Experiencia en Granada - Comienzos

Usando la estructura que nos muestra la misma página de Erasmusu, dividiré mi experiencia en la ciudad de Granada justo en los distintos bloques que la misma ofrece:

Antes que nada, deciros que, para llegar a Granada, nadie puede pensarse que va a ser algo sencillo sin más porque no lo es. En mi humilde opinión, la ciudad de Granada es tras Almería, la peor comunicada con respecto a las capitales de provincia andaluzas y ahora entenderéis el porqué. En primer lugar, porque si la primera opción que debemos tener en mente antes que nada siempre tendría que ser el avión; el aeropuerto de Granada (que bueno, al menos tiene aeropuerto), se encuentra en el municipio de Chauchina, en lo que sería una media hora en coche desde la capital de la provincia, y que tiene un transporte público realmente malo y poco frecuente para lo que debería ser una ciudad importante como Granada.

Porque Granada, tiene 250.000 habitantes, siendo de las ciudades más pobladas de toda la Comunidad Autónoma de Andalucía, y lleva teniendo una importancia capital desde hace siglos llegando a ser incluso la capital del reino árabe y la última ciudad de la reconquista de 1492.

Pero bueno, ese no es el caso, sino que, siendo un aeropuerto no situado en la misma ciudad de Granada y además teniendo una afluencia de público diaria muy baja con respecto a otros aeropuertos cercanos como el de Málaga o Sevilla; es lógico pensar que compañías realmente rentables como puedan ser Vueling o Ryanair no nos den la posibilidad de llegar hasta la ciudad de manera directa, teniendo que coger otros tantos vuelos a las ya mencionadas Málaga y Sevilla, que al menos, sí que trabajan con este tipo de compañías “low-cost”.

Así, en el caso de que por ejemplo lleguemos hasta Málaga, deciros que desde allí mismo hasta la ciudad de Granada habrá algo más de hora y media en el mejor de los caminos pasando por Antequera, todo esto en coche y con un tráfico medio, cosa que por la zona de pueblecitos y carreteras más bien feúchas que pasaremos; no es nada simple conseguirlo. Además, tendremos que sumarle el precio ya sea de la gasolina, del blablacar o del autobús o tren que cojamos, por lo que no saldrá demasiado barato viajar hasta allí, siendo lo más recomendable Sevilla por sus menores precios en transporte.

En el caso de que lleguemos hasta Sevilla, pese a que vamos a tardar dos horas y media en llegar a Granada, lo cierto es que las carreteras son mucho mejores, no habrá esos típicos sobresaltos de ver camiones por entre las carreteras que pasemos y tampoco un tráfico lento que pudiera hacernos llegar más tarde de lo esperado; por lo que esta vez sí, esas dos horas y media serán mucho más acorde que las anteriores hora y media y sí que sabremos con precisión que eso será lo que tardemos. En el caso de otros transportes, recomiendo el tren, porque tarda algo menos que el autobús y porque encima es más barato.

Porque, si aún seguimos pensando en el avión, viajar a Madrid que seguro será lo más barato que podamos llegar a encontrar desde otras zonas europeas; hará además tener una muy buena compañía como es Socibus que hará viajar hasta Granada por poco más de veinte euros, un precio incluso menor de lo que nos sale coger bus o tren desde Sevilla o Málaga, si bien por supuesto, con una tardanza mucho mayor al estar más alejada de la misma.

Eso sí, deciros que Granada tiene estación de tren, pero que la misma tiene un problema desde hace ya demasiado meses que siguen sin arreglar. Y es que, cuando venimos del oeste de Andalucía (por lo que, lo dicho aquí no valdrá para cuando vengamos de otros sitios como Jaén que está al norte o Almería al este), nos tendremos que bajar antes de llegar a la misma en un pequeño pueblo que hay a algo menos de una hora de la capital, teniendo que coger posteriormente el autobús para llegar a nuestro destino, lo cual no tiene mucho sentido habiendo elegido el tren por encima del mismo, para que finalmente nos terminen obligando a escoger este medio de transporte.

Es por ello, que si bien de manera general suelo recomendar coger el tren debido a su comodidad, a sus amplios asientos, a su espacio y a su organización que siempre nos permitirá un asiento adecuado, además de por la frecuencia y las menores probabilidades de quedarnos sin plaza; ahora es cuando hay un cambio de efecto y os recomiendo el autobús para vuestros viajes desde el oeste de Andalucía (digo entre el tren o el autobús, porque luego diré otra opción que es aún más recomendable que las ya dos mencionadas), si bien deciros que será más caro que muchos otros transportes y que igualmente, tardará más que ningún otro y será el menos cómodo (y otros impedimentos que podemos imaginar fácilmente).

