De Atenas a Nafplio, mi ciudad favorita de Grecia.

Nafplio es una pequeña ciudad en la región del Peloponeso, al oeste de Grecia, de tan solo 14000 habitantes. Esta se encuentra en el primer cabo de esta región: Argólida, el más cercano a Attika y es una ciudad costera, ya que se sitúa en la costa oeste de este cabo que da al Golfo Argólido. Personalmente, Naufplio es la mejor ciudad griega que he visitado hasta el momento y me parece una parada obligatoria si vais de viaje a Atenas, pues solo está a una hora y media en coche desde Atenas y el viaje se hace muy ameno ya que la carretera que hay que seguir va por toda la línea de la costa.

A lo largo de este trayecto, sobre todo en la carretera que pasa por el Golfo de Megara, pasaréis por algunos miradores contiguos a la carretera, de los cuales en la mayoría hay algunos espacios para aparcar y desde los cuales tendréis unas bonitas vistas del contraste entre el verde de la montaña que estaréis rodeando y el mar debajo.

Uno de los puntos por los cuales tendréis que pasar obligatoriamente si salís desde Atenas es el canal de Corinto, una vía de agua artificial que separa Grecia central de la región del Peloponeso. Este canal evita que los pequeños barcos tengan que rodear los 400 km alrededor de la península del Peloponeso y hoy en día siguen cruzándolo unos 10000 barcos al año.

En uno de los puentes que cruzan este canal hay una vía peatonal desde la cual podréis sacar la famosa foto del mismo. Además de todo esto, la ruta hasta Naufplio es la excursión perfecta para un día o un fin de semana, ya que, como ya he dicho, la distancia desde Atenas no es mucha y hay algunos puntos que se pueden visitar por el camino. Asimismo, Naufplio es un buen destino tanto para un periodo corto de tiempo como para uno más alargado, pues no es una ciudad muy grande y da tiempo a ver lo principal en poco tiempo pero también tiene mucho que ofrecer y con buen tiempo puedes bañarte en varios puntos de la ciudad, por lo hablar de sus alrededores; cerca de la misma hay numerosos puntos cercanos que se pueden visitar aprovechando la estancia en esta ciudad.

Qué ver en Naufplio

A pesar de ser una ciudad pequeña, Naufplio tiene muchas cosas que ofrecer y distintos tipos de entornos; castillos, fortalezas, calles, fachadas, paseos por la costa o playas. Su elemento más característico es Palamidi, una fortaleza situada en la Acronauplia, que, antiguamente, constituía una sola ciudad a parte hasta el siglo diecinueve. Esta fortaleza de estilo barroco fue construida por la Serenísima República de Venecia durante la primera mitad del siglo dieciocho y consta de ocho bastiones con nombres griegos nombrados con los jefes de guerra que facilitaron la conquista griega de la fortaleza ante el imperio turco.

Estos se pueden visitar en la actualidad y los que mejor se conservan son los que se sitúan del lado derecho, es decir, los que dan contra el cabo de la ciudad y el mar, como por ejemplo el bastión Romber, que es el primero que se divisa en la subida al castillo, el bastión Leonidas, con vistas a la parte norte de la ciudad, el bastión Phokion, desde el cual se puede observar la playa de Arvanitia, el bastión Themistoklis en la parte más alta de la fortaleza o el bastión Agios Andreas, personalmente mi punto favorito de la fortaleza ya que ofrece las mejores vistas de la parte baja de la ciudad.

Además, entre las fortificaciones de la fortaleza, se encuentra la iglesia de San Andrés que se camufla con las paredes y la cual recomiendo atravesar para llegar a la parte sur de la fortaleza desde la cual tendréis vistas a la región del Peloponeso de Laconia.

Para acceder a la fortaleza, se puede optar por ir en coche desde la ciudad (unos diez minutos) o andando por los 913 escalonesque suben desde el centro de la parte baja de la ciudad.

