España, Día 1

Visité este país en febrero de 2017 con mis amigas Marta y Bella. Tal vez suene a locura irse de viaje en febrero, pero ten en cuenta que mientras la mayor parte del mundo está congelado, España tiene una temperatura magnífica de unos 20 grados. El plan era una locura: 4 ciudades en 7 días. Marta y yo llegábamos primero y Bella se uniría a nosotros el días siguiente.

Antes de los problemas del viaje

Reservamos nuestros vuelos de Ryanair muchos meses antes, ahorrando por tanto mucho dinero. Sin embargo, reservando con tanta antelación se traduce en que corres el riesgo de que tu vuelo no termine saliendo a la hora más conveniente. Por ejemplo, Marta tenía un examen programado justo en medio del viaje. No estaba segura de ser capaz de ir hasta el último minuto cuando consiguió posponer el examen. El problema con las compañías baratas es que cualquier cambio en el billete (nombre del pasajero, vuelo, fecha) cuesta más que el propio billete.

Hacer la maleta. Como la mayoría de chicas, no puedo imaginarme ir a cualquier parte sin al menos la mitad de mi armario, varios pares de zapatos y toneladas de maquillaje. Pero, ¿qué puedes hacer cuando tu presupuesto es limitad y solo puedes llevar el denominado equipaje de mano? Esta maleta no puede exceder las proporciones ni el peso requerido por la aerolínea. Me llevó muchos días planificar lo que llevaría y al final no hice la maleta demasiado bien. Debería haber metido esas zapatillas feas pero increíblemente cómodas, en vez de mis botas de diseño. Además, se me olvidó llevarme la máscara de ojos. Vaya comienzo.

Día 1

Estos primeros momentos del viaje son normalmente muy estresantes. ¿Por qué de repente mi equipaje de mano ya no lo es? ¿Seré capaz de encontrarlo después? ¿Cómo voy del aeropuerto a la ciudad? ¿Dónde está mi apartamento?

Marta y yo aterrizamos en el aeropuerto de Madrid. ¡La maleta está aquí! Finalmente, todo el estrés por la maleta y volar se acabó. Hay un autobús que circula las 24 horas desde el aeropuerto a la ciudad cada 10 minutos o así. ¡Genial! Tal vez pueda comenzar a disfrutar de mi viaje... pero, ¿dónde está el apartamento? Madrid es una ciudad enorme y encontrar una dirección es un pequeño desafío. Utilizamos una aplicación llamada "Maps Me" para navegar incluso sin Internet. Llevó más tiempo de lo esperado, pero lo encontramos.

Uso la página Airbnb para encontrar lugares donde alojarme cuando viajo. Siempre existe el riesgo de que lo que ves por Internet no sea lo que luego te encuentras. Pero a veces te sorprende gratamente. Nuestro alojamiento se encontraba encima de un bar en la calle Salitre. Una zona excelente para estudiantes que buscan tener un divertido viaje.

La primera impresión que tuve de Madrid es que nunca había visto una ciudad tan animada. Hay bares y cafeterías en cada esquina. Puedes oler la cocina local en todas partes. Hay mucha gente feliz paseando. Nadie parece tener prisa. Incluso aunque Madrid sea una ciudad enorme, de alguna manera no te hace sentir pequeño, te sientes bienvenido.