Cómo es Lyon para mi, cómo lo es para vosotros: distintos puntos de vista sobre Lyon
Un punto de vista distinto sobre Lyon, entrevista con Dan Brown
Creo que hay una gran diferencia entre vivir en una ciudad o ir unos días de visita. Al vivir en la ciudad tienes más tiempo para poder disfrutar de todas las cosas que puede ofrecer la ciudad. Tienes tiempo de hacer lo que quieras cuando quieras. Como tienes tiempo puedes aplazar lo que ibas a hacer para hacerlo otro día. El tiempo te permite adaptarte al ritmo de vida y a la ciudad. Tener tiempo es lo que a veces nos lleva a ser más perezosos.
Cuando no dispones del lujo del tiempo te ves obligado a emplearlo de forma más prudente. Te sientes obligado a disfrutar al máximo de la ciudad, de su gastronomía y de sus atracciones turísticas. No tienes tiempo de acostumbrarte a la ciudad ni de visitarla a fondo para descubrir su historia. Estás activo pero porque estás en una ciudad totalmente nueva a muchos kilómetros de casa.
Al igual que el resto de turistas estás en esa ciudad para salir de la rutina de tu día a día pero ahora Lyon es mi rutina, de alguna manera mi perspectiva es diferente a la de los demás turistas. Las personas que vienen para pasar solo un fin de semana no tienen las preocupaciones que tengo yo.
Para ellos no es un problema el no tener comida en el frigorífico un domingo por la tarde. No tienen que cogerse el tranvía T2 que casi siempre va hasta arriba para ir a Bron varias veces a la semana. Que el Internet vaya fatal en las residencias universitarias tampoco es un problema para ellos, al igual que no lo es el tener que rellenar mil papeles al ser un estudiante Erasmus.
Mi opinión es muy diferente a la de un turista, por eso le he preguntado a mi novio qué es lo que opina él. En su caso ha ido a Lyon dos veces ya, pero se había quedado poco tiempo. Pero eso daba igual, como llevábamos meses sin vernos el tiempo que pasábamos juntos era oro, fuera la cantidad que fuera.
¿Qué medio de transporte usas para llegar hasta Lyon?
Para viajar de Londres a Lyon hay distintos medios de transporte a los que podemos recurrir. En primer lugar yo escogería coger un avión de Londres Gatwick con la compañía de Easy Jet. En segundo lugar también está la opción de ir en autobús desde Londres Victoria. Por último está el tren, que lo puedes coger desde la estación St Pancras.
El vuelo desde Londres Gatwick (de ida y vuelta) puede salirte por unas £ 65, de primeras no sale tan caro. La primera vez que fui a Lyon me cogí el avión. No me gusta mucho volar, por eso busqué otras alternativas. También hay que tener en cuenta que Londres Gatwick está a casi una hora de la estación de Clapham Junction y que el tren de ida y vuelta cuesta unas £ 20. Además, al llegar a Lyon tuve que cogerme un autobús que me llevaba hasta el Rhônexpress y que costaba unos 15 € cada viaje. En resumen, que coger el avión al final sale caro, me salió todo por unas £ 105 y además hay que tener en cuenta con que a veces con estas compañías low-cost hay muchas restricciones de equipaje.
Viajar en autobús sale bastante barato, pero si consideramos lo largo que es el trayecto (de unas 15 horas) no merece la pena. Si no tenéis mucho presupuesto podéis encontrar billetes por £ 30 pero solo ida y es posible que sea con transbordo en París.
La segunda vez que fui era febrero y la mejor opción que encontré fue la de ir en tren. Me metí en la página web de Eurostar y vi que se podían reservar billetes para ir en tren hasta Lyon. Pero había que cambiar en Lille o en París de Eurostar a TGV (tren de alta velocidad francés). Yo elegí Lille porque era mucho más fácil. Un billete de ida y vuelta en tren te cuesta lo mismo que en avión pero tienes más espacio y al menos te permiten llevar todo el equipaje contigo. Además, si coges el tren te deja en la estación de Part Dieu, que está en el centro de la ciudad y así no tienes que coger el Rhônexpress del aeropuerto o el autobús como tuve que hacer la primera vez que fui a Lyon.
El tren que va de Londres y llega a la estación Lille Europe dura una hora y media en llegar y luego el que va de Lille a Lyon dura tres horas. Si vas con un portátil el tiempo se pasa volado si te pones una peli o algún programa de la tele.
Una vez en Francia no tendrás Internet en el móvil así que mejor asegúrate de haber hecho planes antes de llegar a través de las redes sociales o mandándoles un SMS o llamándoles una vez allí. En los trenes TGV o Eurostar no cuentan con conexión WIFI gratis, tienes que pagar 10 euros si quieres tener WIFI durante 3 horas en el TGV.
