Brujas: la Venecia del norte

Mi destino con Brujas

La primera vez que oí hablar de Brujas fue a través de "In Bruges", una serie violenta de drama que vi durante mucho tiempo y que no recuerdo de qué iba. La segunda vez que vi Brujas fue gracias a mi programa de televisión favorito "Amazing Grace", ya que los equipos hicieron una carrera allí. Esta vez tengo una visión más clara de Brujas. Vi la ciudad con colores viejos y pacíficos. Vi pequeños canales por todo el lugar y vi los puestos de gofres, uno de los famosos platos belgas. Y no mucho después, en medio de un bonito día soleado, me detuve en medio de Brujas, viendo la ciudad por tercera vez, esta vez muy real.

Un poco sobre Bélgica

Antes de hablar de Brujas, hablemos de Bélgica. Bélgica está en el norte al lado de Francia. La capital de Bélgica es Bruselas, una bonita ciudad que reservaré para la próxima vez. Para mí, Bélgica es un país extraño donde la gente no tiene la misma voz tanto literal como metafóricamente. Algunos belgas hablan francés, otros hablan flamenco (neerlandés) y otros hablan alemán. Bélgica tiene tres gobiernos diferentes, un gobierno francófono, un gobierno flamenco y un gobierno general. La lengua flamenca de la comunidad belga hace tiempo que ha dejado de estar en un estado independiente. En general, la situación es bastante caótica en un país pequeño.

En lo que se refiere a viajar, en mi opinión personal, Bélgica parece estar en desventaja al tener dos vecinos conocidos, los franceses y los holandeses. Cuando se habla de viajes en Europa, todo el mundo piensa en Francia, Italia y España que son destinos de ensueño y poca gente escoge Bélgica. Elegí ir a Brujas en parte por esta ubicación, porque es muy fácil, y no por el nombre en sí.

¿Por qué visitar Brujas?

Brujas es preciosa, ¿cómo la puedo describir? Pequeñas calles de piedra se hallan alrededor de la plaza de la ciudad y pequeños puentes de madera sobre los canales verdes y musgosos. Las antiguas iglesias que al entrar son tan magníficas y solemnes en apariencia.

Brujas: Patrimonio de la Humanidad de la Unesco

Brujas fue un próspero puerto comercial desde el siglo XII al siglo XV, donde barcos mercantes de toda Europa trajeron pimienta, canela o chile y productos agrícolas a cambio de algodón y productos de lana de Flandes, en el noroeste de Bélgica. Los canales que unen el puerto de Zeebrugge con el interior de Brujas fueron las principales vías de tráfico de esta ciudad en su apogeo y también la causa de que Brujas se convirtiese en una "ciudad flotante" con sus poblaciones arquitectónicas. Es un monumento antiguo bien conservado, un sitio declarado por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad en el 2000.

Mi tren de Bruselas a Brujas

Me levanté temprano, preparé mi mochila, fui a la estación Brussels Midi y compré un billete de tren a Brujas. Había un tren que iba directo a Brujas cada 30 minutos, así que compré un billete de ida y vuelta de verano que valía 15 euros y seguí las indicaciones en la estación en el tren para esperarlo. El tren me llevó finalmente a Brujas.

Ya nos alejábamos de Bruselas, y pude ver como con el tren de alta velocidad pasábamos por los maizales, los prados serpenteantes, los campos de arroz dorados que se entretejían como si me llevasen a los cuentos de hadas del pasado. A veces se veían vacas y caballos en la hierba verde como si estuviera viendo una película. Nos llevó menos de una hora para una distancia de más de 100 kilómetros. El tren empezó a ralentizarse... Así llegué a Brujas.

El tiempo en Brujas está a favor de mi viaje

Se dice que el tiempo en Bélgica es difícil de medir. En Bruselas estaba lloviendo fuertemente, pero al llegar a Brujas hacía sol. Era tan diferente a la lluvia fuerte y al viento que soplaba y el frío de Bruselas... Hasta tenía una chaqueta fina y un gorro preparados para sentirme más cálido.

Tuve la suerte de ver una preciosa iluminación en Brujas.

Brujas no es demasiado grande para que te pierdas, ni demasiado pequeña para no estar mucho tiempo... Así que Brujas es perfecta para una excursión de un día desde Bruselas. Brujas es muy tranquila y bonita. Pequeñas calles de piedra y casas de ladrillo rojo con una arquitectura antigua conservada durante muchos años fascinan a los visitantes cuando llegan a Bélgica.

