DESIERTO DE LA TATACOA
Cuando estaba en segundo semestre de antropología hice varias salidas de campo, una de ellas al desierto de la Tatacoa, una experiencia espectacular que hoy les quiero compartir.
Creo que si no hubiera sido por el carácter obligatorio de la salida sería un sitio que nunca hubiera visitado, no soy muy afecta a los desiertos (y como dice mi mamá: al que no quiere caldo se le dan dos tasas. Hoy vivo en Egipto), pero resultó una experiencia muy agradable.
Las primeras noticias del desierto las cuenta el cronista de Gonzalo Jiménez de Quezada, que llegó por error con su compañía a este lugar, él conquistador lo llamó “El valle de las tristezas” por el panorama tan desolado, pero luego lo llamaron el desierto de la tatacoa por las serpientes.
El nombre es un completo engaño, ni es desierto ni hay tatacoas, en verdad es un bosque seco tropical, y el color ocre se debe a la erosión. Siempre ha llamado la atención porque es un desierto entre dos ríos exuberantes: el Magdalena y el Cabrera. Además es un yacimiento muy importante de fósiles que fue la razón por la que fuimos en la salida de campo.
Para llegar al Desierto de la Tatacoa hay que llegar primero al pueblo de Villavieja en el Huila (Colombia), de la capital del Huila, Neiva, a Villavieja solo se puede llegar por carretera, hay muchos autobuses que cobran entre 15 y 18 dólares por el trayecto, les recomiendo viajar siempre en horas de la madrugada pues después el calor hace que el viaje sea agobiante.
Ya en Villavieja hay varios planes, visitar el museo paleontológico que funciona en la antigua capilla de Santa Bárbara, que además de ser gratis está abierto todo el día, allí hay excelentes guias que les contaran la historia de Villavieja, y podrán ver fósiles de quince mil años que se han encontrado en el desierto, es gratuito pero se acostumbra darle una propina a quien les sirva de guia, entre tres y cinco dólares es lo acostumbrado (por persona, no por grupo).
También está el moderno observatorio astronómico, se hacen talleres para grupos y observaciones nocturnas en fechas especiales, cuesta cinco dólares al igual que el uso de los telescopios propios. El desierto de la Tatacoa es un lugar ideal para hacer observaciones astronómicas, en eventos especiales como las lluvias de estrellas es muy recomendado, se pueden ver las ochenta y ocho constelaciones y hay quienes dicen que hasta Ovnis. Yo no vi ninguno en la semana que estuve. Les dejo el link del observatorio astronómico para que puedan buscar más información: www.tatacoa-astronomia.com
En el pueblo se puede alquilar habitaciones, hay cuatro hoteles donde la noche vale entre cinco y quince dólares, son lugares modestos, no tienen aire acondicionado ni duchas frías. Hay una piscina muy bonita para bañarse un rato, aunque a veces solo está abierta fines de semana, para comer hay varios restaurantes que siempre sirven la comida de la región.
Desde Villavieja se puede ir al desierto de la Tatacoa, puede ser a pie (son unos veinte kilómetros), carro o moto alquilada. En el desierto en si no hay restaurantes, en algunas casa sirven almuerzos a precios moderados pero no siempre, lo mejor es enterarse con anterioridad o llevar enlatados, si se programan las visitas el guia les puede llevar a una casa donde les preparen un cabrito al horno que es delicioso, y otras comidas típicas como el quesillo de piedra.
Se puede dormir en carpas, eso sí, por seguridad, que sea cerca de una casa de las del desierto, las personas no cobran pero se les puede dejar una propina o comida, o en muchas casas alquilan hamacas ya tendidas que son muy cómodas y refrescantes. Una ventaja que hay en quedarse en las casas en las hamacas en que en las noches se hacen sesiones donde los mayores cuentan los mitos y las historias que les han sucedido; en mi opinión fue de las cosas más enriquecedoras de mi viaje porque es diferente leer el mito de la madremonte o de la llorona, que conocer de primera mano las experiencias de los que las han visto.
Les recomiendo profundamente que contraten un guia para el desierto, se han perdido personas pues el paisaje es hermoso y complicado, un buen guia les ayudará en el trayecto y en Villavieja hay muchas personas que se dedican a este oficio, por lo regular se cobra dos dólares por persona por día.
Los guias también les pueden programar una excavación pequeña para los aficionados a la arqueología o paleología, y como el sitio está lleno de fósiles podrán llevarse bonitos recuerdos a casa.
Es bastante recomendable llevar un botiquín personal con las medicinas que puedan necesitar, en especial pastillas para la jaqueca y si necesitan medicamentos especiales (pastillas para el corazón, para la tensión, etc.), es importante atender a las recomendaciones del guia para evitar accidentes pues la atención medica de Villavieja es de nivel uno, y la atención especializada más cercana está a dos horas de viaje.
Como hay escorpiones y arañas hay que revisar bien la ropa y los zapatos antes de vestirlos, y llevar mucha agua para beber. Los pobladores del desierto obtienen su agua de los “ojos” o “manas”, que son pozos de agua limpia que cuidan mucho, por favor, no hay que lavar ropa, bañarse, orinar u otras cosas allí pues es el único suministro con el que cuentan. Muchas veces los turistas se bañan en estos ojos de agua para refrescarse del calor agobiante, pero al hacerlo enturbian el agua o la dejan con residuos tóxicos, como jabones, y como no hay más las personas de la región cocinan y beben el agua en esas condiciones, esa es la razón por la que hay que ser muy respetuosos con estas fuentes.
Los paisajes son hermosos y es un territorio muy silencioso, para hacer retiros, terapias de pareja, de grupo, retiros de trabajo es un ambiente muy propicio. También se puede practicar ciclismo, y deportes extremos, pero para hacerlo hay que coordinar con una agencia de turismo o un guia para que dispongan de todo lo necesario.
Una última recomendación: el desierto de la tatacoa no es solo un espacio turístico, sino de vivienda también para unas cuarenta familias que viven del pastoreo de cabras, el intercambio de productos y uno que otro servicio turístico, por favor, toda la basura que hagan llévensela con ustedes, no dejen desperdicios y si pueden ayudar a los pobladores comprándoles la comida directamente o con otros servicios mucho mejor.
Espero que cuando lo conozcan los disfrute y avisan si ven Ovnis ;)