Experiencia en Jerez

Usando la estructura que nos muestra la misma página de Erasmusu, dividiré mi experiencia en la ciudad de Jerez, justo en los distintos bloques que la misma ofrece:

Cómo llegar hasta allí:

Antes de involucrarme más a fondo en los distintos apartados, comentar que, Jerez de la Frontera (cuidado, porque hay otro Jerez conocida, la llamada Jerez de los Caballeros en Extremadura), es la ciudad más grande y con más habitantes de toda la provincia de Cádiz, y, por lo tanto, hablaré de Andalucía, al sur del país.

Llegar a Jerez es muy simple, teniendo buenas carreteras para ello, o bien, magnífica disposición de tren, si es éste el medio que vamos a utilizar. De hecho, comentaré un poco cada opción:

  1. - Coche o vehículo propio: en el caso de venir desde una parte norte del país, lo mejor para llegar cuanto antes a la ciudad será coger la carretera de Extremadura (siempre que hablemos de venir desde Madrid o bien desde la parte oeste de España, claro), ya que, es una autopista de reciente creación, con poco tráfico y que hará que lleguemos a una gran velocidad sin ningún tipo de problemas en cuanto a peligros o comodidad. En el caso de que vengamos de una ciudad de más al este como es el caso de venir de algún municipio de la misma Andalucía, habrá dos opciones, cada cual con sus puntos buenos y malos. La primera, correspondería a la llamada “ruta de los pueblos blancos”, tocando zonas de Málaga y Granada para llegar ya a la zona de Cádiz. Esta ruta es sin duda más rápida, si bien, a todo aquella persona que no le guste en demasía eso de las curvas, las carreteras estrechas, el tráfico, el poder encontrarte algún camión (o mejor dicho, varios a lo largo del camino), el aumento del peligro, etcétera, que se abstenga. Eso sí, la ruta te ahorra una hora, por lo que dependerá de lo apurados que estemos y si nos da igual conducir una hora más o menos. Por otro lado, la que mis propios padres siempre escogen cuando me vienen a visitar desde Jaén, es esa que coge hacia el oeste, pasa por Córdoba, más tarde Sevilla y finalmente por su autopista (con el peaje de más de siete euros correspondiente), que te hará llegar a Jerez de la Frontera. Desde Jaén, por ejemplo, se tardarán cinco horas por ésta última vía, mientras que la de los pueblos blancos de más al sur, nos hará tardar unas cuatro horas (también depende del tráfico que nos encontremos, sabiendo que cuando cogemos la vía “segura y lenta” tendremos menos con casi total seguridad a si cogemos la vía “peligrosa y rápida”). Si hablamos de gasolina, debemos decir que lo cierto es que un por ejemplo Jaén Jerez no gastará más de 30 euros de gasolina, todo esto si bien cogiendo una velocidad adecuada, sin acelerones sin sentido, sin tráfico exagerado y con un coche medio que no gaste demasiado.
  2. Blablacar o derivados: aplicación con la que podremos compartir gastos de viaje con otras personas y que hará que el dinero total que nos dejemos en el viaje sea mucho menor al previsto de haber cogido nosotros mismos el coche o quizás algún transporte público. Dependiendo de la zona desde la que vayamos saldrá más rentable o menos, yéndose de precio totalmente a medida que nos vamos alejando del país. Lo cierto es que por ejemplo desde Jaén hasta Jerez, es normal encontrarlo por unos 20 euros, lo que nos haría ahorrar un 33% de los gastos que tendríamos si cogiéramos nosotros mismos el coche (otra cosa distinta es que tú misma seas la que pone el anuncio y lleves a los pasajeros, entonces obviamente sí que te sale todo totalmente rentable).
  3. Autobús: dependiendo desde dónde vayamos podrá ser el transporte más barato con diferencia (como es el ejemplo desde Madrid, que hasta Jerez de la Frontera nos costará poco más de 20 euros), o bien incluso el más caro (como es el caso de irte desde ciudades como Jaén o Granada, costándote más que el tren y sin posibilidad de algún descuento de diverso tipo. Es por ello, que, en estos casos, lo mejor será siempre comparar antes de lanzarse a un lugar que no conocemos y no tenemos idea de cuál será la mejor solución posible. El autobús, si bien puede ser en determinado trayecto el transporte más barato de todos, también hay que decir que, pocas personas nos dirán que sea el más cómodo, siendo exactamente justo lo contrario, el que sin duda será el más incómodo (excepto casos particulares de Blablacar y derivados en los que en un coche muy estrecho se meten el máximo número de personas posibles solo porque el conductor gane más).