Desde Palamidi también se puede observar la segunda fortaleza de Naufplio: el castillo de la Acronauplia. Esta fortaleza es mucho más pequeña que la de Palamidi y se sitúa también en una parte más baja. No obstante, las vistas son igual de impresionantes que desde la anterior, ya que desde esta se puede observar tanto la parte baja de la ciudad desde más cerca como la costa del lado contrario. Un elemento característico de la misma es la torre del reloj, la cual se puede divisar desde casi cualquier punto de Naufplio. Para llegar a este castillo, se puede acceder tanto andando como en coche por la carretera que sube a la Acronauplia, la paralela al camino de Arvenitias.

Sin embargo, Naufplio no es solo conocido por sus fortalezas y sus vistas desde lo alto; la parte baja de la ciudad es conocida por sus calles de estilo italiano y casas con fachadas de colores.

La calle Othonos, la calle Vasilissis Olgas o la calle Vasileos Alexandrou. Siguiendo estas tres hasta el final, llegaremos a la calle Filellinon, justo en la costa, en cuyo centro se encuentra un pequeño obelisco dedicado a los filohelenos franceses.

Del otro lado de la parte baja de la ciudad, está la iglesia de San Giorgio, construida durante la primera ocupación veneciana y famosa por su campanario de tres pisos.

Si seguimos andando por la calle contigua a esta iglesia, llegaremos a otra de las calles principales de la ciudad: Vasileos Konstantinou, la cual lleva a la plaza Syntagma, la principal y el centro histórico de la parte baja. En ella se pueden apreciar algunos de los monumentos más destacados del lugar, como por ejemplo el Vouleftikon, que fue el primer parlamento helénicoy que hoy en día funciona como palacio de justicia.

Aprovechando que os menciono la parte baja de la ciudad, donde se encuentra la actividad principal de la ciudad y los comercios, os recomiendo dos cafeterías de la zona: la primera se llama Black Cat, muy acogedora pero cara (como en todas las cafeterías de Grecia, ya que ponen caro el precio del café en primer lugar por los impuestos y segundo porque tienen que compensar el tiempo que se pasan los griegos en los locales) y también la cafetería Prego y Coffee Island, la famosa cadena (os las recomiendo porque ofrece precios más asequibles).

Como ya he mencionado al principio, los escenarios que ofrece Naufplio son muy variados; si queréis dar un paseo por su costa, os recomiendo que vayáis por el paseo del puerto por la calle que se llama Boumpoulinas hasta llegar aΦάρος Ναυπλίου, el faro de la ciudad al final del espigón del puerto, desde el cual se puede observar desde más cerca el castillo Bourtzi. Este castillo es muy singular ya que se sitúa en una pequeña isla en frente de la ciudad llamada la isleta de San Teodoro. Fue construido durante la etapa veneciana como cárcel, aunque también sirvió como parlamento griego más adelante, hasta convertirse en lo que se conoce hoy en día como hotel de lujo. Además, hoy en día se puede acceder a él en barco desde el puerto de Naufplio por tan solo cuatro euros y, en él, se celebran algunos eventos y fiestas locales durante el verano.

Si seguimos el recorrido por la costa, nos encontraremos con la pequeña fortaleza de “The five brothers”, la más baja de las tres que existen en la ciudad y cuyo nombre proviene de los 5 cañones que este alberga. El paseo que le sigue se llama Arvanitias y, aunque haya una valla que impida el acceso al paseo por la costa, se puede rodear fácilmente para acceder al mismo (los propios locales lo hacen, lo hemos visto con nuestros propios ojos).

Personalmente, merece mucho la pena pasar por el mismo ya que las vistas son preciosas y se podría decir que es la parte olvidada de este lugar, aunque para mí es mi favorita y más especial. Por el camino, casi en la punta de este cabo os encontraréis con unas escaleras de piedra que suben hasta una pequeña capilla de estilo griego desde la cual hay unas vistas increíbles. A partir de este punto, todo el camino de Arvanitias se hará paralelamente al mar y os dejará con vistas muy bonitas a la región del Peloponeso y a la fortaleza Palamidi en las alturas. Finalmente, al final de este paseo, estará la playa de Arvanitias, la cual frecuentan bastantes bañistas incluso en invierno debido a las temperaturas agradables de la zona.

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