Piratas, al abordaje! (Para que digan que los estudiantes no trabajamos)

Anoche fue una de las mejores noches de mi vida. Creo que nunca me había puesto de acuerdo para disfrazarme con nadie en carnavales. Me había disfrazado pero poco (la verdad) y siempre yo sola. Esto de disfrazarme es una constante aquí en Inglaterra porque siempre estamos organizando fiestas temáticas que son muy inglesas pero el disfraz de anoche es sin duda mi favorito: el de pirata. Aquí os dejo una foto en la que podéis ver tanto la camiseta del carnage como mi disfraz (y el de mi amiga, que fueron la sensación de la noche):

El caso es que hoy además de contaros lo de anoche quería contaros que aunque se quito el disfraz de madrugada, esta chica no perdió el coraje propio de una buena pirata. Yo sí, sobreviví y fui a clase después de seis o siete horas de sueño con un poco de mareo no se si de la resaca o del dolor de cuello con el que me llevo levantando casi tres semanas; pero ella tenía una clase magistral, tenía que hacer la conclusión sobre un trabajo que tenía que entregar hoy antes de las cuatro y tenía un seminario. Pues bien, durmió dos horas, terminó su trabajo y a las tres salió de su casa para entregarlo. Cuando llega a la sala de ordenadores descubre que se había mandado al email el documento equivocado (a fuerza de no encontrar el pen drive se agudiza el ingenio) y por suerte me encontró a mí de camino a casa para volver a mandarse esta vez con el archivo adecuado.

Cosas que solo pasan cuando tienes prisa le pasaron a ella. Primero tenía el ordenador apagado, el navegador no habría, luego volver a correr hasta los ordenadores e imprimirlo. Yo le estuve guardando la cola aunque tampoco es que sirviera de mucho. A menos siete minutos estaba imprimiendo el trabajo, a menos tres minutos escribía su nombre en la portada que todos tenemos que poner para presentarlos y a en punto justo entregó su trabajo mientras le contaba al de la oficina de nuestra escuela todo lo que le había pasado. Esta chica tan maravillosa llamada Guiomar sí que se tiene ganado que hoy la feliciten por ser el día de la mujer trabajadora porque es una heroína y una auténtica bucanera que puede con todo. Ahora estará descansando, que se lo ha ganado, pero en un par de horitas va a enseñarme más cosas sobre algo que yo creía que detestaba pero que está empezando a gustarme: el futbol. Y esto va por los que dicen que los estudiantes no hacemos nada...