Sábado, abuelos y pastel de carne

Desde que llegué no había salido de casa. Me resulta increíble darme cuenta que me cuesta tanto pisar el asfalto y enfrentarme al mundo, ese mismo mundo que tantas veces me he creído comer. Pero hoy era el día.

No hay mejor motivo para salir que ir a ver a tus abuelos. Ellos estaba preocupados y con ganas de verme ya, así que por ellos, pero también por mí, me he dado una ducha y he emprendido camino (literal y metafórico).

"La vida es un regalo", me han dicho; y es cierto. Ellos lo son. Me he emocionado al llegar, pero todo ha pasado a un segundo plano prontamente. He vuelto a sentarme en la mecedora de la derecha, la que está al lado de la silla de ruedas de mi abuela, para que me tenga cerca. He empezado hablando yo pero ellos me han acompañado remontándose a sus tiempos mozos. "Virginia, te queda mucho, eres muy joven y tienes todo el tiempo del mundo".

También hemos hablado de Murcia -ahora que me he propuesto empezar a relatar este reto necesito tanto información como inspiración-, y me han contado cómo los domingos cogían el coche e iban a Murcia a escuchar misa "nos metíamos cada semana en una distinta, como hay tantas por allí... Luego paseábamos, mirábamos escaparates y nos tomábamos una cerveza y un pastel de carne antes de volver a casa". Mmm.. los pasteles de carne... ¡qué ricos! No puedes venir a Murcia y no comer uno. Se trata de un hojaldre en forma circular, tan grande como la palma de la mano sin llegar a estar abierta (normalmente). El relleno está compuesto de carne picada (bien puede ser ternera, sesos o morcilla). Se le añade choricito picado, sal y pimienta para que le de sabor y huevo cocido para suavizarlo un poco. También se le pueden añadir verduras (tomate, pimiento,... En realidad hay muchas variedades). El resultado es un postre salado muy crujiente... Si puedo recomendaros una confitería excelente que los prepara es la Confitería Roses. Yo siempre voy a la que está en Floridablanca (en pleno centro de Murcia, dentro del Barrio del Carmen), pero creo que hay más. Se me hace la boca agua y ya va siendo hora de cenar... Buenas noches y... ¡qué aproveche!

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