Trabajos en Grupo, Como los Bolos

El segundo día de la semana, como todavía arrastraba la motivación del lunes y el "Eye Of The Tiger" me levanté pronto. Aclaremos que levantarse pronto para un Erasmus que las pocas clases que tiene las tiene sbore las doce del mediodía por pacto entre profesores y alumnos Erasmus, porque esto es así, en Polonia si tienes suerte tendrás profesores enrollados y si no tienes alguna tiparraca de Eslovenia sin amigos pues podrás pactar las clases a la hora que estiméis entre todos conveniente.

Y eso oscilará entre las once de la mañana como pronto y las doce o la una del mediodía, dependiendo de las horas de tutoría del profesor y demás. Pero vamos, que madrugar si tenéis suerte no vais a tener que madrugar. Salvo para alguno de esos estúpidos, digo super útiles, trabajos en grupo en los que se aprenden tantas cosas del resto de compañeros.

Aprendes un montón de cosas: aprendes cómo no se trabaja en grupo, aprendes cómo la gente se escaquea de sus responsabilidades, aprendes cómo escurrir el bulto para que parezca que el marrón es de otro, aprendes cómo hacer para que parezca que eres el que más ha hecho del trabajo cuando apenas has añadido dos diapositivas, y encima aprendes a tener más paciencia que un santo porque vas a tener que reeditar y prácticamente hacer tú solo la presentación. Moraleja? Con el trabajo en grupo repartiréis el trabajo, pero luego tendrás que rehacerlo entero, por lo que trabajarás doble o triple.

Como dicen en algunos sitios, "si quieres que algo se haga, pídselo a alguien; si quieres que se haga bien, hazlo tú mismo". En todos los trabajos en grupo se cumple esta máxima. Lamentable ver como ni a nivel universitario se puede trabajar en grupo con un grupo decente. Eso ocurre contadísimas veces a lo largo de una carrera de cinco años, por ejemplo. En mi caso personal creo que en cinco años de Licenciatura he hecho trabajos en grupo de los que me sienta orgulloso dos .O máximo tres. Que pueda decir que todo el grupo ha trabajado y ha salido un resultado aceptable, no pasarán de esos tres.

El resto, postureo de quedar para estar horas y horas en la cafetería discutiendo tonterías que al final no se llevan a cabo, o en el mejor de los casos quedar para acabar liándose entre café y café y terminar de cervezas jajaja. Pero en ese caso se aceptan las quedadas-fail. Lo que me revienta es las quedadas con gente que no conoces, que la única relación es académica para hacer el trabajo, y resultan ser deltodo infructuosas esos "meeting".

Y durante el Erasmus hacéos a la idea de que vais a tener unos cuantos meetings del estilo. Pero bueno allí el folklore es diferente. Allí sí que aprendes al menos cómo trabajan el resto de culturas .Por ejemplo, en mi caso en un trabajo que hicimos sobre los diferentes sistemas educativos, nos dimos cuenta de que las chicas turcas eran bastante rigurosas a la hora de buscar información, documentarse y hacer los power points, los franceses un poco más dejados, los españoles... en fin.

Después de las clases fuimos a comer a Magic, del que os he hablado en Lugares en más detalle, dentro del campus de Lumumby.

Pedí la especialidad de la casa, el rollito ese de carne que se llamaba kebab Magic o algo así parecido. Bastante aceptable. Pero el plan guay vino después, cuando decidimos coger y empezar a mandar sms a saco para hacer un plan improvisado de bolera en Manufaktura. Esa acción de enviar sms indiscriminadamente en plan cadena hasta que se formaran dos equipos se repetiría mucho a lo largo del año, la verdad. Era la leche porque todos teníamos sms infinitos gratis. Infinitos para enviar pero en el móvil polaco sólo cabían cien jeje. 

El caso es que montamos dos equipos y pa'llá que fuimos, Hacia la bolera de Manufaktura, un clásico del tiempo libre en Lodz, preguntad a quién queráis que esté haciendo o haya hecho el Erasmus allí (iba a añadir que vaya a hacer, pero está más complicada ya la cosa). 

Fuimos cinco o seis aprovechando que además era el cumpleaños de uno de ellos, así que luego se nos iría un poco de las manos. Pero en principio en la bolera de Lodz, un martes cualquiera podéis coger la pista una hora por unos sesenta y cinco zlotys, que al cambio son poco más de dieciséis euros. Como éramos cinco, pues no salía nada mal la verdad. Por una horita jugando estaba bien. Pero el truco era ir entre las cuatro y las seis de la tarde, que entonces pagas por cabeza y por partida, cinco zlotys. Chollazo, que diría Maldini.

La hora feliz (bueno más bien, las horas felices) para los bolos para cualquier estudiante Erasmus. Un euro con veinticinco céntimos jugar una partida completa de bolos en unas pistas cojonudas. Con razón jugamos tantas y tantas partidas. De hecho yo creo, y realmente lo creo, que podría entrar en un equipo de bolos ahora mismo sin demasiado problema. Claro que necesitaría calentar unos días y tal, es como todo, hay que coger el ritmo.

Os dejo foto de propina preparando mentalmente el lanzamiento tras recoger la bola del carril. Que hasta tienen, por cierto, airecillo para secar los dedos. Muy profesional todo la verdad... menos nuestros lanzamientos primerizos jajaja

El caso es que entre panies pasamos allí la tarde jiji jaja bolos arriba bolos abajo, pocos bolos al centro. Luego nos liamos porque se nos hizo tarde-noche y terminamos de Piwos (cerveceo, básicamente) en Piotrkowska. Pero sin desfasar porque el siguiente día tocaba hacer el deporte que hoy no había hecho. No había cumplido, y eso que me lo había planteado el día de antes, jaja. Pero bueno, jugando a los bolos, si la partida está ajustada, también se suda. ¿Eso cuenta, no? Al menos quemas calorías, ya sea por tensión, por levantar y lanzar la bola o por el calor del aire acondicionado. Sudar sudas. En fin, que después de un buen ejercicio "bolístico" nunca vienen mal unas piwos (nunca vienen mal en general, you know...) así que allí que fuimos, a "refrigerarnos". Y como siempre...

Seguiremos informando,

Powodzenia!

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