zona cerca del mar) y de todo lo que Plymouth tiene que ofrecer.