London calling: Tips
Tras unas cuantas experiencias en la ciudad del Támesis, numerosos apuros económicos y sobre todo, andar andar y andar, he conseguido conformar una especie de Kit de supervivencia para que, pese a encontrarnos en una ciudad bastante cara, como es el caso de Londres, podamos ahorrar en la medida de lo posible sin restarle emoción ni interés a nuestra visita.
Así pues, voy a enumeraros una serie de consejos que a mí me han resultado de vital utilidad:
Compra anticipada de entradas a atracciones: En general, la venta de entradas en las taquillas de las atracciones nos hacen vernos confinados a formar interminables colas, aunque tiene otra cosa negativa: El coste. Exceptuando los descuentos por tarjetas de familia numerosa/Estudiante/Tercera edad; los precios suelen ser un poco abusivos en el caso de atracciones como la Tower of London, London Eye u otras como pueden ser los célebres autobuses turísticos. Pues bien, teniendo en cuenta que a menudo son sobre 2 o 3 las que decidimos visitar, vía internet podemos encontrarlas en un pack por unas 50 Libras (dependiendo de las que sean), lo que nos permite en ocasiones ahorrarnos la friolera de 15 libras por atracción aproximadamente. Todo esto depende tanto de las atracciones escogidas como de la página visitada, ya que algunas disponen de entradas para ciertos lugares en exclusiva. Otra de las opciones es la llamada “London Pass”, con la que dependiendo de los días que se contrate, se tendrá acceso ilimitado a todas las atracciones incluidas en su programa.
En cuanto a transporte, mi consejo es siempre hacerse con una tarjeta Oyster. El importe de la tarjeta es devuelto en el momento de nuestra partida, y durante nuestra estancia nos permite comprar bonos semanales o de cada cinco días, aunque también se aplica un tarifario diferente al margen de haber contratado o no dichos bonos (en cualquier caso, es más barato que los single tickets o billetes sencillos). Como ya he dicho en anteriores posts, la tarjeta Oyster no solo nos permite viajar en metro, sino que también posibilita utilizar el bus urbano.
Uno de mis consejos es coger el bus lo máximo posible salvo que sea extrictamente necesario por motivos de tiempo (en ese caso, el Metro es la mejor opción). Por norma general, los autobuses cuestan 1, 50 mientras que el precio por trayecto para el metro casi se duplica, todo en función de la zona en la que nos movamos. Por lo tanto, a no ser que sea de vital urgencia, mi recomendación es que se use el bus, dado que además permite hacer trayectos nocturnos, así como ver la ciudad desde la parte superior de los mismos (los célebres double-decker).
Si quereis ampliar un poco más sobre el transporte, os recomiendo que le echeis un vistazo a uno de mis posts anteriores, que va dedicado de forma íntegra a ello.
Con respecto a las visitas guiadas, existen un número infinito de tours gratuitos que a menudo salen desde el centro de plazas como Trafalgar Square. Todas ellas son a pie, y en algunas hay incluso guías de habla hispana, por lo que podremos visitar la ciudad de forma gratuita y de la mano de una persona de la que entender las explicaciones históricas.
Sobre la compra de Souvenirs, una de las mayores fuentes de gasto que tengo en todos mis viajes, os recomiendo que no caigáis en comprarlos en las zonas con más afluencia de turistas, dado que es en eses establecimientos en los que precisamente hacen su particular Agosto los comerciantes. Mi consejo es comparlos en mayor proporción (por ejemplo, 10 imanes), pero en lugares como Candem en los que os encontrareis ofertas como 10 Imanes/Llaveros a 10 libras (Una auténtica ganga teniendo en cuenta que en el centro llegan a costar 2,50 la unidad). En mi situación, yo lo que decidí hacer fue compartir con una amiga 5 y 5, con lo que cada uno pagó la mitad y nos fuimos con nuestra ganga tan contentos, además al ver que los imanes que habíamos comprado eran los mismos que vendían en el centro por el triple de precio. Además de esto, tanto sudaderas como camisetas, carcasas para Iphone o demás merchandising de regalo pueden ser encontrados por mejor precio en mercadillos como Candem o Portobello.
En cuanto a ropa, aquí han llegado para mí los dos bombazos más inesperados para mí. Siempre había oído el típico rumor de que en Inglaterra tooodas las zapatillas deportivas (tipo Nike, Adidas) o incluso las vans; eran inmensamente más baratas que en España. Mi sorpresa llega cuando, un buen día (Aunque no en Londres, sino en Southampton), decido entrar en una tienda de deportes llamada JD. A mi derecha encontré una estantería llena de pares sueltos en los que se leía SALES. Ante mis ojos, unas Nike Huarache negras, curiosamente de mi número, y que costaban 70 Libras. Es decir, unos 81 Euros frente a los 130 Euros que costaban en España. Para mi asombro, seguí buscando y encontré unas Vans Old Skool por 35 Libras (Sobre 43 Euros), y unas Reebok negras por el mismo precio. Y lo de los números, un show. Mientras que en España es hasta difícil encontrar el 41 con los precios que todos sabemos, allí los de rebaja son precisamente estos números. Obviamente, no me lo pensé ni una milésima y me vine con mis Huarache puestas en los pies.