Por todo lo anterior, la mejor manera de llegar a Granada sinceramente es el Blablacar (u otras compañías que hacen exactamente lo mismo como Amovens), con la que compartiremos viaje y gastos con otras personas, haciendo del viaje no solo algo más ameno que ir solos en un tren o autobús; sino también algo mucho más rápido y rentable. Además, como podemos ver el coche con antelación a reservarlo, además del número de personas pertinentes que van a coger el viaje al igual que nosotros mismos; podremos hacernos una buena idea de cómo va a ser nuestro viaje en el mismo (lo digo por la estrechez o comodidad, o también si es temporada de mucho calor o frío saber si tiene aire acondicionado nunca estará de más). Si le sumamos que podemos ver los comentarios de otras personas sobre el conductor en cuestión, sus valoraciones y recomendaciones, pues al final llegaremos a la conclusión de que es el transporte que mayor transparencia nos da con mucha diferencia, siendo a su vez el más barato y rápido como dije gracias al poco tránsito que hay entre capitales de provincia de Andalucía hasta Granada.

En el caso de que vengamos de Huelva, Córdoba o Sevilla, la vía será sencilla ya que iremos recorriendo cada una de estas provincias hasta que al fin lleguemos a Granada, con enormes autopistas y autovías que nos permitirán un trayecto cómodo, lejos de tráfico y de esos camiones que siempre terminaremos odiando porque nos hacen ralentizarlo todo. Lejos de esa realidad, tendremos varios carriles en el mismo sentido a nuestra disposición y ello nos permitirá llegar en hora y media desde Córdoba, y una hora más por cada provincia distinta que recorramos (digo Sevilla, Huelva o Cádiz).

Eso sí, si venimos desde la provincia de Cádiz, ya sea cualquiera de sus ciudades de la costa o de la más grande, Jerez de la Frontera; tendremos dos vías diferentes que nos harán dudar de cuál es la mejor para nuestro trayecto más apropiado. En primer lugar, tenemos la opción anterior si subimos primeramente a Sevilla, cosa que nos hará sumar una hora de trayecto al pertinente, terminando de llegar en casi cuatro horas hasta Granada. Eso sí, hay un punto especialmente negativo, ya que no solo el tiempo es mayor que el de otra ruta que contaré posteriormente, sino también por el hecho de que hay un peaje (aunque dicen de quitarlo ya dentro de muy poco), que coge la autovía que une ambas provincias Cádiz y Sevilla, que hará gastarnos algo más de seis euros para encima tardar más tiempo.

Por ello, si no nos importa el hecho de que solo haya un carril en cada sentido, y, por tanto, la seguridad disminuye con respecto a la anterior opción; siempre podremos coger por varios pueblos de Cádiz y Málaga que nos hagan la vía más directa pero más peligrosa. Porque, además, será normal encontrarse algún que otro camión durante el trayecto que pueda llegar a hacernos más lento todo el viaje, si bien desde la ciudad por ejemplo de Cádiz, el trayecto hasta Granada con esta nueva vía será de unas tres horas y veinte minutos, ahorrando más de una hora de trayecto con la anterior elección (ya que desde Cádiz hay que sumar media hora cogiendo la vía hacia Sevilla que la ya nombrada desde Jerez de la Frontera).

Ya que cada persona valore qué es lo más importante, si o bien la seguridad, o bien la economía y los minutos que se tarda en cada trayecto; porque, a decir verdad, lo cierto es que el segundo trayecto tiene una serie de curvas que es mejor no encontrarse por la noche, y claro, si encima vas en Blablacar con gente que no conoces, hablando con los pasajeros como suelen ir los conductores, etcétera; pues no será del todo raro que algo malo del estilo que podamos imaginar pueda llegar a ocurrir.

Un trayecto de estas características rondará en el transporte mencionado los quince o veinte euros, siendo más barato que el tren o el autobús excepto que tengamos una serie de descuentos especiales que lo aminoren todo mucho más.