Brujas: todo lo que queremos ver

Vi que Brujas tiene todo lo que los visitantes quieren explorar. Los católicos están encantados de visitar innumerables iglesias con una arquitectura antigua construida de piedra arenisca y que se remonta a la antigüedad, pero conservando la forma original con estatuas restauradas para satisfacer a los visitantes que las visitan; a los que les gusta sacar fotos, tienen el poder para capturar las calles estrechas pero atractivas; a la gente a la que le gusta beber cerveza, pueden disfrutar de las famosas cervezas belgas; los cafés tienen una gran vista para disfrutar de una taza de café en una hermosa escena de ensueño en un lugar tranquilo...

Brujas: el hogar de los museos abiertos

Brujas tiene los museos más singulares de Bélgica: el Museo de las Patatas Fritas, el Museo del Chocolate, el Museo de la Cervecería De Halve Maan, el Museo del Diamante o el Museo Greoninge, que cuenta con una colección de pinturas de pintores vivos y pintores del siglo XIV al XX. De hecho, Brujas es un museo al aire libre que tiene una arquitectura y unos paisajes magníficos. Es un complejo arquitectónico con cientos de magníficas mansiones de estilo gótico y casas típicas de ladrillo rojo de Flandes, entre las que destacan el Castillo de Beguinage, la Basílica de la Santa Sangre, la Capilla de Mariastraat, la Capilla de Carlos el Temerario, el ayuntamiento de Brujas en la Plaza Burg, el Hospital de San Juan, el Monasterio de Begijnhof.... e innumerables puentes antiguos que atraviesan el canal de cientos de años.

Mi viaje a Brujas empezó en un barco a motor con muchos visitantes de todo el mundo. El barquero era también nuestro guía a lo largo del canal Groenerei, la principal vía fluvial para explorar Brujas. El barco recorría el camino entre los edificios al borde del agua, pasaba bajo los puentes de hormigón rocoso y a veces curvaba por los canales estrechos donde hay áticos escondidos bajo la sombra. El canal azul brillaba silenciosamente. Durante un viaje de 30 minutos, el barquero nos llevó a través de la arquitectura típica de Brujas, contándonos la historia dorada y la degradación de Brujas, el resurgimiento milagroso desde la segunda mitad del siglo XX hasta el presente de la arquitectura interesante que acabábamos de admirar. Como una película de los recuerdos de un narrador, la Brujas del pasado y del presente me pareció que tenía una elegancia asombrosa e increíble.

Mi primera impresión de Brujas

Dejé el barco en un muelle lleno de flores en el otro extremo de la ciudad. Allí está Nuestra Basílica de Nuestra Señora, en la que se encuentra una obra maestra, la escultura de la Madonna, obra del artista italiano Miguel Ángel, su única composición superviviente traída de Italia. Parece que las calles antiguas de la Brujas central nos llevan a este lugar. Y desde aquí, vuelvo a visitar las obras maestras de la arquitectura de Brujas, donde podemos ver en las puertas el símbolo del Escudo Azul, dado por la UNESCO para proteger el patrimonio cultural humano contra los peligros de los conflictos armados de la Convención de La Haya de 1959.

Con los turistas caminando por calles estrechas y profundas, paso por los puentes curvos que conducen a las ruinas de Brujas con la expectativa de descubrir todas las maravillas del encanto de Brujas bajo el sol de la tarde, que cada vez se vuelve más rojo oscuro.

Frietmuseum: el museo de la patata

Este es el lugar para mostrar toda la historia, desde los orígenes de la patata hasta las primeras patatas fritas. Los visitantes pueden ver una colección interesante de máquinas utilizadas para la agricultura, la cosecha, el pelado, la clasificación y la fabricación de patatas.

También tuve la oportunidad de aprender sobre la fascinante historia de las patatas que se originaron en Perú hace más de 10 000 años; Además pude descubrir la historia de las patatas fritas y cómo llegaron a Bélgica. Con el paso de los años, las patatas fritas se han hecho famosas en todo el mundo y gustan tanto a adultos como niños, por lo que los belgas están orgullosos de que las patatas fritas provengan de Bélgica. Después de visitar el museo, no olvides disfrutar de las auténticas patatas fritas belgas, con una deliciosa salsa y productos cárnicos, en el sótano medieval.