Pero eso no era todo. A unos 200 metros ví el cartel de una tienda llamada TK Maxx, y decidí entrar a explorar. En cuanto empiezo a recorrer pasillos y veo una sucesión de marcas como Nike, Vans, Volcom, Ralph Lauren o incluso Lacoste estaba haciendo la cuenta atrás para abandonar la tienda, pero decidí aventurarme a comprobarlo y me quedé ojiplático. Una mochila Vans (A 50 Euros en España) valía la friolera de 12 Libras allí. Pues bien, como con esto, el secreto de estes grandes almacenes (que podría asemejarse a un Primark pero de primeras marcas; es que allí van a parar las cosas que ya se encuentran fuera de temporada, aunque en el caso de España, mucho de ese género pertenece a la temporada vigente en España. Por lo tanto, os recomiendo que entréis y descubráis las ofertas que os ofrecen, o incluso que os metáis en la página web, dado que también se puede comprar por la red a los mismos precios. Pero ojo, en cada tienda tienen un género diferente, esto es, que no hay una uniformidad en cuanto al stock de artículos, sino que cada tienda tiene modelos diferentes, por lo que no os cerréis a entrar a dos tiendas aunque estén a metros, porque podréis encontraros cosas totalmente distintas.
En cuanto a lo que a comida se refiere, he ido comprobando con el tiempo ciertas cosas en supermercados y en grandes superficies con catering. Entre mis hallazgos, descubrí como aquella comida que ha sido precocinada o que se encuentra en la sección de frescos (hablo de tipos de comida como ensaladas, ensaladillas o incluso empanadillas); reducen sus precios al final del día con la finalidad de que, al menos, consigan sacarles beneficio antes de tirarlo. Esto ocurre a partir de las 19.00 h, normalmente en supermercados de mediana y grande superficie, ya que los que están situados en estaciones o en las inmediaciones del metro suelen vender todo el género.
Dentro del sinfín de supermercados que os encontrareis (Sainsburys, Tesco, Asda, Morrisons o Waitrose); destacaría en primera instancia la cadena multinacional Poundland, que ya comienza a extenderse porlas grandes ciudades Españolas. En estas superficies encontrareis artículos de grandes marcas, tanto cosméticos como productos de alimentación), por la friolera de 1 libra. Sí, habéis ,leído bien, por 1, 15 Euros podréis compraros un Bocadillo o el tan necesario champú o gomina. De nuevo, dónde reside el truco? Pues en el formato. La cadena Poundland ha firmado con la mayor parte de proveedores acuerdos que les permiten reducir el tamaño de sus productos para permitir bajar así el precio y hacerlos de este modo más atractivos. Yo no me lo pensaría ni un segundo, y en el caso de que vieseis uno, entraría a comprar aunque fuese unas de esas chocolatinas que tan necesarias se hacen tras un largo día de caminata por la ciudad.
Finalmente, me gustaría aludir a los menús que en muchos de estes supermercados se ofrecen. Es, por ejemplo, el caso de Tesco. En la mayoría de sus establecimientos, las neveras principales tienen una subdivisión en tres partes: Por un lado, los Sandwiches y bocadillos (1er plato), en el siguiente apartado frutas cortadas o ensalada y en la tercera agua o refresco. Pues bien, por un precio de 3 libras, podremos hacernos con un menú básico, al que podemos incluso añadir patatas fritas o sushi (hay infinidad de combinaciones y no lo encarecen mucho) y salir del paso ante los elevados precios que la mayor parte de los restaurantes del centro. A esto se le suman los establecimientos que cuentan con panaderías en las que hay empanadillas rellenas por menos de 2 libras (y con las que he comido en múltiples ocasiones) o pretzels alemanes con queso (otras de mis debilidades) por el mismo precio.
Obviamente, el otro comodín por excelencia es el Mcdonalds, Burger King o locales de restauración de comida rápida como Subway o simplemente kebabs, aunque debo deciros que en muchos casos las colas son interminables y que, en el caso del Kebab, la comida quizás diste un poco de lo que os espereis (en España son el doble de grandes y abusan menos del picante).
Por tanto, queda claro que con una serie de pautas prácticas podemos reducir el coste de nuestro viaje sin que esto signifique que vayamos a reducir nuestras actividades ni, en definitiva, privarnos de nada. Espero que os sirvan de tanta utilidad como a mí, y sobre todo, que disfruteis de vuestro viaje!
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