Y me dejaron plantada

Hace una semana tenía una cita. Y me dejaron plantada. Ayer por la tarde había quedado con mi amiga para terminar de hablar todas las cosas del viaje que hoy haría. Y me dejó plantada. Al cabo de tres horas encerrada aquí esperando; había quedado con otra amiga para ver un partido de futbol. Y no iba a dejarla plantada. No creí conveniente dejar un mensaje porque podía hablar con ella más tarde y yo iba a venir derechita a casa pero ella sí lo creyó conveniente. Y me ha dejado plantada. Le ha molestado que me vaya dos horas y poco cuando yo estuve más de tres horas esperándola. Y me ha dejado plantada por eso. Dice que le ha molestado. Y pensaba que la iba a dejar tirada. ¿De veras cree alguien que yo soy capaz de hacer eso a una amiga que iba a recorrer miles de kilómetros por mí? No me eches las culpas de algo de lo que yo no tengo culpa. Tú eres la que me has dejado plantada aquí con el colchón y todas las cosas que compré para que estuvieras más cómoda en este cuartito tan pequeño. Nunca has viajado sola y la verdad es que entiendo que no seas tan valiente como yo para hacerlo pero no me eches las culpas a mí. Estabas buscando la menor excusa para quitarte del medio y ahora lo que no sé es si hacer como que no me importa cuando sí lo hace, si enfadarme o no contigo o si simplemente quedarme aquí todo el día metida en la cama porque no tengo ganas de hacer otra cosa. Espero que te des cuenta de lo que has hecho; a mí me has hecho mucho daño. Acaso tengo el gafe?