La tierra del chocolate, las patatas fritas y la cerveza

Pero nadie que venga a Brujas se olvide de visitar la arquitectura antigua, porque hay muchas cosas que no pueden ser ignoradas. Lo más importante es probablemente el chocolate, las patatas fritas y la cerveza. Bélgica es el reino del chocolate y Brujas es el corazón de ese reino. Las tiendas de chocolate de Brujas le dan a esta antigua ciudad un dulce aroma, en cualquier momento y en cualquier lugar. En esas tiendas, el mejor chocolate de Bélgica y también el mejor chocolate del mundo, están presente en todo tipo de formas, colores y tamaños que nadie puede rechazar. Disfruta de un trozo dulce de chocolate. Visité el Chocolate Story, un museo especializado en chocolate, donde todo está relacionado con el chocolate: granos de cacao, herramientas para hacer chocolate, figuras mayas - los primeros en encontrar cacao, esculturas de chocolate, la diosa del chocolate, la historia de la humanidad en la fabricación del chocolate... Así que cuando salí del museo, parecía que tenía todo el conocimiento relacionado con el chocolate junto con la obsesión de la dulzura en mente.

¿De qué pueden estar orgullosos los belgas?

Los belgas están orgullosos de lo que representan, como los cómics, la cerveza y los chocolates. Si el chocolate es el símbolo del amor, entonces la ciudad de Brujas es considerada el lugar más dulce del mundo, ya que es el centro de chocolate de Bélgica, el país mundialmente famoso por su cacao en polvo. El chocolate belga es de calidad mundial, lo que no se puede desmentir.

En honor a este símbolo de amor, se ha construido un museo del chocolate. Choco story, el nombre del museo del chocolate, es el museo más famoso que atrae a la mayoría de los visitantes de Brujas.

Museo Choco Story

Te recomiendo que vengas aquí, ya que tendrás la oportunidad de aprender todo sobre el chocolate: pepitas de cacao, trozos de chocolate, aborígenes mayas (los primeros en encontrar el cacao), esculturas de chocolate, la leyenda de la diosa del chocolate...

Además, se puede aprender a hacer chocolate enseñado por el personal del museo. Como muchos otros museos de la ciudad, el museo también se encuentra en una casa anticuada con pisos de madera, escaleras de madera, espacios estrechos y con indicaciones claras.

Compré el billete y me dieron tres tabletas de chocolate blanco y marrón con la guía. Justo al pie de la escalera del primer piso hay un huevo de chocolate grande. El museo presenta la historia de los chocolates desde los inicios en los que era una bebida "sagrada" y una especie de moneda aborigen americana.

Fui a cada sala que tiene un modelo sobre cómo hacer chocolate. El chocolate belga es más conocido por su praliné - una marca "humana" inventada por Neuhaus hace casi 200 años. El praliné es una capa de chocolate con leche o chocolate blanco, dentro hay avellana y una semilla de cacahuete machacada con manteca de cacao. También podemos ver la hermosa tienda, decorada con cajas de caramelos llenas de chocolates coloridos para atraer la visita de los turistas.

Otras cosas interesantes de Brujas

Brujas es un lugar donde la gente siempre está en las calles viejas, con una bolsa de patatas fritas calientes con mayonesa en las manos, y siempre acaban en el Museo de las Patatas Fritas para descubrir este museo único.

Pero para mí, lo más atractivo de Brujas es la cerveza. Este es el hogar de las famosas marcas de cerveza belgas como Brugge Tripel, Brugge Blond, Brugse Babbelaar, Straffe Hendrik... pero mi cerveza favorita es la cerveza dorada como la miel en barriles de roble producida por las iglesias de la región de Flandes.

En resumen, me gustaría hacer una lista de algunos de los lugares más famosos para visitar en Brujas, aparte de los museos.

• La Iglesia de Nuestra Señora

Desde lejos vi el horizonte de la torre más alta de la ciudad con una longitud de 122, 3 m construidos de piedra en 1089. El espacio es tranquilo y tiene bellas obras de arte.

Lo mejor aquí es la escultura de la Virgen y el Niño del escultor Miguel Ángel que data entre 1501 y 1504 y que es la única escultura de Miguel Ángel que hizo después de salir de Italia.

