Visita al Parlamento europeo

Ayer y anteayer me fui a Bruselas a visitar el Parlamento europeo como parte de una asignatura que he hecho este semestre. La excursión estaba subvencionada por la Unión Europea, por lo que sólo hemos tenido que pagar una noche de hostal y las comidas que hayamos hecho en 24h.

Hemos ido unos 20 estudiantes y los dos profesores, que rondan los 30 años. Como hay que cuidar el medio ambiente, los profesores decidieron que iriamos en tren hasta Bruselas. Y cuidado con quien se le ocurriera protestar... Yo no me lo podía creer en un principio, porque hay vuelos de Hamburgo a Bruselas por el mismo precio y que sólo tardan 1h. Así que para que la conciencia del profesor esté tranquila, nos tuvimos que levantar el martes a las 5h para pasar toda la mañana en el tren hasta que llegamos a Bruselas al mediodía, y cogimos el tren de vuelta el miércoles al mediodía, otra vez toda la tarde en el tren hasta que llegamos a la hora de cenar. Vamos, 2 días para estar 24h en Bruselas. Sin comentarios.

El plan se supone que era visitar el Parlamento europeo, pero yo no he visto nada. Si, hemos estado ahí, pero nos metieron en una sala de conferencias toda la tarde del martes y toda la mañana del miércoles, y ahí iban pasando gente que trabajaba en el Parlamento y nos iban contando cosas. No nos llegaron a enseñar el Parlamento por dentro, sólo la sala de turno, el baño, y la máquina de café.

Encima, yo pensaba que todas las charlas que ibamos a tener allí iban a ser en inglés, porque nos habían dicho eso en clase, y resultaron ser en alemán. Así que entre el cansancio y la dificultad de la materia, a lo mejor me enteré sólo del 20% que nos contaron en las 8h que nos hemos pasado ahí metidos.

Los alemanes con los que he ido eran majos. Una es amiga mía de antes, y al resto los conocía de clase. Hay dos a los que les tenía un poco de manía porque me parecían un poco repelentes en clase, pero esta excursión ha hecho que los odie un poco más.

Estábamos atendiendo una charla de bievenida, cuando vi que uno de esos se quitaba las zapatillas. Las dejó debajo de su silla, y se cruzó de piernas como si nada. Ahí, en el Parlamento europeo. Yo no daba crédito a lo que veia, y me tuve que aguantar mucho para no tocarle por detrás y decirle lo maleducado que era y que se pusiera las zapatillas. Así estuvo una hora y media.

Pero lo más sorprendente fue cuando el profesor nos iba a dar el dinero del viaje, 108. 80€ a cada uno. Como es una cantidad un poco difícil para repartir a 20 personas, no sabía como hacerlo, hasta que la otra repelente levantó la mano y dijo que ella había pagado más de lo que debía por el billete de tren (realmente pagó la mitad que el resto porque tenía una tarjeta de descuento, pero por no se qué razones, había pagado un poco más que lo que tendría que haber pagado con esa tarjeta). Vamos, que por esos 20€ de más que tuvo que pagar, dijo en alto delante de todos que deberíamos darle nuestros 80 céntimos, y el resto recibir 108€.

Lo fuerte es que nadie dijo nada. Los alemanes, tan directos para unas cosas, y tan paradicos en otras. La mayoría de gente no estaba de acuerdo, pero nadie dijo nada, eso si, más tarde todos lo comentaban a sus espaldas. Yo no me podía aguantar, me estaba cabreando un montón de ver esa situación, pero no quería ser la única que se quejara, así que me limité a proponer una votación, pero no me hicieron caso. Estábamos en el Parlamento europeo, y no hubo ni votación ni democracia ni mierdas, el profesor se limitó a decir que si alguien tenía algo en contra, obviamente nadie dijo nada, y la chica recibió 16€ con los que se pagó la cena.

A mi me daban igual esos 80 céntimos, pero estoy totalmente en contra de como se hicieron las cosas. No se puede ser tan rácano y tan miserable y pedir ese dinero a tus compañeros, cuando nos han pagado 108€ con los que seguro que se financió toda la estancia porque ella había pagado menos por el billete por su descuento. Encima la muy maleducada no nos dio ni las gracias. Me vuelvo a cabrear sólo de pensarlo.

Por lo demás, ha sido una buena experiencia xD el martes por la noche y el miércoles al mediodía tuvimos tiempo suficiente para pasear por Bruselas y hacer algo de turismo, aunque ya era mi cuarto viaje a ese país y el segundo este año jeje. También me sorprendió mucho que los profesores habían planeado el viaje minuto a minuto, y estaba todo cronometrado. Yo sentía que me estaba estresando nada más llegar por esa situación, porque era una pasada, no hubo tiempo para comer el martes, ni para cambiarse en el hostal al llegar después del viaje, ni para ducharse por la tarde antes de cenar... A mi me encanta la organización y la planificación y me estaba estresando eso, así que imaginaros xD

Mi foto de hoy: Gdansk - Polonia

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Mi consejo de hoy: Revista Deutsch Perfekt

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