  4. Tren: en muchos sentidos, mi transporte favorito. No solo por el hecho de que tarde menos que el autobús de manera general (ahora os contaré que hay alguna que otra excepción al respecto, pero que a mí misma me viene hasta bien), sino porque su comodidad en comparación con otros tantos transportes denota su calidad, su confortabilidad y su eficiencia. Es porque los trenes en el país en general, y en este caso los denominados “media distancia”, son amplios, cómodos, con asientos reclinables, mesa para poder apoyar el ordenador o nuestros propios brazos, enchufes para cargar lo que queramos e incluso ya están a punto de tener Wifi a bordo, por lo que no cabe duda de que pocas cosas más nos harán falta en él. Por supuesto, tiene multitud de baños y el control de los pasajeros ahora es espléndido, eliminando esas antiguas colas o tanta gente que se colaba sin billete como había anteriormente, teniendo cada uno de los pasajeros su asiento enumerado para que no haya ningún tipo de contemplación y posible error. Poniendo un ejemplo, el tren desde Sevilla a Jerez de la Frontera tan solo tarda 50 minutos, lo que sería casi como el propio vehículo si lo cogemos, pero con el ahorro del peaje por un precio menor a los diez euros en total. Si bien venimos de mi amada Jaén, entonces tan solo habrá muchas más paradas a su camino, menos trayectos (porque de Sevilla a Jerez hay uno prácticamente cada hora), y por supuesto más tiempo. Eso sí, el problema viene cuando lo cogemos desde por ejemplo otras ciudades peor comunicadas como son Málaga o Granada. En éste último caso, habrá que hacer transbordo en la parada de Dos Hermanas, esperando un lapso de tiempo de algo menos de una hora, pero que lo más seguro es que para alguna persona se haga eterno. Si el caso es que vienes de otras ciudades más lejanas como Madrid, desde allí encontraremos tanto el AVE como el Alvia, con una comodidad aún más alta, mayor espacio entre asientos, pero con la cosa de que valdrá obviamente más. Eso sí, cogiéndolo con la suficiente antelación, podremos coger un AVE Jerez de la Frontera Madrid por unos 20 euros, lo que lleva a un ahorro importante con respecto a otros medios (menos el autobús que estaría ahí ahí la historia), y, sobre todo, nos haría llegar en unas cuatro horas, cuando el bus puede tardar casi el doble. Todo es ir mirándolo con tiempo, y acogernos al precio “mesa” o “estrella” cuando estén disponibles. Además, a veces crean promociones especiales según la temporada para hacer que la gente se mueva con mayor frecuencia. Todo es ir viendo qué se nos ofrece.
  5. Avión: Jerez de la Frontera es la única ciudad en toda la provincia de Cádiz que tiene aeropuerto en la misma, a escasos minutos de lo que es pleno centro del municipio, y con muchas posibilidades de llegar a la misma. El tren por ejemplo tiene parada en el mismo aeropuerto, además de tener los taxis que suelen aparecer en cualquier ciudad, o bien la posibilidad de los alquileres de coche. Mencionar sobre el uso del avión en Jerez, que cada vez está teniendo mayor predilección y acogida tanto por nacionales como por extranjeros, llegando a ver que un viaje hasta Bruselas puede costarte la ida menos de 50 euros, lo cual es un precio estupendo. Además, no son pocas las ofertas que podremos encontrar con compañías low-cost como Vueling o Ryanair, que nos permitirá viajar desde Barcelona hasta Jerez de la Frontera a veces por unos 20 euros, lo que llevaría al avión a ser el transporte más rápido y barato dependiendo de las circunstancias de cada momento concreto. Aquí de nuevo, una de las cosas importantes será cogerlo con la antelación necesaria y precisa para compactar precio y capacidad. En el caso de que no tengamos opción clara de llegar hasta la misma ciudad gaditana directamente, siempre podremos ver otras alternativas como la vecina Sevilla, o la algo más alejada Málaga, pero que igualmente estarán a tiro hecho de Jerez.

