Introducción

El Erasmus es una experiencia muy dura. Y más para tres estudiantes tolerantes a todo (a todo).

Nosotros, los tres ilustres autores de esta recopilación de bizarradas y parafernalias, hemos querido plasmar nuestra experiencia (que no es poca y fácil) para la posteridad y el posible aprovechamiento de generaciones futuras. Varios son nuestros orígenes, que al fin y al cabo, se remontan a localizaciones más bien cercanas, que al final convergen en una relación entre el Antiguo y el Nuevo Mundo (disculpen ustedes, el pato nos ha afectado). Y como esta frase está exenta de sentido existencial, vamos a presentarnos debidamente como la gente civilizada y educada que somos (venga hombre). No obstante, hemos creído conveniente no desvelar nuestros verdaderos nombres; como gente de bien, apreciamos la privacidad. De modo que toda persona incluida en este relato será poseedora de su propio pseudónimo. Sin más dilación, ¡henos aquí!

Otto Ojos Sangrantes: joven pionero por tierras lejanas, alejadas de toda mano de Dios. Emprendedor de cosas dicharacheras en general. Cuyo afán por optar inmanente por la opción menos complicada, a ser posible hacer uso del buen retozar con innato arte, lo hace, cuanto menos curioso. Reciente conocedor de la belleza asiática. Fisiológicamente hablando se le reconoce por su fuerte y musculoso hígado y físicamente por ser mozo gallardo y moreno, tan moreno que reza por que llegue el día de confesarle a su padre, que es negro, y de los raperos. Consérvese en lugar fresco y seco.

Don Aborigen: espécimen hallado por tierras norteñas cuyas desconcertantes características sorprenden al resto de especies. Parece pues que hablamos de un animal, ¡pero no! Aunque vaga podría ser la diferencia. Artista de las simetrías de libre interpretación y sin explicación moral necesaria; también lo conocerán como el hombre del moño. Pionero y gran conocedor del arte bizarro, hemos de darle las gracias por enseñarnos su gran colección de videos/películas estrafalarias. Amén por él. Gran chef, mejor persona y portador de múltiples alergias. Su maestría con un buen número de armas es digna de mención. Fiestero bailongo y maestro Pokémon.

Karlova la holgada o mujer menguante: La última en unirse al grupo o tarde como acostumbra, esta chica es aquella que siempre propone Liége como destino de parranda desde la primera vez que fue y la noche la dejó embelesada. Es la más pequeña pero con la bici más grande de todas, aquella cuyo cuarto crea un aroma inconfundible a Holanda, aquella cuya simpatía y belleza se ha ganado el favor de los seguratas, uno en especial. Es esa chica a la que llaman Madona en el coffeeshop.

Vasta como cualquier vasca pero entrañable como ella sola! Es la única capaz de tumbar a cualquier tío que se le ponga por delante y no tiene reparos en dejar en ridículo a alguien, al igual que hacer el mono.

Bueno, estos somos los 3 precursores de esta idea y aquí henos finalmente descrito.