¿Qué te pareció Lyon?
La primera vez que estuve allí fue de lo más interesante. Por mucho movimiento que tenga la ciudad no llega a ser como Londres. La primera vez que fui fue en octubre y hacía buen tiempo, por lo que no tuve que ponerme el chaquetón. La segunda vez hacía la misma temperatura que hacía en Londres y se puso a nevar. La primera impresión que tuve fue que el aire de Lyon era mucho más puro que el de Londres.
Saiesha me llevó a un centro comercial de Part Dieu y nos fuimos a comer al McDonald's, si estas en un país extranjero el McDonald's no está para mal empezar. Allí estarás más tranquilo y como ya conoces la comida de allí te sentirás un poco más como en casa. En Francia tienen unos paneles en los que puedes hacer tu pedido. Para la gente que no habla mucho francés son bastante útiles.
¿A qué restaurantes has ido de la ciudad?
La verdad es que el mejor restaurante al que hemos ido a comer fue el GoMex que hay en el centro comercial de Confluence. Es como la franquicia de restaurantes mejicanos llamada Tortilla que hay en Londres. El hombre que nos sirvió también hablaba inglés y fue muy amable, eso hizo que me gustara más aún aquella experiencia.
Además, en octubre fuimos a comer a Bellecour y a Vieux Lyon. Los restaurantes eran bastante caros pero las comidas eran de muy buena calidad, pero para los vegetarianos tampoco había mucha variedad para elegir. Aún así, esa parte de la ciudad es mucho mejor cuando hace buen tiempo porque así puedes comer en la terraza al sol.
¿Podrías describir cómo es el transporte público en Lyon?
Por diez billetes me tocó pagar 16 €. Me gusta el sistema que tienen en Lyon porque un billete tiene una validez de una hora y en ese tiempo puedes hacer todos los viajes que quieras ya sea en bus, tren o en metro. El sistema es mejor que el de Oyster en Londres, allí tienes que pagar £ 1, 40 por cada vez que te montes.
Por lo general, el transporte público está en buenas condiciones y no me acuerdo de cuándo fue la última vez que tuve que esperar más de 10 min para coger un autobús o un tranvía.
¿Cómo es el alojamiento?
Tras haber escuchado algunas historias espantosas sobre las residencias universitarias estaba un poco nerviosa. Sin embargo, cuando vi la habitación de la residencia de André Allix me quedé muerta. Las habitaciones eran mucho más espaciosas que la mayoría de las que hay en las residencias de Inglaterra y cada habitación cuenta con un frigorífico, ¡es un lujo! El inconveniente principal que tenían las residencias eran las cocinas. No estaban en muy buenas condiciones y no tenían horno.
Las duchas y los baños eran normales, tras haber compartido ya el baño en otras residencias universitarias, no me supondría compartir baño ahora.
En cuanto a los ruidos, las residencias son bastante aceptables también. Todas las personas con las que me he cruzado han sido siempre muy amables y todos daban los buenos días y las buenas noches.
¿Qué recomendarías de Lyon?
Como me gusta mucho el fútbol fui al Estadio Gerland para ver jugar al Olympique de Lyon. Siempre me ha encantado este equipo, pero sobre todo cuando ganaron la Champions con Juninho, Fred, Benzema, Lloris, Bastos, Toulalan, Coupet y Carew. Además, en el año 1998 se jugó el Mundial en el Estadio Gerland y se jugaron los cuartos de final con Alemania contra Croacia.
El último partido que fui a ver al Estadio Gerland fue el partido del Olympique de Lyon contra el LOSC Lille. Por desgracia perdieron 2-1 y ahora van 6 puntos por detrás del París Saint Germain. Aunque perdieran los seguidores estuvieron durante todo el partido dejándose la voz.
En la grada norte se ponen los «Bad Gones», es un grupo de hinchas que merece mucho la pena ver si te gusta el fútbol. Hay un hombre con un megáfono y las canciones son muy fáciles de aprender. En la grada sur hay también un grupo de hinchas pero es más pequeño que el otro. Las entradas cuestan unos 12, 50 € y si queréis ver bien el partido os aconsejo que os las compréis en la zona más alta que podáis.
El transporte y la organización para ir a ver el partido está muy bien planeado, el metro te deja en el estadio y sale cada dos minutos. Es mejor ir con las entradas ya impresas en vez de sacarlas allí porque a veces hay mucha cola y puedes acabar perdiéndote el comienzo del partido.
Por lo general ir a ver un partido de fútbol suele acabar siendo una buena experiencia - ¡Vamos Olympique!
¡También os aconsejo que aprovechéis y vayáis a visitar a los amigos que tengáis en otros países!
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