Berlín: 5 cosas que no te puedes perder

Berlín me encantó. Fui en febrero a visitarlo, y a reencontrarme con una de mis grandes amigas de Madrid, Maialen, que estaba pasando su año de Erasmus en New Castle, por lo que cuadrar tiempos para vernos en Madrid era algo más difícil, así que decidimos viajar juntas, y descubrir una nueva ciudad, como mejor opción.

Las dos disfrutamos mucho la ciudad, no sólo por su ambiente alternativo, internacional y con un alto nivel de diversidad cultural que daba un montón de juego, sino que también por su alta relevancia histórica. Es una ciudad con una historia diferente escondida en cada rincón, y definitivamente recomiendo visitarla.

Como buscar en internet qué lugares visitar en Berlín es muy fácil, y dará miles de resultados con todo tipo de información, yo hablaré de 5 cosas que hemos de hacer al visitar Berlín, basándome en mis impresiones de la ciudad, y en lo que yo más disfruté de ella.

Viaje a Berlín. Maialen y yo, sobre el río Spree, y la Catedral de fondo. Febrero de 2018.

1. Haz un Free Tour.

Mis amigos en ocasiones me preguntan si es que me llevo comisión alguna por promocionar los Free Tours, y si no, que de dónde procede mi obsesión con ellos.

La verdad, es que simplemente considero que la mejor manera de conocer una ciudad es a través de su historia, y precisamente Berlín, capital de la Guerra Fría, e importante componente en la Segunda Guerra Mundial, tiene mucho que contar.

Nosotras hicimos un Free Tour el primer día, y con él visitamos, y comprendimos la historia de la Puerta_de_Brandeburgo, el Memorial al Holocausto, la Sinagoga Rykestraße, protagonista en la Noche de los Cristales_Rotos, el memorial a la "Quema de libros por los_nazis", la Catedral y la East Side Gallery.

Después del tour, sabíamos mucho más sobre la ciudad, qué otros sitios debíamos visitar, y por qué zonas no podíamos olvidarnos de pasear, y, sabiendo lo que esta ciudad había vivido, podíamos mirar con otros ojos, ojos que comprendían, las bonitas calles de la capital alemana.

Memorial al holocausto. Berlín, febrero de 2018.

Catedral de Berlín. Febrero de 2018.

2. No pierdas detalle en el Muro de Berlín.

Para conocer más en profundidad la historia del Muro que dividió la ciudad del 13 de agosto de 1961 hasta el 9 de noviembre de 1989, tomamos otro tour donde nos explicaron, durante dos horas, todos los acontecimientos que en torno a él giraron; desde las estación fantasma, hasta la trágica muerte de un adolescente por intentar cruzarlo, que inspiró a Nino Bravo en su canción "libre". Pero esta fue tan solo una de las 136 muertes que este trágico muro ocasionó.

Además de conocer más los detalles históricos, pudimos visitar el Sitio Conmemorativo del Muro de Berlín, en la Bernauer Strasse, donde se ocasionó la primera muerte, y que conserva la única zona de Muro que incluye prácticamente todos los elementos que lo componían: un muro interior y otro exterior, la franja de la muerte, alambradas y una torre de vigilancia.

Pero el Muro de Berlín no son sólo penas. En reivindicación a todo lo que significó el Muro para los habitantes de Berlín, tras su derrumbamiento se convocó a 102 artistas de distintos países para que pintaran sobre la hasta entonces intocable parte Este del muro, distintos murales que rindiesen homenaje a la libertad, y que documentaran la euforia y esperanza por un mundo mejor, que fueron exaltadas con el fin de la Guerra Fría.

Hoy en día, la East side Gallery es considerada como la galería al aire libre más extensa del mundo (1. 316 metros). Sinceramente, me parece un lugar de reflexión e inspiración, en el que pensar en el mundo en el que vivimos, y cuánto han cambiado realmente los valores y sistemas políticos al rededor del mundo. Si el poder, ahora en manos de otros y tomando otras formas, no nos sigue oprimiendo, y si estos problemas que vemos reflejados en el muro de la esperanza no perduran hoy en día, mas que en otros países a los que no queremos mirar.

East side gallery. Graffity del famoso beso fraternal socialista. Berlín, febrero de 2018.

3. Alquila una bici

Uno de los mejores días de nuestro viaje, fue en el que alquilamos una bicicleta, y nos recorrimos la ciudad pedaleando.

Fuimos parando en los principales lugares, que ya conocimos en el tour, y examinándolos detenidamente, comprendiéndolos y admirándolos.

Descubrimos rincones escondidos, fuimos por la orilla del río, visitamos el barrio turco y el alternativo, y, en general, nos sumergimos un poquito más en la ciudad de lo que hubiéramos podido hacer nunca a pie.

Sin duda, la bici fue un acierto, y hasta las más recónditas calles de Berlín nos lo confirmaron aquel día.

El río Spree. La Catedral de Berlín a la izquierda. Febrero de 2018.

4. Probar la Currywurst.

La reina de la comida callejera en Berlín, la salchicha frita con salsa de curry, es una comida que no puede faltar en nuestra visita a la popular capital.

Su precio ronda los 4€ con patatas, y aunque es un plato básico, creo que mediante la comida, también se disfruta una ciudad.

Es el mejor plato para comer en un día de sol, sentados en una plaza, tal vez la Alexanderplatz, o frente al río, tranquilamente disfrutando del entorno y la comida.

Además, ¡muy recomendable para bolsillos apurados!

5. Disfruta del ambiente alternativo.

Berlín, como ya he dicho, es famosa por su diversidad cultural, que atrae a turistas de todo el mundo.

El barrio judío, el barrio turco, o el propio barrio alternativo, son los mejores ejemplos para disfrutar de este movimiento relacionado con el arte y la creatividad.

Recomiendo entrar en cada uno de los sitios que nos llame la atención desde fuera, puesto que por dentro puede ser alucinante.

Uno de los días que paseábamos por el barrio alternativo, Friedrichshain, descubrimos una especie de casa abandonada, rodeada de puestos que a esa hora estaban cerrados, pero que parecían tener buena pinta.

En cambio, la gran casa estaba iluminada por dentro, y decidimos ir a echar un vistazo.

Dentro, había mesas con distintos artistas que exponían su trabajo, un dj, un puesto de bebidas y palomitas, y dos pantallas que proyectaban películas Amateur. Además, el lugar por dentro, era una nave, decorada totalmente al estilo Underground, chulísimo, y los baños eran únicos, con sus paredes repletas de grafitis, y su espejo con forma de ojo de pez.

Berlín, febrero de 2018.

Esto es tan sólo un ejemplo de los miles de rincones que se ocultan tras las calles de Berlín, y que no debemos de tener miedo de descubrir, puesto que son totalmente merecedores de nuestra atención. Berlín es un lugar para explorar.

Esto ha sido todo por hoy, espero que os haya gustado mi post, y que os haya podido transportar, aunque sea por sólo unos minutos, a la magnífica vida berlinesa que tan famosa es en todo el mundo.

Y si os habéis quedado con ganas de más, aquí os dejo un vídeo que hice cuando volví de Berlín, en el que grabé los principales sitios que visitamos en la ciudad.

Un saludo, ¡Y hasta la próxima!

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