1º- Arquitectura y paisajes:

Ya sobre este primer punto de los que estructura la página de Erasmusu, deciros que Granada es una de mis ciudades favoritas de Andalucía sobre este apartado. No es para menos, porque tiene mucho de otras culturas, siendo similar en muchos aspectos a lo mencionado sobre la ciudad de Córdoba en la que se unían la cultura cristiana, la árabe y también en parte la judía, para darnos esa mezcla explosiva entre lo tradicional y lo moderno que tan buenas sensaciones deja al respirarse una tranquilidad sin igual en sus edificios.

Lo primero es que Granada evita esos típicos edificios altos de grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia; siendo la mayoría de los mismos de pocas plantas de altura e incluso de una única planta, lo que da de nuevo esa sensación de vivir en algo mucho más tranquilo de lo que luego nos puede dar verdadera pinta cuando salgamos en otro tipo de ambientes.

De hecho, si nos vamos a cualquiera de los numerosos miradores que tiene la ciudad de Granada, podremos ver ese choque arquitectónico de muy distintas zonas de la capital que represente a la perfección de lo que estoy hablando. Por un lado, encontraremos en pleno centro de la ciudad, estructuras muy antiguas, grandes monumentos y numerosas iglesias, que sin duda nos hacen movernos a varios siglos de antigüedad; si bien, cuando empezamos a irnos por la parte más moderna de la misma, en concreto más allá de la Discoteca Mae West por ese lado de la ciudad y más allá de Camino de Ronda por el otro, veremos unas estructuras muy modernas entre las que destaco la del Parque de las Ciencias de Granada. El mismo, tiene todo lo moderno de grandes edificios de otras ciudades, junto con lo más moderno de la ciencia, para sorprendernos tanto por dentro como por fuera desde el primer vistazo.

Otro de los edificios que son realmente modernos de la ciudad es la nueva facultad de medicina de la ciudad. Trasladada desde la parte más alta del Barrio de la Cruz, hasta la actual Avenida de la Investigación, alejada de todo el centro de la misma y teniendo que ir hasta ella por algún transporte público debido a la distancia considerable que nos ofrecerá desde muchos puntos diversos de la ciudad.

Por otro lado, no profundizaré demasiado en grandes monumentos y sitios de la ciudad, ya que será tema a tratar más adelante en otros apartados, si bien, decir de momento, que, la arquitectura de Granada no nos chocará con respecto a grandes novedades con respecto a otras ciudades; si bien, lo importante a destacar de la misma es esa mezcla tan curiosa que sobre todo ocurre en Andalucía, además de ver algunos edificios muy modernos como los que se encuentran en la Gran Vía de Colón, con otros tantos casi destrozados más allá de la misma a pocos pasos del mismo lugar.

En cuanto a los paisajes, Granada tiene una buena nota en este aspecto, ya que tiene amplios miradores que nos harán poder ver la ciudad casi con total visión milimétrica, entre los que destaco sobre los demás los llamados “San Miguel Alto” y el de “San Nicolás”, sin olvidarme de otros también muy conocidos como el de “San Cristóbal” o bien el de “Almanzora”. Todos ellos dan muestra de lo mejor de Granada, siendo sobre todo el principal monumento, la Alhambra el que mejor se ve desde los mismos, pero teniendo por ejemplo el de Almazora una visión perfecta de la catedral que siempre gustará a otras muchas personas.

El más alto de todos para ver el paisaje completo de la ciudad es el ya nombrado San Miguel Alto, mirador al cual llegaremos tras andar un rato bastante prolongado, algo más de media hora por el mejor de los caminos, hasta llegar a la cima del mismo que sin duda merecerá muchísimo la pena. Para llegar hasta allí, lo mejor será coger camino del río Darro, hasta llegar al final de esa calle muy larga, y entonces al mirar hacia la izquierda veremos una carretera que comienza a subir y subir. Pues justo será esa la carretera que cojamos hacia arriba hasta que ya no podamos seguir por ella y tengamos que doblar. En ese caso escogeremos ahora la carretera que se sitúa a la derecha de la misma, para luego volver a doblar hacia la izquierda y ya comprobaremos que vemos más arriba una serie de escaleras que nos llevarán hasta lo más alto de este fantástico mirador.

