Palacio imperial de Compiègne

Cuando llegas a Compiègne, ciudad de 100 000 habitantes, no esperas encontrarte con tesoros arquitectónicos tan preciados.

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El palacio imperial de Compiègne tiene sus orígenes en la Edad Media y ha alojado a algunos de los personajes más importantes de la historia de Francia: Clovis, muchos reyes, Carlos el calvo, Luis XI e, incluso, a Luis XIV. Cada soberano aportó su toque personal al edificio. Pero, fue, especialmente, Napoleón I quien devolvió su esplendor al edificio, que dedicó a la emperatriz Eugenia.

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Actualmente, es ante todo un museo dedicado al Segundo Imperio y a la emperatriz que trajo tantas riquezas. Si os interesan este tipo de museos, os recomiendo enormemente que lo visitéis.

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Pero, otro motivo por el que este palacio es tan interesante es que se puede ir de picnic en los jardines que dan al parque Buttes-Chaumont. Puedes pasear, hacer deporte o limitarte a disfrutar de la belleza del paisaje. Es el sitio perfecto para estudiar o leer en el césped mientras tomas el sol.

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