Si solo el título ya ha llamado vuestra atención, puede que os interese saber que este castillo fue proyectado por el arquitecto italiano Antonio Petrini en 1686 por encargo de los obispos de Bamberg.
Esta joyita italiana en tierras alemanas, construida cerca del Memmelsdorf, puede que esté entre las residencias más bonitas y particulares de Baviera meridional. Al pasar la entrada, te encuentras frente a este espectáculo: el castillo se sitúa sobre una especie de pedestal exuberante y lujuriante, rodeado de árboles, jardines y esculturas. Además, el contraste blanco y amarillo del enlucido destaca entre el verde del prado y el azul de cielo.
Reina una paz y tranquilidad inmensas: en el parque os podéis parar a tomar café, pasear por los senderos, admirar las atracciones acuáticas de las fuentes u observar el extraordinario paisaje.
La primera vez que visité este castillo con mis amigos, paseamos por esta calle, a la derecha vimos una fuente rodeada de un campo árido. Nos preguntamos si era un lago que se había secado o algo así, pero no sabíamos la respuesta. Volví al Schloss Seehof unas tres semanas después en compañía de mi hermano (esta vez, con una guía turística) y me di cuenta de que, efectivamente, se había vuelto a llenar el lago de agua.
Tras haber compartido con vosotros, queridos lectores, este dato curioso, os digo que el lugar es realmente increíble. Me gusta el ambiente real y a su vez, sencillo, me atrevo a decir. Es un lugar perfecto para sentarse en el prado, charlar y echarte unas risas con tus amigos.
Vamos, ¡justo lo que hicimos nosotros! Aunque bueno, no toméis ejemplo porque llegó un momento en el que nos pusimos a hablar de política italiana. Es que es imposible negarte a darles tu opinión a unos extranjeros que se mueren por saber qué piensas de la actual situación en Italia. Aquí salgo con Martina (Italia), Judith y Jenny (Hungría), María (España), Eda (Turquía), Maxence y Benoit (Francia), nos lo pasamos muy bien esa tarde.
Recomiendo sin duda a todos los que estén por la zona de no dejar escapar la oportunidad de visitar esta increíble residencia: ¡no os decepcionará!