Lo mejor del mismo no es solo el hecho de tener esas vistas perfectas de toda la ciudad, cosa que durante la noche se disfruta aún más si cabe; sino que, con un ambiente excepcional debido a las numerosas personas que se mueven hasta allí cada vez que pueden a respirar un aire que se nota limpio y alejado de lo que solemos respirar acostumbrados a zonas más llenas de coches y demás tóxicos; siempre terminaremos conociendo a nuevas personas, amistades que surgen y que en Granada es muy fácil de realizar debido a lo que comentaré sobre las personas de la ciudad en el apartado correspondiente más adelante. Además, por si fuera poco, si seguimos dando unos pasos más allá de la ermita principal del Mirador de San Miguel Alto, veremos que la montaña, la sierra, y en general lo verde, empieza a frecuentarse de manera fastuosa hasta límites que no nos esperaríamos. Por allí veremos fauna y flora excelente y también otras vistas distintas a donde se queda la mayoría de la gente, que permitirá disfrutar de la ciudad desde otra perspectiva. Podremos ir por muchos de estos lugares, seguir subiendo, escalando picos de pequeñas “mini-montañas” y seguir andando hasta que nos cansemos, porque todo lo que hay alrededor merece y mucho la pena.

Por otro lado, para los que no quieran andar demasiado, siempre estará la opción del más famoso de los miradores debido a su cercanía y a las perfectas vistas de la Alhambra justo en frente del mismo. En este caso es el mirador de San Nicolás, y llegaremos de manera mucho más sencilla que el anterior, tan solo yéndonos a la Calle Elvira, y de ahí pasando por la famosa calle de los vendedores árabes que nos llevará tras otras calles sinuosas y estrechas al punto de destino tan solo preguntando a las amables personas que nos vayamos encontrando y que seguramente gran parte de ellas incluso vayan a ir al mismo lugar que nosotros pretendemos (de hecho es que, pese al haber estado varias veces allí, tampoco podría deciros de memoria el cómo llegar de la manera más corta posible por eso de lo que os hablo, hay numerosas calles pequeñas y estrechas que acaban llevándote a perderte de una manera demasiado simple).

De nuevo el ambiente en este mirador será excepcional, con decenas de personas (si bien decir, que debido a su mayor cercanía y accesibilidad para personas también mayores que no puedan estar media hora subiendo y otra media hora bajando, es lógico pensar que siempre encontraremos mayor número de personas en este mirador de San Nicolás que con respecto al ya mencionado de San Miguel Alto), que si bien la mayoría simplemente estarán viendo las vistas espectaculares que deja, fotografiándolas, etcétera; otros tantos, los más jóvenes aprovecharán las mismas para ponerse a hacer botellón allí mismo, si bien, no es nada recomendable debido a la frecuencia con la que pasan los policías por allí al ser un sitio de los más transitados de toda la ciudad.

De nuevo, recomendaré la visión nocturna de este mirador, ya que la Alhambra con esas luces perfectas la hacen aún más bella de lo que ya de por sí es por sí misma, cosa que redunda en mayor disfrute del paisaje y las vistas pertinentes.

Por otro lado, el último de los sitios que la gente seguramente conocerá o al menos habrá escuchado hablar, es desde la discoteca del Camborio, especialmente visitada por Erasmus de todos los países posibles, y que, con unas vistas impresionantes desde sus cristaleras hasta el monumento granadino, no hay duda de que vale la pena irse allí arriba pese a que podamos estar verdaderamente lejos de nuestros hogares. No habrá problema porque los taxis funcionan muy bien en la ciudad de Granada y el precio es muy atractivo si somos unos cuantos los que nos vamos a montar en el mismo, por lo que ya sea que no nos apetece andar demasiado o bien queremos que no se nos pase ese “puntillo” tras haber bebido; en unos pocos minutos desde cualquier parte de la ciudad llegaremos a Camborio.

Por último, ya sea desde Almanzora o desde otras iglesias de por al lado u hoteles; las vistas de la Catedral y de todo el centro de la ciudad serán muy especiales, viendo otra parte a la que nos hemos acostumbrado con los anteriores miradores; y disfrutando por consiguiente de otro punto de vista que merece ser también valorado.

2º- Cultura y costumbres:

Antes que nada, sobre este tema primeramente hablaré de lo que es la gente de Granada y también de sus visitantes. Porque hay que diferenciar de buena manera los autóctonos de los extranjeros y otras personas provenientes de otras ciudades limítrofes o más lejanas de España; es obligado contar que con algo más de 250.000 habitantes, parece que la ciudad es poblada como por el doble de la población que dice, primero porque hay pocas personas que lleven toda la vida en Granada siendo de Granada, y segundo, porque son numerosas las mismas que vienen de fuera para quedarse o tan solo están estudiando por una temporada.

