Descubriendo a Pamplona

La experiencia de Erasmus es única. Por el inicio todo me parecía muy difícil y me puse muy estresado. Creo la mejor descripción será que por el día vas a estresarte por muchas cosas. Yo cuando vine a Pamplona no sabía nada. No sabía dónde es la escuela, no tuve un piso a vivir, necesitaba cambiar varias asignaturas. Y el único escape de ese estrés viene por la noche cuándo todos quieren emborracharse y encontrar gente nueva. Hombre, las fiestas del principio de Erasmus están muy locas porque nadie conoce a nadie y por eso todavía no se habían formadas las grupas pequeñas con cuales la gente normalmente sale. No, por el principio más o menos todos los internacionales salen juntos y todos están muy emocionados por conocer gente nueva y encontrar amigos por el resto del semestre.

               Pero después de una o dos semanas las cosas se empiezan a cambiar poco a poco. Ya no todos salen en ese grupo grande sino en grupos más pequeños ya que todos habían encontrado algunos amigos y se empiezan a formar grupos de amigos más profundos. Normalmente ese tiempo ya tienes todo listo para la escuela y, en algunos casos, la escuela ya había empezado. Empieces a venir a las clases y encontrar gente de otra manera que una fiesta. Pero hay muchos choques de cosas nuevas y de la cultura. Para mí lo primero era por ejemplo que la gente checa normalmente usa muchos emoticones y no escribamos “haha” y para empeorarlo ni la gente española escribe “haha” sino “jaja”. Otra cosa que me sorprendió fue que todo el mundo no usa Facebook Messenger tanto como nosotros. Los españoles usan whatsapp demasiado y por ejemplo los americanos usan Snapchat muchísimo. Tienes que acostumbrarte a esos cambios pequeños.

               Pero claro que Erasmus no es sólo estrés y sorpresas culturales. Es también encontrar gente que es muy diferente de ti y pertenece a diferentes grupos sociales, para mí eso es la parte mejor de Erasmus. He hecho amistad con por lo menos dos personas quienes creo que serán amigos por el resto de vida. Y en Praga no creo que encontraría gente como esos dos. Uno es un chico de Quebec, Canadá quien, de verdad, es muy diferente de mí. Otra es una chica de Polonia que también es más o menos mi oposito. Y eso es la magia de Erasmus, encuentras gente que, aunque sea muy diferente de tú, te enamorarás.

               Después de más o menos un mes empecé a deprimirme mucho. Creo que todos tienen ese período de un o más días cuando se recuerdan que están muy lejos de su familia, amigos y país. Esos dos días no podría hacer nada, sólo estuve en mi cama y no quería moverme ni un poco, sólo quería volver a Praga a ver mis amigos y mi hermana. Pero no te preocupes eso va a desaparecer después de uno o dos días. Y después de eso uno se afinca totalmente y ya ni va a pensar sobre su país y sólo va a disfrutar de esa experiencia maravillosa.

               El segundo mes, para mí, era sobre el surf. El segundo mes de escuela ya no hay tantas cosas así que uno tiene tiempo a viajar, surfear o hacer lo que quiera. Para mí la mejor parte de ese período era que cada fin de semana yo y mis amigos fuimos al San Sebastián a surfear. Pero varia gente hace varias cosas en ese parte de Erasmus. Sé a chicas que viajaban por toda la España, pero también a gente que se sólo quedó aquí en Pamplona y salió de fiestas. Para algunos Erasmus significa la oportunidad a viajar por Europa (para los estudiantes de intercambio de p.ej. estados unidos o Canadá) así que esa gente se viajaba mucho y ha ido por todas las partes de Europa.

               Eso era mi parte de Erasmus favorita porque después, por el tercer mes y el cuarto ya es un poco diferente. Yo soy un caso especial porque no tuve mucho dinero, pero toda la gente ya tiene que hacer cosas para la escuela y por el cuarto mes todos ya se ponen tristes porque, de verdad, la mayoría de la gente que trataste de conocer con tanta fuerza, no la vas a ver nunca por otra vez y si sí, no la vas a ver tanto como querías. Así que para mí la mejor parte es el segundo mes.