1º- Arquitectura y paisajes:

Ya comenzando con la estructura típica, decir en primer lugar, que la arquitectura en Jerez podría parecerse en muchos sentidos a otros tantos municipios del alrededor y en general de Andalucía. Con un centro histórico conformado principalmente por casitas bajas antiguas y bloques de pocos pisos, el muy conocido empedrado de sus calles te hará saber de manera clara y rápida que te encuentras en la parte más céntrica de la ciudad.

Además, el hecho de ver restos históricos como alguna que otra muralla a lo largo de las calles, te dará de nuevo prueba clara de lo que estoy hablando. Jerez ha sido ciudad importante en muchos sentidos de este aspecto, siendo de los municipios de la provincia más visitados, más turísticos y mejor valorados y no es por una de las cosas que muchos creen, y es el hecho de tener cerca las zonas de playa; sino porque la cultura, monumentos y arquitectura son dignos de valorar y el verdadero jerezano así lo siente y lo conoce (lo digo porque yo misma me he llevado minutos escuchando a alguna que otra persona de la parte centro de Jerez explicando todo esto que estoy comentando y de lo que me quedaba anonadada del sentimiento y razón que llevaba).

Como decía, con dos zonas bien diferenciadas, si la parte más céntrica tiene una arquitectura más tradicional, con calles ordenadas, organizadas por número de bloques similar, muy estilo todo romano en cuanto a ello; la parte más moderna tiende a un libre albedrío que se ve en las ciudades más grandes y distantes. No es para menos, pues siendo de los municipios con mayor número de kilómetros cuadrados de superficie, es lógico pensar que no se puede ir ampliando de una manera uniforme en todos los aspectos, por lo que, al final lo que se consigue es que se formen pequeñas urbes de algunos miles de habitantes que viven en sus distintos bloques y separadas mediante carretera de otras tantas similares (no hablo de una separación de carretera amplia, sino tan solo que irte andando de una parte a otra de la ciudad no te va a llevar unos 20 minutos como en Jaén, sino que a lo mejor te lleva hora y media o incluso más dependiendo de hasta dónde quieras llegar).

Con respecto a esta zona más moderna, podría igualarse a Sevilla, en el estilo de bloques medios y algunos altos, con zonas apartadas de chalés y adosados, y con mucho que recorrer.

Ya hablando de los paisajes, lo cierto es que Jerez debe suspender en este aspecto. Llevo poco aquí, pero la verdad que ahora mismo alguien me pregunta dónde poder encontrar el mejor paisaje de Jerez como ciudad (sin las partes de la comarca en la que sí que se pueden ir a alguna que otra zona de parajes naturales fascinante), y me quedo pillada como justo estoy. No hay tampoco paradores para ver la ciudad desde cierta altura (o al menos que conozca y haya preguntado), y tampoco al estilo Granada, sitios como colinas o del estilo, para poder divisar sus principales monumentos. Por todo ello, Jerez carece de ese tipo de vistas preciosas que muchas personas echamos de menos, y para ello tendremos que recorrer otras partes de la provincia, donde de sobra sí que podremos encontrarlas.

2º- Cultura y costumbres:

Sobre la cultura jerezana, no hay duda de que lo que más se conoce es la cultura del flamenco, del vino, de los caballos y de las motos. En primer lugar, sobre el flamenco, pocas personas no sabrán que la conocida “más grande de todos los tiempos” en la materia, la querida por los ciudadanos, Lola Flores, era jerezana, por lo que tampoco nos sorprenderá si vemos algún que otro monumento de la misma por la zona más céntrica del municipio.

