Bellinzona

Bellinzona es una ciudad suiza, capital del cantón del Tesino, “cantón italiano” de Suiza, donde se habla principalmente italiano. En este cantón podréis observar en las ciudades y pueblos una cierta influencia de la arquitectura italiana, puesto que es la zona más próxima a este país.

Bellinzona es una localidad pequeña que se puede visitar en un día, destacando tres fortalezas medievales muy bien conservadas, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Estas fortalezas actuaban como defensa de la ciudad, un punto estratégico en el centro de Europa que conectaba Milán y la Confederación Helvética. En el año 1516, los suizos lograron incluir Bellinzona en su confederación.

La entrada a estos castillos es gratuita, salvo algunos días excepcionales que se realiza algún evento. Sin embargo, en su interior hay museos de pago. Se puede comprar un billete para los tres castillos por 18 CHF.

¿Cómo llegar a Bellinzona?

Se puede llegar fácilmente en tren, a una hora y media de viaje desde Varese (Italia), haciendo transbordo en Mendrisio.

El aeropuerto más cercano se encuentra en Lugano, a 30 minutos. Desde esta ciudad se puede coger un tren hasta Bellinzona llegando en menos de 30 minutos.

¿Qué visitar en Bellinzona?

CastelGrande

El primer castillo que encontramos en la ciudad, dentro del casco antiguo, es CastelGrande, el más antiguo de los tres castillos. Fue construido en el siglo I a. C. por los romanos y convertido en el siglo XIII en una fortaleza. Se accede desde la Piazza del Sole, a través de un moderno ascensor o se puede llegar a pie. Se puede dar un paseo por sus murallas y subir a una de sus dos torres (28 metros de altura), donde se puede observar toda la ciudad. Un pequeño museo documenta la historia de los castillos.

Montebello

Para llegar al segundo castillo, hay que tomar un sendero que se encuentra por la parte trasera de la iglesia Collegiata dei Santi Pietro e Stefano. Montebello consiste en una fortaleza amurallada construida entre los siglos XII-XV.

Casualmente visité la ciudad un fin de semana en el cual realizaban espectáculos durante todo el día en el interior de esta fortaleza. Hacían espectáculos de caballos, batallas medievales, malabarismos, música… También había un mercadillo con productos artesanos de la zona y recreaciones de campamentos de la Edad Media.

Sasso Corbaro

Para llegar al tercer castillo, denominado Sasso Corbaro, hay que acceder a una pequeña colina. Se sube en aproximadamente 30 minutos caminando o se puede coger un autobús. El tercer castillo (siglo XV) es el más pequeño, pero no deja de ser impresionante. Lo mejor que tiene son las vistas, ya que se pueden ver los otros dos castillos. Dentro hay un pequeño museo de pago. En la actualidad sirve para albergar exposiciones temporales.

Centro histórico de Bellinzona

Bellinzona tiene bonitas calles por donde pasear, con numerosos comercios. Detrás del encanto de esta ciudad medieval se esconde la vida animada de un centro moderno. Numerosas tiendas y cafeterías invitan a dar un agradable paseo. En el centro se encuentra la Plaza de la Independencia y la Iglesia Collegiata dei Santi Pietro e Stefano.

Fuera del casco histórico también se pueden encontrar algunas iglesias interesantes como la Iglesia de Santa Maria delle Grazie o la Iglesia de San Biagio. Muy cerca de estas iglesias se encuentra la Villa dei Cedri, un buen lugar para descansar y reponer fuerzas. Hay un pequeño tren urbano los meses de abril-noviembre que pasa por los principales lugares de la ciudad. El billete se puede comprar en la oficina de turismo y cuesta 12 CHF.

Es curiosa la forma de vivir de los suizos. Durante el fin de semana se ven principalmente turistas por la calle, los habitantes del lugar suelen permanecer en casa y pocos coches circulan. Reina la tranquilidad en estas silenciosas ciudades.

Como toda ciudad suiza, la moneda es el franco suizo (CHF). En la estación de tren se pueden cambiar euros por francos. Es recomendable cambiar algunos euros porque algunos lugares no se pueden pagar con tarjeta. En ciertos establecimientos se puede pagar con euros, pero mejor no hacerlo porque el cambio te lo dan en francos y lo más seguro te hagan pasar el valor del franco igual al euro, perdiendo dinero en la transacción.  

Bellinzona es una bellísima localidad con una larga historia y casco histórico que mezcla lo histórico y contemporáneo. Pasear por sus calles y fortalezas bien conservadas te hace retroceder en el tiempo. Sin duda merece la pena hacer una excursión a esta extraordinaria ciudad.

Buen viaje!

Top 3 lugares imprescindibles:

1.- Castillo Montebello

2.- CastelGrande

3.- Iglesia de Santa Maria delle Grazie

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