Así, hablando de la gente de Granada, seguramente os hayan dicho cosas no muy agradables de la gente de allí, con esa típica y conocida “mala follá” que a priori se gastan, y que no es otra cosa que “mala leche” o mal temperamento, por la que supuestamente te suelen contestar de manera no amable y no ayudarán tanto como otras gentes sobre todo de más al sur como de Málaga o Cádiz. Pues bien, mi experiencia me dice (y me he llevado como estudiante alguna temporada), que eso de los granadinos no es del todo cierto. Sí que a primera apariencia, puedan parecer más tímidas las personas de allí que las de otros municipios sobre todo costeros de Andalucía (es que de hecho, si lo comparamos con la típica persona de Cádiz, es normal que los granadinos terminen perdiendo en muchas de las variables analizadas a continuación; pero ya sabemos que gaditanos solo son ellos), con ese sentimiento un poco reacio a lo que viene de fuera que suele pasar en gran parte de otros sitios, pero es más por el hecho de que al final van quedando menos y menos personas autóctonas de allí, que es lógico pensar en ese sentimiento como de “conquista” de fuera.

Por otro lado, una vez que conocemos de mejor manera a estas personas de la ciudad, llegaremos a la conclusión de que tan solo es un primer momento, cosa que puede pasar y no tiene por qué ser evaluado nadie de arisco o mal temperamento. De hecho, la gente de Granada ciudad, suele ser amable, te explicarán de la mejor manera posible el cómo poder llegar hasta el lugar que le preguntemos y siempre con esa media sonrisa que les es característica; es decir, será raro ver reírse a tumba abierta a un granadino a las primeras de cambio, pero siempre tendrán esa sonrisilla que te transmitirá buenas vibraciones porque sabes de sus limitaciones en cuanto a apertura emocional con respecto a otros municipios (de hecho, sí que es cierto que en cuanto al humor, incluso en Jaén he visto mucho mejor humor que en Granada, y eso que ya se nos tachan a nosotros de agoreros).

Por otro lado, es importante mencionar que Granada es la ciudad con mayor número de Erasmus de toda Europa, lo que nos llega a darnos cuenta a primera vista, de que encontrar a gente de la misma ciudad de Granada no es tan fácil como pueda llegar a parecer. No será raro escuchar otros idiomas como el inglés, el francés o el italiano a medida que andamos por las calles de la capital, cosa que enriquece a mi modo de ver la ciudad y le da un toque más cosmopolita, que, unido a esa mezcla de arquitecturas y monumentos; hace que pueda ser la ciudad idónea para muchos estilos diferentes de personas.

Estas personas Erasmus, como son en ellas habitual, serán mucho más abiertas que una persona autóctona de Granada, y de ahí también muchos de los comentarios. Porque claro, si comparas a la persona más abierta posible como suele ser una que se ha hecho miles de kilómetros para llegar hasta allí y con la certeza de que va a ser uno de los mejores años de su vida (si no el mejor); con otra que lleva toda la vida allí, acostumbrada a que vengan ellos mismos y no puedan continuar sus ritmos de vida frenéticos; pues es normal entonces llegar a las conclusiones de que la gente tiene mal temperamento y demás, pero también habría que ver esas tantas ciudades que critican el comportamiento de la gente de Granada, si fueran ellas mismas el centro neurálgico de los Erasmus.

Por todo ello, el sentimiento y respiración Erasmus se nota desde el primer paso que damos, por cada calle que andemos y por supuesto por cada bar, pub o discoteca que visitemos, lo cual hace de Granada la ciudad perfecta en Andalucía para abrir la mente, mejorar idiomas, conocer gente encantadora nueva y también salir de fiesta y pasarlo bien.

Además, habiendo sido Granada la capital del reino musulmán español, es lógico pensar, que también haya mucha cultura árabe que inunde gran parte de los barrios y calles de la ciudad, siendo integradas de manera perfecta con toda la cultura de la ciudad y no habiendo ningún problema con respecto a ello. Las mezquitas son numerosas y también sus típicos puestos de venta de distintos objetos, bares en los que se ofrece cachimbas y dulces además de tés típicos de sus regiones; y también los famosos sitios para comer Kebabs, que en Granada se cuentan por varias decenas de ellos, que además están muy bien considerados en comparación con otros tantos que podamos llegar a probar en otros municipios distintos.