El flamenco es algo que se siente en el ambiente, que se palpa con casi cada paseo que das y pocos minutos que te encuentras en la ciudad, y es que, no son pocos los bares y sitios que te ponen este tipo de música, que llaman a grupos en directo para que actúen y que, por tanto, terminen de potenciar la disciplina y el empuje de la misma, como arte único en el mundo. Las academias de flamenco son numerosas a lo largo de la ciudad, y muchísimas personas, vecinos de la zona saben bailar y los disfrutan en todo lo posible.

Además, ese mismo arte flamenco y arte en general se traslada de generación en generación, siendo Jerez una cuna clara de la etnia gitana, perfectamente acoplada a la ciudad, de la que la misma no sería igual sin ellos. Son personas abiertas, simpáticas, amables, con ese toque de arte y gracia que muchos otros no tienen pero que a ellos les sale de manera cien por cien natural y simple. Pero el gusto por el flamenco no viene solo por su parte, sino que es algo genérico de toda la ciudad.

Por otro lado, las creencias religiosas en Jerez son amplias, si bien, no llegando al punto de mi Jaén, pero tampoco es que se quede muy lejos en ese aspecto. De hecho, son numerosas las personas que se apuntan ya sea a poder llevar los pasos de semana santa, o bien directamente que pasan por la iglesia de su barrio a rezar, a estar tranquilos o lo que sea. El número de iglesias en Jerez es muy alto, encontrando una como decía por cada barrio, y es por ello que la cultura jerezana va muy pegada también a festividades religiosas muy celebradas en la ciudad.

Además, el vino es pieza clave de la ciudad, referente mundial con su marca “Xerez”, y ampliamente reconocida por su calidad y buen sabor. El vino típico (el básico podríamos decir), es el fino, si bien, se consume todo tipo de vinos a lo largo de sus muchísimos bares, restaurantes y sitios distintos, como pudieran ser los blancos, los tintos, los rosados, los dulces, etcétera. En general, en Jerez no es difícil que cualquier sitio tenga muy buen vino, encontrándolo de todos los colores, sabores, marcas y precios en los supermercados y distintas tiendas especializadas, siendo numerosas aquellas provenientes de la misma ciudad o bien de ciudades que se encuentran cercana a la misma como podría ser el Puerto de Santa María o Sanlúcar de Barrameda.

Por consiguiente, a nadie le sorprende también, que las bodegas en Jerez sean también numerosas, muy visitadas cada año y con un toque especial que te hace ir a muchas de ellas para descubrir sus distintas facetas y encantos (que cada una, lo cierto es que lo tiene). Alguna bodega jerezana conocida es Sandeman, Valdespino, Osborne o Domecq, si bien, otras muchas han sido cerradas o remodeladas debido a unos muy malos años para el vino en general y también el de la zona. Desde aquí le digo a aquella persona que vaya a visitar la ciudad, que sin duda no pueden irse sin haber visto alguna que otra bodega, además, en estas visitas, no solo te enseñan la misma, te explican un poco el cómo funciona todo y los distintos vinos que hay y ofrecen; sino que no te vas a ir de allí sin probar varios modelos de la misma, lo cual es el cierre redondo a la visita.

Y bueno, lo dejo aquí de momento por el límite horario de subida de artículos de la página. En un rato cuando pueda, termino la descripción completa de la ciudad. Hasta entonces!


Comentarios (0 comentarios)


¿Quieres tener tu propio blog Erasmus?

Si estás viviendo una experiencia en el extranjero, eres un viajero empedernido o quieres dar a conocer la ciudad donde vives... ¡crea tu propio blog y cuenta tus aventuras!

¡Quiero crear mi blog Erasmus! →

¿No tienes cuenta? Regístrate.

Espera un momento, por favor

¡Girando la manivela!