¿Tienes claro tu destino? Los mejores chollos en alojamientos son los primeros en volar, ¿dejarás que se te adelanten?

¡Quiero buscar casa YA!

Una bici


Comprar una bicicleta ha sido de las mejores decisiones de mi vida. Me lleva allá donde quiero y me permite disfrutar del horizonte de mi destino, sentir el terreno y el entorno de mi camino; puedo circular por las calles como si fuera un coche, pero también puedo pasar entre los coches como si fuera una moto. Puedo aparcar donde sea e ir cuesta abajo es de las mejores cosas que jamás haya habido.

Como acabé teniendo una bici

No hace tanto tiempo, una hermana de un amigo mío tenía una amiga alemana que estaba a punto de acabar su Erasmus en Lisboa. Resulta que tenía una bici de la que quería deshacerse, la compró para disfrutar de la ciudad, pero había llegado el tiempo de decirles adiós tanto a la ciudad como a los objetos que no podía llevarse de vuelta a casa. Por eso, preguntó a sus amigos a ver si alguien quería una bici de segunda mano en buen estado. Así fue como la hermana de mi amigo se enteró de la oferta, habló con su hermano y su hermano acabo hablando conmigo. De repente estaba en la plaza Martim Moniz probando la bici y negociando el precio con la vendedora. ¡La compré por 60 € con el candado incluido! Después de tanto tiempo sigo considerándola una buena compra.

a-bike-29b65d469d1fc7162dc07f51ecd68d2f.

El principio

Antes de comprar esta bici me consideraba más bien andador. Andaba allá donde me apetecía, solía caminar kilómetros y kilómetros para llegar al centro sin que me importara lo más mínimo porque me gustaba. Aun así siempre había tenido la idea de una bici flotando en mi mente. Hoy en día Lisboa está llena de bicis. Sobre todo bicis eléctricas de Gira, una compañía de alquiler de bicicletas. Antes de esto ya tenía una bici, pero era demasiado pequeña e incómoda para conducir, por lo que, cuando vi esta bici con su sillín tan suave y confortable, no dudé. Cuando empecé a andar en ella me sentí genial. No había conducido una desde hace tiempo, ¡era como volver a ser un chiquillo! Al principio me sorprendía lo divertido que podía llegar a ser andar en una bici, pero poco a poco se fue convirtiendo en mi medio principal de transporte, ¡todavía más divertido!

Andar en bici por las calles de Lisboa

Andar en bici no es para todos los públicos. Primero por el clima, algunos días pueden a llegar a ser bastante calurosos, lo que hace sudar mucho a la gente. Personalmente no sudo y no me importa hacerlo. Segundo, es una ciudad llena de subidas y bajadas. Te divertirás bajando, pero no será tan divertido cuando te toque subir una cuesta. Puede llegar a ser extenuante. A mí me gusta, es como un reto y además es un buen ejercicio. Siempre cuentas con la opción de tomar una bici eléctrica de Gira para evitar estos problemas, ya que apenas tienes que hacer esfuerzo pedaleando. Tengo un amigo que a veces le cuesta parar la bici porque prácticamente se mueve por sí sola. En serio, esas bicis alcanzan velocidades insospechadas.

Me encanta mi ciudad y nunca me canso de explorarla. Incluso si voy a los lugares a los que ya he ido cientos de veces, siempre hay algo nuevo o una atmósfera nueva de paz que puedo encontrar. Siempre busco estos remansos de tranquilidad cuando necesito un poco de descanso, ¡y gracias a la bici puedo llegar enseguida! Con la bici puedo estar en el centro de la ciudad en 20 minutos y esto prácticamente yendo cuesta abajo sin pedalear. Solo el viento y el sol en mi cara. Es algo maravilloso porque me gusta sacar fotos de la ciudad y disponer de una bici me da una movilidad increíble para ir allá donde quiero más rápido.

Recuerdo cuando tenía una durante mi Erasmus en Varsovia y también me sirvió mucho para visitar algunos lugares fuera de la ciudad e, incluso, para ver la propia ciudad. ¡La bici siempre fue muy útil!

a-bike-65278e2a4e8040be16d0dd998e923cba.

Una nueva experiencia

La mejor experiencia hasta ahora ha sido la de aprender a andar en bici sin manos. Me imbuye de un sentimiento de infinidad tal que lo hago el 70 % de las veces que ando en bici. A pesar de que lo haga siempre que se tercia la ocasión, no se lo recomiendo a aquellos que no se sientan seguros y que no tengan experiencia. ¡No quiero que nadie se haga daño!

Como he dicho, andar en bici puede llegar a ser una experiencia liberadora. No solo me ha dado la oportunidad de ir en bici a cualquier lugar y sentir el entorno que me rodea, sino que ahora también puedo hacerlo sin manos. Hacer esto mientras uno baja la Avenida da Liberdade es un sentimiento maravilloso. ¡Aire fresco, velocidad, subidas y bajadas en cada bache, adrenalina y paz al mismo tiempo!

a-bike-2d37b46bde5d083fd64ea17da05f352b.

Arreglarla

Después de haberle sacado tanto partido y de muchos baches y atajos, tuve que acabar haciéndole un arreglo. Tenía un problema con los piñones de la rueda trasera, así que fui a un lugar para que me lo solucionaran. Resulta que tenía diversas averías que ignoraba. Algunos huecos que tenían que desaparecer, los frenos tenían que cambiarse y otras más cosas. Al final me iba a costar 67 €, pero arreglar el problema de las velocidades solo costaba 17 €, así que hice que me arreglaran el problema más inmediato y el que me privaba de la diversión. ¡Cuando ya nada se interponía entre la diversión y yo, me puse muy contento!

a-bike-73ef24288e81fb2bdeaf5a2073e10eb3.

Mi consejo es que os compréis una bici y que disfrutéis de ella. ¡Si os aburrís de ella siempre podréis vendérsela a otra persona y darle el placer de andar en bici a ella también!

¡Échale un vistazo a mi lista exhaustiva sobre las cosas que puedes hacer en la capital lusitana!


Galería de fotos



Contenido disponible en otros idiomas

¡Comparte tu Experiencia Erasmus en Lisboa!

Si conoces Lisboa como nativo, viajero o como estudiante de un programa de movilidad... ¡opina sobre Lisboa! Vota las distintas características y comparte tu experiencia.

Añadir experiencia →

Comentarios (0 comentarios)



¿No tienes cuenta? Regístrate.

Espera un momento, por favor

¡Girando la manivela!