Fin de semana en París (Parte II)
Si el primer día en París había sido principalmente para hacer algunas compras, el domingo fue más bien para pasear tranquilamente en la ciudad. Esta vez, mi amiga vino conmigo. Nos levantamos tarde y desayunamos la pizza que había sobrado de la noche anterior ^^ Después de eso (y de tomar una ducha, claro está :P)… ¡A pasear se ha dicho! :D
Primero fuimos al Panthéon, ese lugar donde yacen los restos de los grandes personajes que han marcado la historia de Francia: escritores como Victor Hugo, Émile Zola, Alexandre Dumas; científicos como Marie y Pierre Curie; militares y hombres políticos como Jean Jaurès.
La fachada del Panthéon
Ya había visto este lugar desde fuera, y como todos los grandes edificios y monumentos parisinos, es majestuoso. Sin embargo, nunca había entrado ahí. Ya que pronto cumpliré 26 años (:S >. <), las entradas gratuitas se acabarán para mí :( Así que me dije que tengo que aprovecha al máximo ahora :D
Interior del Panthéon. Originalmente, este edificio iba a ser una iglesia consagrada a Sainte Géneviève, la patrona de París. Después de periodos alternados entre iglesia y edificio laico, a la muerte del gran escritor Victor Hugo, el Panthéon fue destinado definitivamente a ser un lugar de homenaje eterno para los personajes sobresalientes de Francia.
Estuvimos como una hora en ese lugar. Saliendo ya teníamos hambre, así que fuimos a ver los menús de los restaurantes que están sobre la calle Soufflot. Yo en un inicio estaba tentada por una hamburguesa, pero costaban entre 12 y 14€. Además, mi amiga me dijo que no tenía suficiente dinero, que prefería comprar sólo un sándwich de 4€, más o menos. Finalmente, fue mejor así porque entramos a una cafetería/sandwichería llamada Columbus. Descubrimos este lugar de casualidad y quedamos bastante contentas: yo compré un menú estudiante por sólo 6€30: tenía un sándwich, una bebida (pedí un mocha chocolate) y un postre (un muffin de arándanos ^^). Mi amiga ordenó sólo un panini. La chica que nos atendió fue muy amable, por cierto.
El rico (¡y barato! :D) menú estudiante de Columbus ^^
Después de haber comido, queríamos ir a un concierto gratis que habría en el Musée d’Orsay pero algo salió un poco mal. Empezaba a las 4:30 p. m. pero como pasamos a comer antes, llegamos a las 5:25 p. m. al museo y… ¡oh, sorpresa! Ya no pudimos entrarporque como o cierran a las 6:00 p. m., el último acceso se hace a las 5:30 p. m. :(
Mi amiga y yo nos quedamos justo en el mismo lugar que esas (bellas) estatuas al exterior del Musée d'Orsay... ¡afuera! >. <
Pero bueno, en París siempre hay algo que hacer :D Así que decidimos caminar a lo largo del río Sena. En un principio queríamos ir hasta les Jardins de Luxembourg, pero como nos quedamos viendo un rato el río y los transeúntes, cuando nos dimos cuenta ya empezaba a obscurecer. Así que atravesamos el Pont des Arts y nos quedamos ahí un buen rato.
Domingo relax en la orilla del río Sena: había varias personas, desde familias con niños pequeños, hasta grupos de amigos. Todo mundo disfrutando de la tarde tranquila :)
El Pont des Arts es ese famoso puente donde las parejas colgaban candados para sellar su amor <3 Y digo colgaban porque después de que una parte del puente se derrumbara a causa de tanto peso de los candados, decidieron quitarlos todos. Para evitar que volvieran a colgar más candados, pusieron una especie de vidrio transparente en donde antes había rejas. Me gustó mucho cómo se ve ahora :)
En el puente, hay bancas en las que uno se puede sentar para platicar, para disfrutar de la vista del río o para escuchar a los músicos que se instalan ahí. Eso último fue precisamente lo que hicimos nosotras ya que había un señor que tocaba el acordeón. Tocó el vals número 2 de Dmitri Chostakovitch es una de mis piezas preferidas. Además, cuando recibía una moneda, les deseaba a las personas un feliz año nuevo. ¡Era un señor muy sonriente! Hubo un grupo de adolescentes que pasaron y se pusieron a bailar al ritmo de la música y el mismo músico les aplaudió. No tanto por su actuación, sino por su alegría y espontaneidad. Mi amiga y yo sonreímos también al ver esa escena :)
Paris by night... Le pont des Arts, la musique... ô beauté! <3 Paris, je t'aime !
Seguimos caminando para pasar delante de la mairie du 2ème arrondissement. Ese edificio nos llamó la atención porque creímos que era una iglesia. Queríamos entrar pero nos dimos cuenta de que no se podía, jajaja Así que sólo observamos la fachada desde fuera. Investigando, encontré que justo al lado de la mairie se encuentra la iglesia de Saint-Germain-l’Auxerrois. No estábamos tan equivocadas finalmente, sí se trataba de un edificio religioso finalmente (¡que con esa facha, no nos podía engañar! :p ).
Éste fue el edificio que nos llamó la atención... ¡oh, brillitooos! *. * No, no crean que por eso fuimos a verlo... bueno, si, la verdad por eso dije que quería ir ahí jajaja :P
Continuamos nuestro paseo... No íbamos a ningún lugar en específico, sino que solamente deambulábamos por las bellas y animadas calles de la ciudad de las luces. Llegamos hasta un lugar donde había un concierto de jazz. Vimos que la entrada era gratis, así que entramos. Había además una chica que bailaba al ritmo de la música. Su danza era estilo contemporáneo, así que era… particular :p Pero disfrutamos de ese concierto: la voz de la cantante era muy bonita. Aunque no pudimos ir al concierto del Musée d’Orsay, finalmente fuimos a otro. ¡No nos quedamos con ganas de música!; ) (Bueno, agreguen también el acordeonista del Pont des Arts jajaja).
La música estuvo presente en nuestro día... Comme quoi le hasard fait bien les choses :)
Nos quedamos hasta al final del concierto y decidimos regresar a casa. Tomamos el metro y pasamos a una tienda a comprar un poco de fruta. El día anterior, yo había comprado aguacates para hacer guacamole (¡con la verdadera receta mexicana! :D), así que llegando a casa, preparamos esta rica receta, que fue nuestra cena ^^
Fue un día más tranquilo pero no por eso menos bello: visitamos un monumento histórico y nos paseamos por las calles de París. Ya sea para venir de compras o sólo para pasear, un fin de semana en la capital francesa será siempre perfecto. Este fin de semana, lo fue :)
Arte acallejero en París. Vi esta misma transformación (?! ) de letrero en Florencia. Me imagino que debe ser del mismo artista.
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