Por otro lado, el toque judío no debe olvidarse de la cultura granadina, teniendo un barrio importante en la ciudad como es el llamado "Realejo" que ha sido reconocido en varias ocasiones como especial para el mundo hebreo. Allí mismo habrá una casa-museo sobre los mismos, que antiguamente fueron expulsados de la ciudad por los Reyes Católicos primero y más tarde algunos siglos después; quedando tristemente un pequeño reducto de los mismos en la actual Granada, no siendo tan reconocidos ni tan frecuentes como otras culturas como la árabe o la gitana en lo que es la ciudad a día de hoy.

Porque no cabe duda de que Granada también tiene sangre gitana por sus fronteras, no llegando a ser tan frecuente como lo que podamos llegar a obtener en otras ciudades como Jerez de la Frontera, pero igual con un peso importante que completa una diversidad en cuanto a las personas que residen habitualmente por allí digna de mención y espectacular en cuanto a su distinción. Ellos dejarán hueco en determinados barrios sobre todo del Albayzín, sitio también muy famoso en la ciudad, estando cerca de los principales miradores de la misma y con un encanto que pocas partes de la ciudad tienen. Podremos perdernos por el barrio del Albayzín durante todo el día, muchos días y no nos cansaremos del mismo, transmitiendo un buen rollo impecable, unas vistas majestuosas y grandes plazas preciosas con mucha actividad de juegos y actividades varias por las que más de una persona se intentará ganar la vida para obtener algún que otro eurito apropiado a su esfuerzo.

Por último sobre las personas de Granada antes de pasar a sus costumbres, decir que su cultura ha estado siempre muy marcada a la religióndesde hace muchos siglos, y ello mismo se nota muy fácilmente desde que llegamos a la ciudad y damos un pequeño paseo por la misma. Habrá todo tipo de iglesias, conventos, mezquitas, etcétera de muy diversos tamaños, arquitecturas y diseños que denotarán el poder de la religión incluso a día de hoy en la ciudad como cultura de la misma, que también se verá de manera simple con dos festividades claves sobre ella, la Semana Santa por un lado, que comienza justo en esta semana; y las Cruces, que, como pasa en Jaén y en Córdoba, ha sido también afincada en Granada, teniendo mucha afluencia de personas de la ciudad y de las afueras que vienen a Granada a disfrutar de una de las mejores fechas para obtener un ambiente estupendo.

De hecho, la Semana Santa, que no tiene nada de especial con respecto a otra de otros municipios importantes de Andalucía, tiene una cabida espectacular en Granada, y tiene que ser por el hecho de que la gente de allí es muy religiosa, porque lo cierto es que habiendo visto muchas de estas, ni sus pasos, ni el tamaño de los mismos, ni la calidad de ellos y mucho menos las bandas de música que tocan durante la semana, son especialmente renombrables en comparación con otras Semanas Santas mejores como en Jaén, en Córdoba o por supuesto la de Sevilla.

Sí que las Cruces tienen un peso especial, teniendo cada año más salida en cuanto a personas que se acercan, llenando con mucha afluencia de público las distintas plazas donde podremos encontrar las distintas cruces, y sobre todo con una serie de espectáculos que se curran cada vez más para atraer a más y más gente (cosa que se ve que se consigue). Porque el ayuntamiento se pone hasta reventar (diglo la plaza del ayuntamiento, cerca de Gran Vía), y con ello, estando en pleno centro de la ciudad, no hay duda de que también todos los bares de alrededor, las tiendas pertinentes que recorren las calles anejas y las discotecas y pubs finalmente cuando va entrando el anochecer. Entre las Cruces de Córdoba, las de Jaén y las de Granada, me quedaría con respecto a la comida y bebida con las de Jaén; con respecto a la belleza de lo que podemos llegar a ver en ellas y las distintas plazas con la de Córdoba, y con respecto a la fiesta, ambiente universitario y mejores actividades y ambiente final, sin duda con la de Granada, y es que son miles las personas que vienen para despedidas de soltera o celebraciones variadas justo en estas fechas, cosa que redunda en un mejor resultado no solo para estas fiestas sino para la ciudad en general, haciendo que la misma gente que está normalmente allí se quede en Granada y no termine yéndose a Jaén que está a tan solo a una hora de distancia, o bien a Córdoba a poco más de hora y media.

Y bueno, lo voy dejando por ahora justo aquí, por el límite de puntuación diario del concurso pertinente. Continuaré en cuanto pueda a terminar el artículo....