Úbeda y Baeza: dos ciudades andaluzas patrimonio de la humanidad (pt. 1)

Úbeda y Baeza son dos pequeñas ciudades andaluzas en la provincia de Jaén que han sido declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, gracias a su patrimonio artístico y cultural. 
Visité las dos durante un día, en abril de 2016, mientras estaba de visita en Jaén, ya que son muy pequeñas y es posible verlas en poco tiempo sin perderse los lugares más importantes.

Úbeda

La primera ciudad que visité ese día fue Úbeda, así que voy a empezar con ella. A la entrada de la ciudad, está una oficina de turismo, donde se puede coger el mapa de la ciudad y pedir información para visitarla. La oficina está situada en el interior de un edificio muy bonito que también se puede visitar en unos minutos, dando un paseo por el patio y los pasillos. 

Sin embargo, la parte más interesante empieza cuando se anda por las calles de la ciudad; todas las esquina y los rincones están cuidados hasta el último detalle. Las casas están decoradas con flores y hay muchas estatuas, monumentos y edificios de la época del Renacimiento por toda la ciudad.

Otro aspecto muy interesante es que Úbeda está inmersa en la naturaleza y desde los miradores se pueden apreciar unas vistas muy bonitas, con todos los olivos...típicos de Jaén. 

*Pequeña curiosidad*
Jaén es uno de los mayores exportadores del mundo de aceite de oliva. Sólo la provincia de Jaén, produce un tercio de la producción mundial de aceite de oliva...y eso quiere decir que no hay sitio en el mundo donde se produzca más! Casi todos los que viven allí poseen unos olivos, que han heredado de su familia. 
Obviamente, no se trata solo de cantidad. El aceite que se produce en Jaén está buenísimo. Así que, si pasáis por allí, os aconsejo que lo probéis!

La Artesanía

Úbeda es muy famosa por la producción artesanal de cerámica y alfarera. De hecho, se ha declarado Zona de Interés Artesanal de Andalucía. Por toda la ciudad hay talleres en los que se producen objetos de ese tipo y el más famoso es la Alfarería de Tito. Se trata de un taller bastante grande, lleno de arte, con objetos maravillosos hechos a mano en cerámica y alfarera. El propietario, Tito,  también enseña a los visitantes como produce sus creaciones, cuenta la historia de sus obras y de su trabajo.

Yo no sabía ni donde mirar, porque absolutamente todo el taller estaba lleno de objetos y de colores, en las paredes, en el suelo, sobre las mesas...me habría llevado todo :D

Uno de los aspectos que más me han gustado de mi experiencia Erasmus ha sido el hecho de haber viajado y visitado sitios como este, que no son muy conocidos, pero que yo considero pequeñas joyas escondidas! Siempre he tenido la curiosidad de ver más de lo que se suele encontrar, de descubrir... y es algo que aconsejo a todo el mundo :) 

Pronto escribiré sobre Baeza, la otra ciudad que, junto a Úbeda, ha sido declarada patrimonio de la humanidad. 

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