Montreux, Suiza

El primer fin de semana que mi novio vino a verme, estaba decidida a viajar lo máximo posible. Así pues, planeamos hacer un pequeño viaje a Montreux ese sábado, ya que me habían aconsejado que fuese. Se conoce a Montreux como la "Montercarlo de Suiza". Puede que sea porque en su zona portuaria hay un casino o por sus paisajes... ese panorama de las montañas que quita el aliento. Esta ciudad también es popular gracias al festival de jazz que se celebra en verano, al que asisten muchas estrellas.

Tan pronto como llegamos, nos sorprendió la cantidad de coches deportivos que nos adelantaban por las calles de la ciudad y la belleza de los hoteles de cinco estrellas y sus terrazas de vivos colores. Fuimos a la oficina de turismo para preguntar cómo podíamos llegar hasta el Castillo de Chillón, el destino turístico más popular de la ciudad. Cogimos un autobús hasta el castillo y, por el camino, admiramos las construcciones arquitectónicas que nos rodeaban. Cuando llegamos, la arquitectura medieval del castillo me impresionó mucho, era completamente precioso y parecía sacado de un cuento de hadas. Hicimos un pequeño tour por el interior del castillo porque nos intrigaba averiguar qué podían mostrarnos en un tour guiado de dos horas. El contraste entre la arquitectura histórica y los hermosos paisajes naturales es sin duda algo para recordar. Después, volvimos al centro de la ciudad caminando, disfrutando cada momento. Ginebra es muy bonita, pero Montreux está a otro nivel muy diferente. Estaba un poco nublado, lo que añadía belleza al paisaje ya que las montañas casi se fusionaban con el lago. Cerca del centro de la ciudad, se encuentra el Casino de Montreux. Entramos en él, pero no jugamos porque no sentíamos que la suerte fuese a acompañarnos; pero es divertido visitarlo ya que dentro se respira una atmósfera muy animada.

Las mejores cosas que hacer en Montreux

Castillo de Chillón

Para llegar hasta allí podéis coger el autobús número 201 (si tenéis la «Carte Journalière» no necesitaréis comprar un billete) que pasa cada 10 o 20 minutos y os llevará directamente al castillo. La parada del autobús se llama "Chillón". También podéis optar por ir caminando hasta allí por el "camino florido"; esta ruta parte de la estación de Montreux y dura 45 minutos. Nosotros volvimos caminando por este sendero y es espectacular.

En cuanto a las entradas, os harán un descuento si tenéis la «Carte Journalière», así que no olvidéis enseñarla en la taquilla. Suelen costar 12, 50 francos suizos las entradas para adultos y 10, 50 para los estudiantes.

La historia del castillo

Destacan tres periodos históricos principales que influenciaron al Castillo de Chillón: el periodo de los condes de Savoya (del siglo XII a 1536), el periodo bernés (de 1536 a 1798) y el periodo valdense (1798 al presente). Gracias a estos periodos históricos desfavorecedores, el castillo es tan espectacular a día de hoy, ya que este edificio es el resultado de siglos de constantes construcciones, restauraciones y renovaciones.

El "camino florido"

El paseo desde el centro de la ciudad hasta el castillo y viceversa es maravilloso. Podréis contemplar unas vistas de 180º del lago Lemán, rodeado de montañas impresionantes y la ciudad situada a lo largo de la orilla del lago frente a vosotros. Es muy romántico y una gran experiencia. No tengo palabras para expresar la belleza de este lugar, es lago que debéis ver vosotros mismos.

«Gorges du Chauderon»

Otro panorama muy bonito y natural es «Gorges du Chauderon». Encontraréis esta belleza a tan solo unos metros del casco antiguo de Montreux. Podéis coger el tren y bajaros en la parada «Les Planches» que también es un puente que cruza la «Baye de Montreux». El camino está muy bien señalizado y os llevará al puente de la autopista, donde encontraréis la entrada al desfiladero. Seguid siempre los caminos (y a la gente) y podréis disfrutar de esta maravilla.

Experiencia en un estudio de grabación (Queen)

Para aquellos que seáis fans de la música, esta es una oportunidad fantástica para ir y explorar el estudio en el que Queen grabó una vez un total de siete álbumes, incluyendo su último álbum «Made in Heaven». La parte principal de la exhibición es el estudio de grabación original donde Freddie Mercury grabó sus últimas canciones. La entrada es gratis, así que os recomiendo que, si tenéis tiempo, vayáis y le echéis un vistazo.

Esta es su página web.

Festival de Jazz de Montreux

Si tenéis la suerte de visitar Montreux en verano, intentad comprar unas entradas para su festival de Jazz. Se organiza durante los meses de junio y julio y muchas gente (y músicos) de muchas partes del mundo viene a pasárselo bien. Cuenta con dos escenario principales: Auditorium Stravinski y Miles Davis Hall, una cafetería llamada «Montreux Jazz Café» y muchos otros escenarios al aire libre. Algunos de los músicos y de las bandas más famosas han tocado en este festival, como Led Zeppelin, Marvin Gaye, Green Day, Muse, Radiohead, Black eyed peas, etc.

«Rochers-de-Naye»

Desafortunadamente, yo no tuve tiempo para subir a esta montaña, pero he leído que, si tenéis tiempo, para subir tenéis que coger un tren en la estación de Montreux. Se encuentra a una altura de 2042 metros y, en definitiva, es el destino perfecto para los amantes de la naturaleza. Contemplaréis unas vistas de 360º llenas de montañas y valles, pueblecitos y bosques. En invierno, es el lugar perfecto para ir a esquiar, mientras que en verano se puede hacer senderismo. Cuenta con varias atracciones, como el jardín alpino «La Rambertia», colonias de marmotas y las cuevas «Grottes de Naye». Si queréis pasar la noche allí, podéis alquilar una tienda de estilo mongol original. Si queréis leer más sobre estas tiendas, echad un vistazo a su página web.

Los viñedos de Lavaux

Otro lugar al que no tuve tiempo de ir, pero al que iré sin duda si vuelvo a Montreux, son los viñedos de Lavaux, que forman parte del patrimonio de la humanidad de la Unesco. Podréis verlos durante el trayecto en tren hacia Montreux, pero estoy segura de que pasear por estos viñedos tiene que ser precioso. Durante este paseo, os rodearan 830 hectáreas de viñedos. Y quizás después podréis catar un poco de vino en las bodegas Lavaux.

Para más información, visitad la página web de la Unesco.

Cómo viajar a Montreux

Si viajáis desde Ginebra, podéis o bien comprar un billete de ida y vuelta por 60 francos suizos, o un billete «city-city» (valido para las zonas 10 y 73, por lo tanto, también valido para viajar entre Ginebra y Montreux) que os costará unos 75 francos suizos ida y vuelta.

Yo viajé a Montreux desde Lausana, por lo tanto me costó mucho más barato. Podéis comprar un billete de ida y vuelta «Mobilis Carte Journalière», valido para siete zonas, que os costará 25, 20 francos suizos.

Si entráis en la página web del SBB u os descargáis su aplicación para el móvil, siempre podréis buscar billetes baratos. Podéis obtener un 50 % de descuento si sabéis la fecha y la hora exacta de vuestro viaje (sujeto a disponibilidad).

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