Primera Semana.

Bueno pues como os dije, actualizo a la semana de llegar. Muchas cosas han pasado desde el primer día, espero contar lo máximo posible empezando por el largo día de viaje.

Día 1: Un viaje peculiar.

Esa noche no dormí especialmente bien, más que nada porque acababa de despedirme de mis amigos a los que no volveré a ver hasta Navidades. No obstante, me levanté con muchas ganas, ya había llegado el día, el día del viaje.

Tras cargar las maletas en el coche, tuvimos que ir hasta Madrid para tomar el avión que me llevaría a Frankfurt, para posteriormente sin poder entretenerme tendría que coger un cercanías en Frankfurt para tomar el tren hasta Kassel, todo estaba calculado matemáticamente, no podía haber ningún retraso. Y aquí comenzó mi aventura Erasmus.

Facturé mi maleta y me libré de pagar los kilos sobrantes del equipaje de mano pues al no meter el bolso del portátil el peso quedó en el límite. Luego estuve haciendo espera tomándome una coca cola con mis padres en la T-4 y revisando todos y cada uno de los correos desde Alemania para que no se me olvidara nada. Llegaron las 14. 15 la hora de dejar a mis padres a un lado y pasar yo al otro lado del aeropuerto, previos controles de seguridad. Mentiría si dijera que no hice fuerzas internas para intentar no llorar. Llegué al mostrador de la compañía y había mucha gente esperando, aún no se había abierto la puerta de embarque.

Nos comunicaron que había un retraso en el vuelo de 10minutos que estaban acabando de cargar de combustible el avión (empezamos bien me comenté). Al poco tiempo vemos que cambian la hora de salida del avión de las 15. 15 a las 16. 15 una hora después alegando fallos en el sistema eléctrico del avión (ya me jodieron pensé, acabo de perder el tren). Hablé con la azafata del mostrador y me dijo que en el destino hablara con LANairlines para que intentaran ayudarme cambiándome la hora del tren. Como había una hora de margen me fui a uno de los restaurantes para comer, hice una cola de casi 20minutos y cuando llego le digo que quiero un menú y la camarera me dice que no me da de comer literalmente, que sólo estaban dando de comer a un vuelo de Iberia que se había retrasado, como mi indignación iba creciendo dentro de mí, me di la vuelta y me fui por donde vine, y al ver los televisores ¡Sorpresa! el avión destino Frankfurt está embarcando... cuando en un principio nos dijeron que hasta las 16. 15 no habría nueva información... eran las 15. 45.

El vuelo fue tranquilo, me puse a ver Dexter y se me pasó muy rápido, experimenté por primera vez las turbulencias... cómo se mueve ese cacharro pero nada del otro mundo.

Aterricé en Frankfurt y no había manera de coger el tren pues no había tiempo. Fui, tal y como me habían dicho en Barajas a reclamar a LAN airlines, conclusión, os la imagináis supongo, nada, la aerolínea no se hace cargo. (el viaje empieza de lujo me dije) Total que a través del mono rail llegamos a la terminal 1 de Frankfurt y me dirigí a coger el cercanías hasta la estación central. Primer problema serio: Enfrentamiento con una máquina expendedora de tickets que sólo está en alemán y yo sin saber cual era el nombre en esa máquina de mi estación de destino. Al final una mujer muy amable me preguntó que donde iba y pulsó los botones en la máquina, pagué y ya tenía el primer problema solucionado. Ahora me esperaba uno más gordo comprar el billete en la estación de Frankfurt o que me cambiaran el mío por otro. Llegué a la estación de Frankfurt y eso era enorme, aunque está todo muy bien señalizado por tanto no tardé mucho en encontrar el puesto de venta de tickets. Hablé con la mujer que estaba allí para que me diera un billete a Kassel, me preguntó que si quería el más caro o el más rápido, yo que estaba cansadísimo le dije el más rápido, le comenté que tenía una reserva hecha por internet y me dijo que le enseñara el billete, se lo enseñé y me dijo, de acuerdo, solo tienes que pagarme la mitad del billete.

Mi humor fue mejorando a medida que las cosas iban saliéndome más o menos bien, tenía hambre, vi un burguer-king y no me lo pensé... Hamburguesa para el cuerpo. Llegó el tren, me monté y hasta que conseguí sentarme fue un espectáculo, había muchísima gente y no cabíamos con las maletas, para colmo yo llevaba dos. Conseguí sentarme, me vi otro capítulo de Dexter, y a la hora programada ya estaba en Kassel, es una estación enorme también, mucho más que cualquiera de las que yo conozco de Extremadura, fui hacia la salida y allí estaba esperándome Gerhard, el chófer que me llevaría a casa, por fin.

Mientras iba conduciendo iba hablándome en un inglés que me costaba entenderle, pero me iba enseñando los lugares que debería aprenderme, o los lugares de más interés de Kassel. Me dio una vuelta con el coche por el campus, una antigua fábrica de antes de la segunda guerra mundial convertida ahora en universidad, muy bonita por cierto. Tras esto llegamos al apartamento, decepción, me había imaginado un apartamento mucho más moderno y mucho menos antiguo. Segunda decepción, vivo en un tercero sin ascensor. Entramos en mi apartamento y rápidamente sale mi compañero de su habitación, me dijo en un mal inglés que es de Jordania, y que habla o alemán o francés... Yo, inglés o español. Solté las cosas en mi habitación y Gerhard tuvo la delicadeza de ponerme la funda al colchón y al cojín, una funda bastante complicada de poner. Tras esto, empezamos con el papeleo, yo estaba demasiado cansado, no le ponía mucho interés, sólo quería firmar, pagarle y que se fuera para poder dormir. Arreglamos todos los papeles, y saqué las sábanas de la maleta y el pijama, puse la calefacción a tope, llamé a mis padres contándoles el viaje, colgué y a dormir que mañana será otro día.

Un saludo y hasta la próxima.

JuanLu

PD: Pensaba que me iba a ocupar mucho menos, por tanto actualizaré los demás días en otra entrada separada de esta.