• Campanario Belfort

Si hubiera tenido mucho tiempo, debería haber hecho cola para visitar este campanario y tener una vista panorámica de Brujas desde arriba. La torre fue construida entre 1248 y 1300, con una altura de 83 m. Hay que subir 366 escalones para llegar a lo alto de la torre, donde hay un campanario de 47 campanas grandes que pesa casi 27 toneladas y que vibra cada día.

Sin embargo, debido a la falta de tiempo ese día, no pude subir, pero lo haré si llego a tener otra oportunidad para subir el campanario cuando regrese a Brujas por segunda vez.

• Plaza Grote Markt

Visité el Grote Markt, un lugar donde muchos turistas vienen a sacarse fotos. En el centro de la plaza hay dos estatuas de Jan Breydel y Pieter de Coninck. Se trata de dos famosos líderes históricos belgas que participaron en el levantamiento de la región flamenca en 1302, una de las tres principales regiones de Bélgica contra la ocupación del rey francés. A la izquierda está la plaza del ayuntamiento y detrás de los sitios de comida hay coloridas casas.

¿A que no sabíais que el mercado navideño que montan en la plaza a final de año es uno de los mejores mercados de Navidad de Europa?

Información útil para los turistas en su primera visita a Brujas

• Situada al noroeste del país, Brujas es una de las ciudades más grandes, capital de la provincia de Flandes Occidental en el Reino de Bélgica. El centro histórico de la ciudad es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.

• Desde la Ciudad Ho Chi Minh, vuela a Bélgica con la compañía Air France. Desde el centro de Bruselas, coge el tren a Brujas.
• Brujas es un paraíso de tiendas de chocolate, sobre todo Dumon. Hay tres tiendas famosas: 11 Simon Stevinplein; 6 Eiermarkt y 6 Walstraat.
• Hay innumerables restaurantes para disfrutar de la cocina belga.
• Deberías visitar Tom's Diner o el museo In't Nieuw a un precio asequible.
• Ven a Brujas, debes disfrutar de la cerveza que se produce aquí. Brugse Zot es el orgullo de las cervecerías tradicionales. Es una cerveza de alta fermentación con malta, lúpulo y levadura. Si quieres saber más sobre el proceso de producción y la historia de la cervecería, puedes participar en este tour y probar la cerveza.
• Otros quesos famosos son el Passendale, el Rubens o el Maredsous, que se hacen en los antiguos monasterios y todavía se hace con métodos tradicionales, manteniendo el olor durante mucho tiempo.
• Hay hoteles y pensiones por todas partes, son muy fáciles de encontrar. El precio medio es de 60-100 euros/noche.
• Las entradas para visitar el museo del chocolate cuestan 6, 5 euros.

Me gusta Brujas no solo por su belleza sino también por el alma escondida en ella. Encuentro en Brujas la tranquilidad. Brujas, como en el país de las maravillas, siempre doy cada paso en el camino, para no perderme nunca con mis pies, para descubrir por todas partes esta ciudad pequeña y encantadora.

Las pequeñas calles, los callejones de Brujas me llevan paso a paso... Me sumerjo en el claro rayo de sol de Brujas para escuchar lo que lleva a los visitantes a la ciudad, ese sonido del viento soplado en forma de susurro de algún lugar lejano.

Brujas es querida en cada calle, es tan bonita como el estilo de Hoi An. Aunque no es comparable a Hoi An en términos de arquitectura en Europa, en mi opinión ambas ciudades tienen la misma atracción invisible que usa la palabra ciudad natal como el "alma de la calle". No son lugares donde destaquen los bares o los clubs, pero tienen el mismo poder de ferocidad y de locura.

Me doy cuenta de que a menudo, cuando me gusta algo, el tiempo que paso con él siempre pasa muy rápido, y me pasó lo mismo en mi "historia de amor" con Brujas. No pude encontrar nada para decir adiós antes del viaje de vuelta a Bruselas.

Es hora de decir adiós

Después de irme de Brujas, echo mucho de menos este lugar, y recuerdo las bonitas casas que están una al lado de la otra en los callejones, recuerdo el pequeño río que hay entre los edificios, recuerdo las majestuosas iglesias... En la esquina de la calle en la que me siento por la noche viendo a una Brujas que desaparece... Recuerdo el coche de caballos en la carretera y recuerdo también el paseo en bicicleta para encontrar el viento que sopla muy lejos en el río.

¡Ya subí al tren! Vuelvo a Bruselas. ¡El siguiente lugar para visitar en Bélgica debería ser la aventura de Tintín!

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