Viaje a Frankfurt 2ª Parte

Antes de empezar con Heidelberg, se me olvidaban algunos sitios que se pueden ver, sobretodo si dispones de más tiempo cómo la Goethe Haus, dónde vivía el escritor más famoso de Alemania (esta casa se destruyó en la Segunda Guerra Mundial, pero la volvieron a crear igual que la anterior), y también, la zona de los museos (Ribera de los Museos) que se situa muy próxima al río y destaca, por ejemplo, el museo del Cine Alemán.

Por todo lo dicho anteriormente, podemos comprobar que Frankfurt es una ciudad para visitar en cualquier momento y por cualquier persona, pero sobre todo si lo que te gusta es la arquitectura, ya que hay muchísimos edificios distintos y originales de los que puedes aprender mucho.

Ahora ya sí, vamos a empezar a hablar de Heildelberg, el pueblo al que le dedicamos el 3r día de viaje.

Heidelberg

Esta es considerada una de las ciudades más románticas de allí y, además, es importante en el mundo turístico por su centro histórico y por tener la universidad más antigua del mundo. Tiene 150.000 habitantes.

Es verdad que se nota que es una ciudad universitaria, porque hay mucha gente joven y mucho ambiente por las calles.

En cuanto a turismo, lo mejor es pasear por sus calles y contemplar sus maravillosos edificios. La calle más conocida es la calle peatonal Haupstrasse que te llevará hasta la Plaza del Mercado, considerado el centro de la ciudad antigua.

Si después tienes tiempo y te apetece andar, podrás subir por el paseo de los Filósofos hasta llegar a los diversos miradores que hay. Se ve preciosa la ciudad y si puedes pasar una noche ahí, disfrutaras viéndola iluminada.

Si no puedes no te preocupes que disfrutarás igual.

Por último, lo más importante es el Castillo de Heidelberg.Aquí, puedes subir tanto en funicular cómo andando. Es muy bonito y muy grande y tiene cosas interesantes como una mazmorra, además de vistas geniales.

Para medio día, esto está bastante bien, aunque sino hay alguna cosa más como la Cárcel para Estudiantes, así que no dudes en investigar por la ciudad.

Para ir hasta allí, lo mejor es en autobús. La mejor compañía es Flixbus, porque no es cara y tiene muchas salidas y destinos distintos. Eso sí, a veces va con algo de retraso, pero podrás verlo en internet y te avisarán por mensaje de todo.

Para comer, os recomiendo sin duda el sitio al que fui yo. Se llama “Vetter’s Alt Heidelberger Brauhaus”y además de hacer su propia cerveza, podrás disfrutar muchísimo de toda la comida. Si quieres algún plato que sea más típico, sólo tendrás que preguntarle al camarero.

Disfruta mucho de este viajey no dudes en probar las cervezas artesanales y si tienes tiempo, en visitar más algún pueblo de los alrededores porque hay muchos similares y bonitos.

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