Parques en Huelva

Hace años, cuando yo era pequeñita, el parque más famoso y frecuentado por los ciudadanos y visitantes en Huelva, era el parque de las palomas.

Era un parque lleno de vida, de zonas verdes, con sus columpios, sus toboganes, sus cacharritos sobre la rena, como el tren de madera, además de las camas elásticas y el castillo hinchable con un oso blanco en medio, y cómo olvidar el trenecito.

Aunque lo mejor del parque, sin duda, eran los patos y las palomas que le dan nombre.

El parque entero se llenaba de palomas que volaban a su alrededor. Y por supuesto, estaba el puesto con el viejecito que vendía arpiste a 25 pesetas (antigua moneda española para los extranjeros). Era una bolsita pequeña, o también podías comprar una un poco mayor a 50 pesetas, hasta la más grande de todas que eran 100 pesestas o los famosos 20 duros jeje.

Yo solía ir con mis padres los domingos y echarle arpiste a las palomas y pan duro a los patitos, pero fue mi abuelo quien me enseñó a darle de comer a las palomas en la mano y a darme cuenta que no hacían daño. Hoy en día es díficil ver a niños dando de comer a las palomas, ni se ven puestos donde comprar arpiste, como no vayas a una tienda de animales y compres comida para pájaros.

Con los años el parque se convirtió en un lugar más para hacer botellón cuando llega la noche, dando paso al destrozo de los columpios y toboganes y convirtiéndose en cualquier cosa menos un parque para niños.

Con los años se construyó el Parque Moret, aunque para los que vivimos en la zona más centro de Huelva está un poco lejos. Varios autobuses pasan cerca de la puerta.

Este parque la verdad que es bastante bonito, es muy grande, con muchas zonas verdes, columpios y demás para niños, y además tiene un pequeño embarcadero con unas barquitas que se pueden alquilar y dar una vuelta, aunque no hay mucho espacio para pasear con ellas la verdad.

A pesar de todo lo bonito del parque, nunca ha tenido el encanto que tenía en su día el parque de las palomas a revosar de niños.

También encontramos el parque de Zafra, el que está a la entrada del centro comercial Aqualon y junto a la estación de autobuses de Zafra.

Es un parque grande con un camino central. Es un buen sitio para tumbarse en el cesped en los días de primavera o mientras esperamos que salga nuestro bús si tenemos tiempo.

También tiene instalaciones para niños, claro, pero al igual que el anterior, tampoco éste está nunca muy ambientado.

Por otro lado tenemos otro tipo de parque, el Parque Nacional de Doñana, aunque éste no lo encontramos en la capital, donde podemos encontrar las maravillosas marismas con su gran número de especies de aves.

Es un lugar muy frecuentado por amantes de la naturaleza, ambientólogos, biólogos, y además es muy común organizar excursiones escolares, donde los niños se divierten y aprenden sobre diferentes especies.

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