llegada a Londres

A pesar de que ya había estada de erasmus una vez, irse de casa por tanto tiempo siempre es difícil.

Desde que el día que supe que me podía ir hasta que me fui pasaron apenas 20 días, llenos de nervios y prisas por comprar el billete, preparar lo papeles, buscar la casa...

Todo eso pasó y llegó el día de irme. El día antes de coger el vuelo me fui a Madrid a casa de un amigo, para poder ir el día siguiente al aeropuerto.

Ese día me levanté como a las 7 de la mañana porque vivía un poco lejos de Madrid. Me acompañó a la parada del bus porque no podía llevarme al aeropuerto y ahí nos despedimos.

Tuvieron que ayudarme dos señores a subir las maletas al bus porque yo no podía sola con ellas, no hace falta decir que tb me ayudaron a bajarlas.

Después en el metro fue otra odisea para cargar con mis trastos, pero bueno entre los ascensores y que no había mucha gente todo fue bien.

Cuando llegué al aeropuerto todavía tenía bastante tiempo, asique me dediqué a leer... cuando por fin facturé la maleta y pasé el control ya dediqué el tiempo restante a tomar un café.

El vuelo fue muy bueno, sin ninguna turbulencia ni problema.

Una vez que llegué a Londres y recogí la maleta tocaba buscar como llegar a la ciudad. Un policía me recomendó coger el tren hasta London Bridge y desde allí el metro hasta mi casa.

Cuando por fin llegué a mi parada del metro, como dos horas mas tarde de lo que yo había calculado.... llamé a mi compañerra, porque habíamos quedado que me recogería allí. Desde la parada a mi casa hay como 15 minutos, y eso fue lo mas duro, cargar con la maleta ese trayecto después del cansancio acumulado y sin poder hablar mucho con la chica porque no la entendía casi nada.

Ya es solo una anectoda, pero no recordaba cansarme tanto desde hacía mucho, al fía siguiente me dolía todo el cuerpo y hasta me salío una herida en una mano de tirar de la maleta!